El protagonista... El Chico de Otro Cuento [Sulay]

II

HE VUELTOOOOOOOOOO.
Nos leemos abajo, disfruten esta cosa :3

Yixing se sentía culpable. No arrepentido, pero culpable. Era extraño. Desde lo que pasó con Junmyeon, todo lo era. Krystal le había preguntado qué ocurría. Ellos no se habían visto el fin de semana porque el chino le envió un mensaje diciendo que estaba enfermo. Pero, cuando se vieron el lunes, Yixing había palidecido cuando su novia le preguntó por su estado y ella supo que él había mentido. "Todo es extraño" había respondido Yixing, y Krystal se conformó con eso. Porque era una respuesta extrañamente honesta.

Todo era extraño, porque Junmyeon le había hablado con normalidad a Yixing a lo largo de la semana. Todo era extraño, porque Yixing no había llorado en ningún momento aunque él lloraba por cualquier cosa. Todo era extraño, porque Yixing había empezado a recordar lo que él y Suho hicieron, y, aún así, no se sentía arrepentido. Yixing se sentía malditamente culpable, sí. Pero, si volviera a hacer el tonto y se acostara de nuevo con Junmyeon, no se arrepentiría tampoco.

***

Hoy era viernes, de nuevo. Yixing lo sintió llegar lento, pero también rápido. Él y Junmyeon se habían citado en un café, para hablar sobre lo que había ocurrido la semana pasada. El chino quería creer que Junmyeon le pediría que olvidara lo que pasó el viernes pasado, qué le diría que la amistad de ambos y sus relaciones sentimentales eran más importantes que un pequeño error a causa del alcohol. Pero él sabía que eso no ocurriría, aunque tampoco tenía idea de lo que le diría el mayor.

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ーSeamos amantesー propuso Junmyeon en cuanto ambos tomaron asiento.

ー¿Qué?ー preguntó Yixing, incrédulo. El mayor le sonrió.

ーEso, seamos amantesー repitió Junmyeon con desinterés, mientras miraba la carta y se debatía entre un emparedado de pollo y uno de pavo.

ーTienes que estar bromeando, Kim Junmyeonー se quejó Yixingー¿donde quedan Yoona y Krystal en esa propuesta? ¿Dónde queda nuestra supuesta amistad?

ーEl sexo no rompe una amistad, las emociones lo hacen. Y sobre ellas… no pensaste en eso el viernes pasadoー Junmyeon dijo todo con una sonrisa de hijo de puta. El imbécil le sonreía a Yixing como si no pasara malditamente nada, y Yixing se estaba odiando por considerar posibilidades. No podía ser cierto que el otro lo manejara a su antojo con una estúpida sonrisa.

ーNo, Junmyeon. No pensé en ellas porque estaba ebrio, estaba tan malditamente ebrio como tú y eso me hizo una mala pasadaーrespondió el chino, la desesperación en sus ojosー soy tan humano como tú y eso me hace débil al deseo. Que tuvieramos sexo es un error que no debemos volver a cometer.

Junmyeon había soltado una risita, Yixing lo miraba con el ceño fruncido mientras él reía como el imbécil que era, sosteniendo la mirada del chino.

ーTienes un punto al decir que es algo que no debemos hacer, lo admito. Pero sigue siendo algo que podemos hacer, bebé Xingー la sonrisa de Junmyeon no podía ser más amplia y llena de picardía, el ceño de Yixing no podía estar más fruncido.

ーPero…ー Junmyeon silenció a Yixing tomando su barbilla y conectando más de cerca sus miradas. El coreano sonreía con confianza, una de sus cejas alzadas.

ー¿Me negarás que no te sientes arrepentido de lo que hicimos? ¿Me dirás que no te cosquillea la piel ante la idea de repetirlo?ーla voz de Junmyeon era un susurro. Un susurro cargado de deseo sexual y un aire dominante que ponía mal a Yixing.