-No sabes como soy en realidad- me dijo Malfoy.
Me estaba mirando fijamente a los ojos, y eso me ponía muy nerviosa. Mi corazón empezó a latir cada vez más fuerte.
Malfoy se apartó de mí y puso cara de horror, como si acabase de recordar algo.
-Tú... no puedes acercarte a mí, te matará. -dijo
-¿Quién se supone que va a matarme?
-No te acerques a mí, estoy perdiendo el tiempo, olvídate de mí.- miró a otro lado.
-Pero tú... ¿Cambias de estado cada dos segundos?
-¡TE MATARÁ! PENSARA QUE ERES UN ESTORBO.- me gritó.
-Malfoy...
Me estaba preocupando, la respiración de Malfoy iba acelerando cada vez más, pensé que iba a ahogarse.
Y si se refería a... ¿Voldemort? Una vez Harry comentó que era de su bando.
Malfoy salió corriendo de la enfermería y le seguí, se dirigía al baño. Me daba igual que fuese el baño de los chicos, entré después de él.
Se puso frente al espejo y empezó a refrescarse la cara. No me había visto, así que me escondí en uno de los baños.
Sentí como Myrtle me susurraba:
-Él está solo, no tiene a nadie, ningún amigo. Pero lo prefiere así, dice que si tuviese amigos los mataría a todos.
-¿Q-quien?- susurré
-¿Quién crees que es?- añaañadió Myrtle y se fue atravesando una pared.
Así que era verdad, Malfoy estaba al mando de Voldemort, tenía que hacer lo que le pedía, o lo mataría. Se sentía solo. Malfoy, el niño que hace años lo tenía todo, se sentía solo.
Quería abrazarlo, no quería que se sintiese solo... Lo decidí, salí de mi escondite y me acerqué a él, estaba mirando al suelo y tenía las manos apoyadas en los extremos del lavabo.
-Malfoy... -susurré
No quería parecer asustada, aunque lo estaba, y mucho.
-No te acerques a mí, no quiero que te mate- dijo con la voz entrecortada
-No me va a matar, y lo sabes.
Se dio la vuelta y me miró, estaba muy pálido, más de lo normal.
Me acerqué a él y lo abracé, no rechazó mi abrazo, me sujetó muy fuerte, se notaba que tenía mucho miedo.
No sabía que decir, de hecho, aquel silencio no era incómodo, me sentía segura, como las pocas veces que abracé a Malfoy...
-Malfoy... ¿me vas a decir lo que te pasa?- le susurré.
Aunque suponía lo que se pasaba, quería saber todos los detalles, quería ayudar aunque no pudiese.
-Él... quiere que me convierta en...- aún no podía hablar tranquilamente.
-Pero, aun tienes posibilidades de no serlo.
-Si no lo hago matará a mi familia.
Note como aguantaba sus ganas de llorar, era la primera vez que veía a Malfoy así, estaba muy nervioso, aun no me había soltado y empecé a pensar que si pudiese no me soltaría.
-Bueno, tienes que vivir el momento entonces... digo... pues...- no se me ocurría nada.
Me soltó y sonrió, no entendía como podía sonreír en aquel momento.
-Bueno, al menos te tengo a ti, supongo.- añadió
-¿A mi? venga, y Goyle y...
-No.- me interrumpió- solo están pegados a mi por mi 'fama'.
-P-pues... Supongo que puedes confiar en mi...
Tonta. Eso era lo que era. Era Malfoy, le había hecho una... Tonta.
Empezó a acercarse a mí, rodeó mi cintura con sus manos y sonrió antes de que empezaramos a besarnos.
[Chan chaaan ¿qué pasará? Bueno, espero que os haya gustado el capítulo y gracias por comentar, con un solo comentario o voto hacéis que cada vez quiera escribir más :D]

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Enemigos
FanfictionLea, una Gryffindor, va a pasar por cosas increíbles que ni ella imaginaría: enamorarse del chico al que odia, batallas inimaginables y más.