Say It (JAEYONG)

Raindrops.

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Moví mi cabeza hacia un costado, mis ojos parpadeando repetidas veces, tratando de que mi vista saliera de su desenfoque. Rayos de luz penetrando el gran ventanal, iluminando cada rincón del lugar y las paredes blancas parecían brillar más de lo normal, sentí como me quedaba ciego. Me acomodé en el sofá y froté mis nudillos sobre mis ojos, dejé escapar algunos bostezos y luego de unos minutos, me di cuenta de la pesadez sobre mis piernas, específicamente sobre mi regazo. Casi salté del sofá debido a la imagen demasiado tierna frente a mí.

Jaehyun respiraba de forma lenta, sus mejillas decoradas con un color rosado y sus labios se encontraban ligeramente separados. Con la cálida luz de la mañana, podía apreciar mucho más los detalles, sus pestañas lucían más oscuras y su cabello castaño reflejaba destellos rubios, haciéndolo ver algo angelical. No cabían dudas de que era completamente hermoso, cualquiera podría opinar lo mismo. Su sonrisa era algo de admirar, pero mirándolo con su rostro relajado, pensaba en que era igual de bello que las orquídeas blancas que tenía sobre el escritorio de mi habitación. Su piel blanca, fina y suave ante mi tacto, todo de él era perfecto.

Salí de mis pensamientos en el momento que comenzó a despertarse, se alejó de mi regazo y trato de enderezarse, estiró sus brazos detrás de su cuello y bostezó antes de abrir los ojos, nos quedamos en silencio por unos segundos y clavó su mirada profunda sobre mi rostro, su cuerpo se retorció un poco más hasta que sus músculos se relajaron.

-Wow, te ves mucho más bonito en la mañana, ¿Cómo lo haces? - preguntó todavía somnoliento- Ah, mi cabeza se siente pesada... 

-No sabes de lo que hablas, termina de despertarte y luego ve a cambiarte de ropa- respondí algo demandante, ocultando la vergüenza debido a sus palabras- No puedo creer que nos hayamos quedado dormidos, no es como si nos hubiéramos embriagado del todo...

-Te lo dije, no puedo soportar el alcohol y odio no tener resistencia alguna- abultó sus labios- Siento haber dormido encima de ti, pero debo admitir que eres algo cómodo- sonrió levemente.

-Ya cállate y levántate, ya son casi las 9- señalé hacia el gran reloj sobre la pared, Jaehyun no dudo en hacer caso ante mis regaños, no sin antes quejarse con frases tales como "está bien, mamá", "ya voy...no soy un niño", etc.

Las horas pasaron y disfruté del café y las conversaciones que tuvimos, no discutimos sobre lo que había pasado anoche, aunque yo solo había sido testigo de aquello y el único que lo recordaría. Pero luego Jaehyun soltó algunas palabras, que me dejaron con varios escalofríos recorriendo mi espalda, algo asustado y lleno de pánico.

-Taeyong, ¿puedo preguntarte algo? - preguntó, sin quitar sus ojos de su taza de café.

-Claro que si, ¿Qué sucede, Jaehyunnie?

- ¿No hice nada raro anoche, cierto? ...es que no lo sé, tengo como una sensación extraña, justo aquí- llevó sus dedos a sus labios y comenzó a acariciarlos suavemente- No puedo recordar nada de lo sucedido anoche, solo imágenes borrosas.

Mi cuerpo se paralizó por unos segundos y sentí como mi pulso no dejaba de palpitar, me sentía aliviado al estar sentado sobre una silla, porque mis piernas no dejaban de moverse y temblaban un poco.

-Puedo asegurarte que no hiciste nada raro, solamente caíste dormido y no podías moverte, eres algo pesado...-solté una pequeña risita, tratando de alivianar el ambiente, más bien, para sacarme de aquella situación incómoda.

Jaehyun me dio una ligera patada debajo de la mesa, puse una mueca de dolor y se la devolví, estábamos bromeando el uno con el otro de nuevo.

- ¡Entonces fue solamente un sueño! - exclamó y se relajó en su asiento- Un buen sueño...- agregó, en un tono más calmado.