Wonho no era bueno escondiendo sus sentimientos; cuando escuchó la palabra 'sí' salir de la boca de Changkyun, quiso levantarse y dar saltos de alegría. Una gran sonrisa se formó en sus rosados labios e intentó disimularla en vano: no podía evitarlo... estaba muy feliz.
Su entusiasmo le resultó obvio a Changkyun, que negó con la cabeza y soltó un suspiro sin perder la sonrisa.
—Así que... ¿ahora somos novios?
El castaño dejó escapar una risita infantil al pronunciar la última palabra, y el menor le soltó la mano, completamente abochornado. Toda esa situación ya era vergonzosa de por sí, y Wonho no estaba ayudando.
—Necesitas dejar de hacer eso. —Hoseok alzó una ceja y ensanchó su sonrisa por el nerviosismo de Changkyun—. ¿Podrías intentar ser menos...? Bueno, ya sabes.
—¿Menos qué? —le instó a seguir.
Changkyun se removió en su asiento, sin saber muy bien cómo pedírselo. Finalmente se decidió por ir al grano.
—Menos cursi.
La boca de Wonho se abrió en una mueca de fingida ofensa.
—Oh, Changkyunnie, no puedes pedirme eso.
—...No me llames así.
—¿Prefieres lobito? —inquirió divertido. El bufido que recibió en respuesta le hizo reír enternecido: disfrutaba demasiado molestando a su Changkyun, el cual estaba tan avergonzado que se había tapado medio rostro con una mano.
Entonces, un carraspeo atrajo la atención de ambos. Los dos giraron el cuello hacia la persona que estaba parada al lado de su mesa: se trataba de una señora de cincuenta años, de cabellos cortos y oscuros; miraba al chico de cuarto curso con desaprobación y con los brazos en jarra.
—¡Mamá! —exclamó Hoseok animadamente antes de levantarse para abrazarla. Changkyun se sorprendió al oír eso: ¿qué hacía su madre allí?
La mujer le dio unas palmaditas en la espalda y le apartó impacientemente.
—¿Qué te dije acerca de traer aquí a tus amigos? —le preguntó con mala cara.
—¿...Que les cobre el doble? —Wonho recibió un golpe que le hizo reírse y rodear a su ahora sonriente madre con un brazo antes de dirigirse a Changkyun—. Esta es mi madre —explicó orgulloso.
El pelinegro estaba tan confundido que tardó un par de segundos en levantarse y hacerle una reverencia como era debido.
—En...encantado.
—¡Déjate de formalismos! —dijo ella sacudiendo las manos—. Los amigos de mi Hoseok siempre serán bienvenidos en mi cafetería.
¿Su cafetería?
Changkyun miró a su alrededor y entendió todo: así que ese era el local de su madre...
—¡Ah! Es un sitio muy bonito —se apresuró a decir. En verdad era un lugar muy acogedor y agradable. La madre de Wonho le sonrió cálidamente.
—Muchas gracias —suspiró echándole un vistazo también al local con un rostro cansado—. Mi Hoseok suele ayudarme a mantenerlo, no sé qué haría sin él —explicó mirando a su hijo casi con adoración y Wonho le devolvió la sonrisa. A Changkyun también se le contagió una pequeña sonrisa por la bonita relación que mantenían entre los dos: se quedó mirándoles, incluso llegando a sentir un poco de envidia—. ¿Y cómo te llamas, cariño?
La pregunta sacó al pequeño chico de su ensoñación y perdió la sonrisa.
—S...soy Lim Changkyun.
ESTÁS LEYENDO
A dos notas de tu corazón [WonKyun]
FanfictionPara Changkyun, Wonho es como una estrella: algo muy brillante, pero también lejano e inalcanzable. El popular chico vive en un mundo totalmente distinto al de Changkyun, y él es muy consciente de ello. Tiene claro que, si intenta aventurarse hacia...