Capítulo 21

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*Pov Levi*

Habíamos dormido un día entero. No tenía ni idea de cómo esta chica podía dormir tanto. La resaca le había durado desde la mañana, y suponía que el dormir hasta el atardecer le habría sentado bien. 

Aún estaba recostada en mi pecho, y no tenía ni la más mínima intención de moverme. Tenía una cara muy inocente a mi parecer, sus largas pestañas se movían cuando respiraba, en definitiva una belleza.

Se movió mientras dormía, se frotaba los ojos con la mano, incorporándose a la vez que miraba a su alrededor.

Mikasa: Mmm... Levi, ¿qué hora es? - Dijo soñolienta, bostezando.

Levi: Buenas tardes, Bella Durmiente. - Alargué la mano cogiendo mi teléfono. - Pues son casi las siete, pero tranquila, es domingo y mañana es festivo. 

Mikasa: ¿He estado durmiendo hasta ahora? - Se puso una mano en la cabeza. - He perdido un día entero, a eso se le llama ser productiva... - Dijo mostrando una clara ironía en su tono. - ¿Por qué no me has despertado?

Levi: Porque estabas jodidamente preciosa, ¿te sirve? - La sinceridad ante todo, y en su caso, el sonrojo.

Mikasa: Y-ya... - De pronto su cara cambió. - ¡¿Y Jean?!

Levi: Supongo que se habrá ido a su casa, no creo que se haya quedado hasta ahora sin dar palo al agua.

Mikasa: Me tengo que disculpar con él, lo he dejado solo y me he ido sin decirle nada. - Cogió su teléfono y empezó a escribir un mensaje a toda prisa.

Levi: No es para tanto, no tiene cinco años. - Fruncí el ceño inconscientemente.

Mikasa: Ya, ya... Por ahora déjame pedirle disculpas. - Después de estar por casi dos minutos escribiendo a velocidades descomunales apagó el teléfono, acompañado de un largo suspiro. - Genial, ahora no tengo sueño.

Levi: Aún son las siete, pero si quieres hacer algo podemos ir a dar una vuelta por los alrededores. - Me levanté.

Mikasa: Claro, ¿conoces algún lugar que valga la pena?

Levi: Supongo que podemos ir a por un helado, hay una heladería en la calle de al lado. - Habían abierto una esta semana, y aunque no me gustaban demasiado los dulces pensé que era una buena idea.

Mikasa: Es domingo, ¿recuerdas?

Levi: Pues... Siempre podemos preparar palomitas y ver una película. - Señalé un estante. - Allí las tengo, puedes elegir.

Mikasa: Me gusta el plan. - Se dirigió a la estantería, arrodillándose para fijarse en las que estaban situadas en la parte de abajo. - Veo que te gusta el cine, ¿eh? Aquí tienes muchas películas, la mayoría no las conozco. - Terminó sentada en el suelo, mirando títulos de distintas películas.

Levi: Mejor así. - Cogí el teléfono que tenía en el bolsillo trasero de mi pantalón. - Voy a encargar comida, ¿qué te apetece? - Apartó la mirada de los vídeos, mirándome.

Mikasa: ¿Qué te parece algo sencillo, como pizza?

Levi: ¿Qué te parece la margarita? - No solía comer pizza, y en mi vida no había probado otra que no fuera la margarita.

Mikasa: Sí, pide esa. - Volvió a dirigir su mirada a los DVD, mientras yo encargaba la pizza. - No sabía que también tenías temporadas de series.

Levi: La mayoría son regalos de una imbécil. - Giré la mirada, ya había encargado la pizza y veía como ella miraba con preocupación las películas, con el ceño algo fruncido.

Ni en un millón de añosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora