Si le preguntas a Viktor Nikiforov la razón por la cual decidió dedicarse al patinaje artístico, él simplemente te mostrará su famosa y sexy sonrisa y te cambiará el tema descaradamente. Lo mismo sucede si le preguntas sobre su pasado. El soltero ma...
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-Después de eso, yo me fui a Japón a buscarte y bueno...ya conoces el resto.
Víctor y yo estábamos sentados frente a frente en la orilla de la cama, sin embargo, él no me veía a los ojos. Me pregunté que pasaba por su cabeza.
-He sido un cobarde, Yuuri y sé que debí de haberte dicho la verdad desde un principio - la voz de Victor se quebró - pero tenía miedo de que pudieras alejarte de mi - tomó mi mano derecha y besó el anillo de compromiso. Silenciosas lágrimas recorrían su hermoso rostro - Yo entendería perfectamente que no quisieras relacionarte con alguien tan problemático como yo, pero no podría soportar que te fueras de mi lado.
En todo el tiempo que tenía de conocer a Victor, solo lo he visto llorar una vez; cuando quise terminar nuestra relación de entrenador/alumno y él creyó que me refería a la relación sentimental. Después de escuchar su historia, podía entender las razones para ocultarme su pasado. Victor creció con tanto dolor y rechazo que lo único que lo salvó de caer en el abismo fue el patinaje y más adelante nuestra relación. En realidad yo no estaba enojado, solo deseaba hacerle entender que mi amor por él iba mucho más allá de cualquier problema.
-Victor - acaricié su mejilla - estos años contigo han sido los mas felices de mi vida. Eres lo mejor que me ha pasado - me acerqué un poco mas hacía él para darle un pequeño beso en los labios - Pase lo que pase yo me quedaré por siempre a tu lado. Somos una pareja y enfrentaremos juntos al mundo.
Victor me abrazó fuertemente y besó con ternura mi mejilla. Podía sentir su cálida respiración en mi oído.
-Yuuri - susurró - Te amo.
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Por petición de Ana y Dominique en vida, el funeral se llevaría a cabo en San Petersburgo, dónde serían cremados y resguardados en una capilla.
Cuando llegó la hora de hacer todos los preparativos para acudir a la funeraria, un hombre apareció por la puerta de la habitación. Su porte era tan elegante como el de Victor e incluso era mucho más alto que él, sus cálidos y profundos ojos color castaño contrastaba con su piel clara, su cabello y su barba de candado castaño claro. No se necesitaba ser un genio para saber que el era el hermano mayor de Victor. El parecido, sobre todo en los ojos era bastante evidente.
En cuanto me vio, me sonrió de forma muy agradable.
-Tu debes de ser Yuuri - me extendió la mano para saludarme mientras me jalaba para besar mi mejilla - Es un placer poder conocerte al fin, aunque es una pena que sea en una situación como esta - de pronto se sonrojó - ¡Oh, lo siento! Mi nombre es Sergei Volstov, soy... - le lanzó una mirada a Victor.
-No te preocupes, ya le he contado todo - rodeó mis hombros con su brazo - Entre Yuuri y yo ya no habrá más secretos.
Víctor y Sergei se encargaron de darle la triste noticia al pequeño Nathaniel sobre la muerte de sus padres. Aunque al principio no entendía del todo la situación (cómo el por qué ahora sus padres lo cuidarían desde el cielo) su deseo por verlos se convirtió en dolorosas lágrimas que me partieron el corazón.
