One Shots {2}

Shawn Mendes

Shawn coge mi mano para adentrarme a la fiesta y se encarga de colocarme delante de el para protegerme mientras caminamos entre el cúmulo de gente en el centro del salón.
Finalmente me invitó a una de las fiestas que organizan sus amigos del Instituto.
Como Shawn es amigo del anfitrión, el y su invitado pueden estar en una zona exclusiva en la cual nadie podrá molestar.
Empezamos una conversación y de pronto los amigos de Shawn se sumaron a ésta.

—Y, Brisa ¿qué eres de Shawn? —uno de ellos se dirigió a mí en medio de la conversación.

—Es mi mejor amigo —menea su cabeza asintiendo.

—¿Qué grado cursas? Nunca te he visto por el Instituto —preguntó el que estaba junto al que comenzó éste tipo de interrogatorio.

—Segundo de secundaria —tomé un mechón rebelde que caía en mi rostro y lo coloqué detrás de mi oreja —No estoy en el mismo Instituto que ustedes.

El amigo de Shawn bebió un trago de su cerveza y abrió la boca para responder, se vio interrumpido por una chica.

—¡Brisa! ¿Qué haces aquí? —reconocí a la chica. Audrey, una muchacha energética de mi clase de música —¡Ven a bailar con nosotras! —sugirió extendiendo su mano a mí, la acepté y me levanté.

Le sonreí a Shawn sintiéndome incómoda. Bailar no es lo mío y el lo sabe. Seguramente llegará a casa y comenzará a mensajearme molestando con ello hasta que se cansé.
Comencé a moverme de lado a lado dejándome llevar por el ritmo de la música, y moví mis caderas lo mejor que pude. Le eché un vistazo a Shawn, me miraba como si fuera la única chica en el lugar. Estaba de pie apoyado contra la pared, y sus ojos mieles recorrían mi cuerpo sin piedad.
Mis mejillas se tornaron de color rojo, gracias a la poca y baja intensidad de la luz nadie lo notó, así que seguí bailando con la mirada de Shawn clavada en mí.

—Iré por un trago, ¿quieres algo? —preguntó Audrey secándose las gotas que brotaron en su frente hace unos segundos. Niego y ella asiente para alejarse a la barra.

Camino a Shawn, un vaso rojo entre sus manos y frunzo el ceño. Me acerco más rápido y lo miro directamente a los ojos.

—¿Qué es lo que bebes? —pregunté intentando arrebatarle el vaso de las manos.

—Agua —lo alza y me lo entrega. Huelo el líquido y definitivamente es agua.

Mantengo la compostura. Shawn se sienta en el sofá más pequeño y palmea el lado vacío, llamando mi atención para que me siente. Cruzo mis brazos sobre mi pecho y me siento junto a el. Una corriente de viento gélida entró por unas de las ventanas y chocó con mis brazos desnudos. Sin previo aviso, Shawn forma un abrazo entre ambos. Su cabeza queda en mi pecho por lo que beso su coronilla con dulzura sin saber exactamente por qué.

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Shawn abre la puerta del coche de mi padre y entro en éste, el entra después sentándose con mucha proximidad a mí. Su brazo pasa por mi cintura quedándose allí. Ignoro el escalofrío que mi cuerpo hizo como reacción al tacto de Shawn y miro a través de la ventana.
Mi padre aparca el coche en un estacionamiento de un minimarket y se baja dejándonos a Shawn y a mí solos.
Su mano viajó a mi espalda y comenzó a hacer caricias moviendo su mano en forma circular. Sentí su mirada penetrante y volteé a verle. Sólo eran sus ojos conectados con los míos, con los de nadie más. Se acercó aún más y colocó la cabeza de lado para besarme. Me eché hacía atrás con suma velocidad al oir la bocina del coche, mi padre subió a éste y observó el brazo de Shawn. No emitió comentario y condujo a destino.

—Nos vemos, Edward —se despidió. Mi padre le permite llamarlo por su nombre, tiene tal confianza. Shawn me miró y se quedó callado unos segundos —Adiós, Brisa. Te veo el lunes

.

Veo a Shawn en la salida del Instituto, viste unos pantalones negros y una camisa en la cual se ve bastante bien. Unos lentes de sol se encuentran en su cabeza.
Salgo del establecimiento y camino a el con paso seguro, me ve y súbitamente sonríe. Deposita un casto beso en mi frente y caminamos en dirección a su casa.

—Brisa —Shawn pronuncia mi nombre con sus labios. Silencio, un silencio sepulcral e incómodo invadió el entorno —Yo —se quedó callado. Observo como sus mejillas de a poco se vuelven de un color rojo muy suave. Está nervioso, y el sabe que yo sé que lo está —Desde la fiesta, he querido decirte esto.

—¿Qué? —dije con confusión. Shawn mantenía su cabeza gacha, me acerqué para mirarle mejor —¿Qué estás.

—Pero primero necesito hacer algo —me corta. Abro mi boca ligeramente.

—¿Qué cos.

—Esto.

Un jadeo deja mi garganta al sentir los dulces labios de Shawn contra los míos. Posa una de sus manos en mi nuca, mientras que la otra se posiciona en mi espalda baja, atrayendome así, a el.
Correspondí el beso tan rápido comonme lo permití.

Finalmente estaba besandolo.

Shawn movió sus labios a la par conmigo, haciendo que el beso fuera realmente espectacular.

—Te amo, Brisa —confesó alejándose de mí deshaciendo el beso —Te amo desde que éramos niños.

—Shawn —jadee. Mis labios se separaron y comencé a menear la cabeza de lado a lado —Yo también.

♡

éste one shoot va dedicado a brisagaleano, espero que te haya gustado

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