Me ví besando a alguien eso me inquietó, era un chico el cuál no podía ver su rostro aunque quería.
Abrí los ojos sobresaltada mirando a todas partes desgraciadamente seguía en el mismo horrible lugar.
Es estar como en una pesadilla pero esto es la realidad y no puedo cambiarla.
No sé porqué sonreí involuntariamente recordando el beso que soñé, sintiendo esos labios tan suaves y ese beso tan apasionado.
Mi sonrisa se borró al ver que la puerta se abría de nada servía pedir ayuda, igual nadie podría ayudarme y estos psicópatas no me ayudarían.
- Me duele la pierna - me quejé mirando a Bruno con mala cara.
- Que quieres que haga? además fué tu culpa.
- Yo te dije que me dispararas? - le grité histérica.
- Te lo merecias!! - me culpó.
- No te he hecho nada, nisiquiera te conozco!!
- Eres una jodida perra los millonarios como ustedes no merecen todo lo que tienen!!
- Como sabes que soy millonaria, que es lo que sabes de mí aparte de eso y mi nombre?
- No tengo porqué decirte nada me bastó con ver como tratas a los demás sintiéndote superior a ellos!!
- Eres un jodido psicópata, como sabes todo eso? - lo insulté.
- Te ví esa vez como trataste a ese vagabundo y me dio tanto odio ver lo que hiciste.
- Y por eso me secuestraste? - solloze furiosa.
- Tengo otras razones por la que lo hice.
- Porqué? - grité queriendome levantar pero no podía.
- No te daré explicaciones porque no las mereces ahora comete esto - me tiró un plato de comida que lucía asqueroso.
- No voy a comer eso!! - exclamé.
- Las niñas mimadas como tú no comen esas cosas cierto? pero tú lo harás quieras o no.
- No voy a comer esa mierda, que asco!! - me acercó el plato y me metió la comida en la boca apunto de asfixiarme.
- Te lo vas a comer - rió.
Escupi la comida y él reía como maniático.
- Es asqueroso sabe horrible!! - le grité.
- Es comida podrida que esperabas? - rió y salió de la habitación.
- Te odio por hacerme esto!!! - grité con odio pero ya nisiquiera me escuchó.
Tengo tanta hambre pero no comeré esa mierda, está horrible y no quiero esto.
Me pregunto desde cuando ha estado persiguiéndome y acechando todo lo que hago, si soy una maldita pero él es peor y lo detesto.
Me arrastré en el suelo intentando quitar las cadenas que habían alrededor de mis muñecas pero no podía.
Mi padre tiene la culpa de esto él me mandó a ese lugar ese día y por cobarde me mandó a mí, es como si supiera lo que iba a pasar y prefirió mandarme a mí.
- Te odio!! - exclamé refiriéndome a mi padre.
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Síndrome De Estocolmo.
RomantizmEra la típica chica que cree que tiene todos sus pies gracias al dinero, creía que con mi belleza rubia era suficiente, me sentía tan superior a los demás y aveces hasta humillaba a las personas. Era tan avara solo me interesaba el dinero y el poder...