Capítulo 18

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Mi cabeza va a estallar de tanto pensar, y no estoy llegando a ninguna conclusión.
Me acomodo un poco en el sillón, Yedra me mira cada poco tiempo, yo aparto la mirada lo más rápido posible, es incómodo.
Intento prestar atención a la conversación, Jeff cuenta que el no sabe montar en bicicleta porque de pequeño se dió un golpe con un coche aparcado intentando aprender y desde entonces no lo volvió a intentar. Todos ríen de lo absurdo que es no montar en bici por eso.

"Pues yo aprendí a montar sin ruedines con cuatro años"

Añade Yedra orgullosa por el dato.

"¿Con cuatro años? Yo con esa edad ni sabía ir solo al baño"

Otra vez las risas inundan la sala. No se que hago aquí, tal vez debiera de volver ya a casa.
Sandra nos invitó a pasar el finde entero en su casa, pero no me apetece seguir aquí. Tal vez solo tengo que salir un rato a despejarme y sentarme en algún banco.

"Voy a salir un rato a dar una vuelta, no tardaré mucho ¿Queréis que compre algo para la cena de paso?"

"No, ya tenemos pizzas que sobraron de ayer"

"Vale, vuelvo pronto"

Una ráfaga de aire frío me da nada más salir por la puerta, hace una temperatura perfecta, con sol pero mucho viento. Lleno mis pulmones de aire y lo dejo escapar muy lentamente, empiezo a caminar sin rumbo.

"Eliii, espera que voy contigo"

No puede ser verdad, estaba apunto de girar la primera calle cuando Yedra aparece detrás mío. Me voy precisamente para no tener que estar con ella y pensar en otra cosa y tiene que salir detrás de mi...

"¿Por qué has venido?"

"No quería dejarte sola, a parte así estiro las piernas, mi culo ya estaba cogiendo la forma del sofá"

Como siempre su sonrisa eclipsa todo lo que pasa alrededor y para no caer en ella sigo caminando.

"Caminas demasiado rápido"

Ignoro su comentario y sigo caminando al mismo ritmo. Pero me coge del brazo.

"¿Que te pasa? Te comportas raro desde ayer"

"No me pasa nada, solo quería que me diese el viento"

"¿Por qué ni me miras a los ojos? ¡¡Mírame!!"

No puedo mirarla, dirijo mis ojos al suelo

"Si te pasa algo me puedes contar lo que es" da un paso hacia mi "Somos amigas, confía en mi"

Tal vez podría intentar contarla que pasa de forma disimulada. Nerviosa, empiezo a andar despacio.

"No se que me pasa... Es que últimamente estoy un poco confundida" casi no me escuché ni a mi de lo bajito que dije esto último.

"¿A que te refieres con confundida?"

"Esa es la cosa, no estoy segura... Creo que me está empezando a gustar alguien"

Su cara era de enorme sorpresa, nada más decirlo sentí que el mundo se detuvo, los segundos habían parado de correr. Espero que no quiera saber de quien se trata porque si no lo notaría.

Una ligera sonrisa aparece en su cara pero dista mucho de las de costumbre.

"Pero eso está bien, entonces ¿por qué te confunde?"

"Verás, es que tampoco estoy segura. Solo es difícil de explicar, y no se si yo le gusto" intento ver como son sus reacciones.

"Señorita, mi diagnóstico es claro, solo olvídese del tema. Dentro de unos días vera todo mas claro" y me guiña un ojo.

Si tan solo supiese que estoy hablando de ella... solo no puedo olvidarme mientras esté cerca.

"Tal vez tengas razon"

"Si quieres puedo intentar adivinar si le gustas a esa persona ¿la conozco?"

"Se podría decir que si"

Rio del absurdo de la conversación, ojalá fuese tan sencillo el que me diga si de verdad la gusto.
Ella es la que me confunde y me hace llegar a estas situaciones, a veces dice cosas que no se dicen entre amigas y se comporta diferente conmigo, me trata de forma más especial, pero luego parece que se la olvida y vuelve a actuar normal ¿por qué tiene que ser todo tan difícil?

"Cómo que podría decirse que si... ¿pero eso es un si o un no?"

"No te lo tomes a mal pero no quiero seguir hablando del tema"

"Oh"  se sorprende por el repentino cambio "Siento si te he incomodado"

Se hizo el silencio, ella solo camina a mi lado perdida en algún lugar de su escabrosa mente y yo no decía nada por la culpa de alejarla de esta forma cuando ella solo me quiere ayudar.

"¿Quieres que demos la vuelta? Se ha hecho un poco tarde" 

Ella tan solo asiente y giramos a la vez en dirección opuesta.

"¿Me dirás algún día la persona que te gusta?"

"¿Qué?"

¿A que venía esa pregunta ahora? Se tira casi quince minutos sin soltar una palabra y lo primero que dice es eso...

"Nada. Olvídalo"

Nunca es capaz de decir las cosas tal cual son, tiene que decir algo y dejar que los demás saquen sus propias conclusiones.

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Hoy a ocurrido un atentado el la ciudad de Barcelona que me gustaría comentar por las víctimas afectadas por esta tragedia, y mostrar mi apoyo a esas personas.
#PrayForBarcelona

 #PrayForBarcelona

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