Capítulo 5

1.9K 100 0
                                    

Mamá llega media hora después de acabar la película. La noche llega pronto, son las once y llevo un rato pensando en que le puedo escribir a Yedra. Llevo quince minutos escribiendo y volviendo a borrar sin estar convencida del mensaje.
Me siento imbécil  porque estoy nerviosa y no entiendo por que, así que me decido y escribo.

Yo: Hola. Espero que no te hayas olvidado de mi tan pronto xD.

Salgo del WhatsApp y sin nada mejor que hacer empiezo a revisar las últimas actualizaciones del Instagram, casi todo el mundo está subiendo fotos de los sitios que están visitando estas vacaciones, así que me entretengo viendo bonitas fotos de atardeceres en las playas o paisajes montañosos.
Estaba hablando con mi amiga Sandra que vuelve mañana de su pueblo, en Toledo, cuando me llega la respuesta de Yedra, múltiples preguntas inundan mis pensamientos ¿se acordará de mi? si no se acuerda voy a parecer idiota ¿y si es una loca? en realidad ni siquiera la conozco. Me quedo unos instante sin reaccionar, hasta que me doy cuenta de que llevo demasiado tiempo divagando sobre cual podrá ser su respuesta y decido abrir el mesaje y verlo directamente.

Yedra: Hola chica del parque ¿como olvidarme de ti?

Al leerlo se forma una sonrisa en mis labios, en parte por saber que aunque hayamos hablado poco se acuerde de mi.
Un segundo mensaje llega.

Yedra: No creí que me fueses a escribir de verdad.

Yo: Creo recordar que me ofrecí para enseñarte la cuidad  :/

Yedra: ¿Cómo es eso posible? No puedo salir con una desconocida por ahí, ni siquiera me has dicho tu nombre.
Podrías ser una asesina en serie...

Se me había olvidado que con las prisas me fui y no le dije ni mi nombre.

Yo: jajajajaja (nota mental: no enseñar el armario de los cadáveres) ok no.
Me presento correctamente, mi nombre es Elisa y me encantaría enseñarte un día la ciudad. Suficiente presentación??

Yedra: Tu nombre es realmente bonito O.O
Pues en ese caso, que te parece si mañana empiezas enseñándome el barrio?

Yo: Okey, podemos quedar bajo el árbol del parque, a las cuatro de la tarde.

Yedra: Me parece bien. Me voy ya a dormir, hasta mañana chica del parque.

Yo: Que duermas bien. Y ya sabes mi nombre ¿por qué sigues llamándome así? :v

Yedra: Me gusta llamarte así, chao.

Después de eso se desconectó, y yo también  me fui a dormir, alegre, porque mañana saldría a dar una vuelta con ella.

A la mañana siguiente me levanté pronto, eran las diez pero para estar en verano es pronto, mi madre ya estaba despierta y como siempre me acerqué a ella y la di un beso.

"Buenos días cariño" dice en respuesta "¿Quieres desayunar ya?"

Recordé que mamá había comprado ayer magdalenas con chocolate para desayunar, y me encantan "Sí" dije yendo hacia el armarito en el que las guarda.

Me preparé un café y me senté a la mesa con mis ricas magdalenas al lado. Estaba devorando una cuando mi madre interrumpe.

"¿Irás hoy también al parque?"

"No, hoy me quedaré dibujando en casa. Saldré por la tarde" mi madre asiente con la cabeza sin decir nada.

"Me ha llamado la madre de Sandra, ya han regresado, podrías ir a verla" cambia de tema.

"He hablado con ella, ya quedaremos antes de empezar las clases" me acabo el poso que quedaba del café y llevo el vaso al lavavajillas "¿Necesitas ayuda con algo?"

"No hija, puedes irte a dibujar si quieres" y como me pide me voy a mi cuarto.

En Tú MiradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora