Este capítulo está dedicado a dos personitas: a NaiilaGalvan que hoy es su cumpleaños\(^o^)/ ¡Muchas felicidades!💖🎉
Y también para BooksAndyMar.
Espero que les guste 😁😍😉Laerthes estaba en su silla de ruedas eléctrica mirado por la ventana de su oficina. Se encontraba en el último piso por lo que podía ver a la perfección todos los rascacielos que le rodeaban.
Ya tenía tres meses que no había puesto un solo pie en una de sus empresas, debido a un accidente que lo dejó paralitico. Los médicos no le habían dado ninguna esperanza para volver a caminar y ahora estaba destinado a morir en esa silla. Dasha, su esposa, siempre lo acompañaba para cualquier cosa que él necesitara. Se había convertido más en su enfermera personal que en su compañera y eso no le gustaba a ella, pero debía hacerlo, era su marido y no tenía otra opción por que él no quería contratar a alguien más que lo cuidara.— ¡Dasha!—gritó el hombre para que su esposa se apurara con el sacó, que sin querer había ensuciado al momento de llevarle un café a su marido.
— ¡Ya estoy aquí! No tienes porque gritarme—Dasha le ayudo a colocarse el saco y acomodo su corbata haciéndole un nudo perfecto.
—Parece que lo haces al propósito para que yo grite—gruñó él.
—Créeme que si fuera así, ya me habría ido—la mujer hizo una mueca de disgusto.
—Tenemos que irnos. A la estúpida de tu sobrina se le ocurrió un buen momento para vender sus acciones de la empresa—dijo con sarcasmo.
— No hables así de ella. Es la hija de mi hermana por lo tanto quiero más respeto para ella—dijo enojada.
—Una hija buena para nada que terminó embarazándose del primer idiota que se encontró. Bendita la hora en la que me tuve que asociar con su padre para poder hacer crecer HAB’S. Ahora por eso no solo tendré que aguantar a los otros idiotas, sino que también a un intruso en mi empresa.
—Ya deja de andar quejándote como viejo cascarrabias. Eres peor que una mujer.
—No tanto como tú. Mejor ya cállate. Me aburre estar escuchándote—Dasha rodeo los ojos malhumorada y acompañó a su esposo a la sala de juntas. Estaba cansada de la actitud de Laerthes y estaba segura de que si seguía así, lo iba a terminar botando.
Cuando entraron, todos los directores y además socios de HAB’S, se encontraban en su respectivo lugar. Laerthes tomó el suyo con Dasha a su lado y esperó a que su sobrina llegara. No pasaron ni diez minutos cuando Berenice se presentó con dos mujeres a su lado. Una tenía el pelo castaño, con facciones delicadas y un poco más pequeña que la otra, quien tenía el pelo negro y corto en un estilo carre.
—Hola chicos. Quiero presentarles a Phoebe Monroy y a Verónica Hill—dijo Berenice con una enorme sonrisa. Si no fuera por la silla, Laerthes se habría ido para atrás de tan solo ver la estupidez que estaba a punto de cometer su sobrina. —Se podría decir que son como mis suplentes permanentemente. Phoebe, Verónica, ella es Rowena, encargada de todas la relaciones publicas. Corban, director de finanzas. Krischnan, director de ventas. Tibalt, director de sistemas—en ese momento en el que él fue presentado, al mirar fijamente a la pelinegra sintió una atracción enorme hacia ella. Tibalt no era tan guapo como Krischnan, pero a pesar de eso tenía unos ojos muy encantadores que lo hacían ver un hombre tierno y romántico. Una ventaja con la que podía conquistar mujeres. —Y por ultimo Dasha y Laerthes… Mis tíos. Ellos son los dueños de HABS y de ahora en adelante sus nuevos socios.
—Es un gusto para nosotras poder estar aquí para trabajar con ustedes. Esperamos podernos llevar bien con cada uno de ustedes —dijo la castaña enmarcando cada palabra.
— Verán, cada uno de los miembros que están presentes, aparte de trabajar en la empresa como directores, tienen mucho dinero invertido en proyectos que a un futuro, no muy lejano, harán que HABS crezca aun más, siendo una de las compañías numero uno a nivel mundial. Ustedes ocuparan mi lugar al lado de Krischnan, director de ventas de la sede que se ocupa aquí en Sheffield y aparte, hermano mío. Estoy segura de que los tres se llevaran muy bien, sé que no tendrá ningún inconveniente trabajar ustedes. ¿Verdad hermanito?
—Eso espero—susurró Krischnan con seriedad.
— ¿Estás segura de lo que vas a hacer?—preguntó Laerthes con la voz ronca llena de disgusto.
—Completamente. Necesito el dinero que mis padres invirtieron aquí, quiero irme cuanto antes—el humor que tenia de niña risueña hace unos segundos había desaparecido para ser remplazado por uno lleno de tristeza.
— ¿Qué referencias traen? No esperaran a que meta a un par de extrañas a las empresas HAB’S.
—Pero por supuesto que traemos muy buenas referencias de otras empresas en las que hemos trabajado.
—Por favor tío, Deo ya se encargo de revisar todos sus expedientes y son buenas en lo que hacen. Permíteles que permanezcan aquí—Laerthes dio una mirada de indiferencia y rodeos los ojos.
—Creo que la mayoría de nosotros, no tenemos algún problema con que ellas se queden en tu puesto—sonrió Tibalt hacia Verónica quien le dio una mirada de poco interés.
—De acuerdo, pero si en un mes no veo resultado por parte de ellas, se marcharan.
—Dudo mucho que salgamos de aquí sin decir nada, ya que una parte de esta empresa comenzó a pertenecernos desde el momento en que Berenice nos vendió sus acciones—acotó Phoebe con una sonrisa de victoria y guiñándole el ojo al viejo. Si Laerthes creía que se podría deshacer de ellas, estaba muy equivocado. No le quedó de otra más que resignarse por el momento, pero pensó que en cuanto tuviera la oportunidad, las echaría a la calle como solía hacerlo con cada persona ajena a sus negocios.
—Solo espero que ambas, no nos decepcionen—pronuncio Dasha molesta por la actitud de Phoebe.
—No creo que lo hagamos—dijo Verónica con una sonrisa.
Aqui el primer capítulo 😊🙈😄
Besos y abrazos desde México.
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¡Maldito seas! Ahora y siempre
Conto||COMPLETA|| ||Fecha de publicación: 5 de julio|| Ya sólo quedaba una hora para salir de ese maldito lugar. Haber estado encerrada allí por quince años fue una de sus peores torturas. Pero al fin seria libre y cada una de esas personas que la mandar...