Padres

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Narra Eiko

Nos fuimos a cenar, fue una velada  maravillosa. Al final pagamos a medias, insistí en pagar, no me gustaba que otros pagaran por mi.

De camino a casa nos la pasamos hablando de tonterías, como siempre,  me la pasaba muy bien con él, sabia como hacerme reír de estupideces y lograba que cambiara de opinión. Me encantaba como era. Al llegar a casa nos separamos, él entró por la puerta de la izquierda y yo por la de la derecha pero empezamos a hablar por WhatsApp, no podíamos estar ni una hora sin hablarnos.  Esa fue la razón por la que mis padres decidieron que dejara  de hablar con él, no querían que estuviera con el teléfono hablando  todo el rato: 

-- Des de que os conocéis no paráis de hablar, podrías estar un rato con la familia y no con personas falsas.

-- ¿Falsas? Desconfías de Alan? - Repliqué.

-- No es que desconfiemos de él pero es mayor que tu y no queremos que te pase algo malo otra vez, sobretodo estando hablando a cada rato . Sus padres nos dijeron que fue siempre un chico extraño y que no tenia muchas amistades. Tu sabes muy bien que cuando te dan una mala noticia se te mezcla con todo y te enfermas, no queremos que este chico te haga daño de nuevo. - dijo mi madre.

-- Él no es como Dani y Javier, estoy segura. Me hace reír y confío en él - dije.

-- Que sepas que eso también lo dijiste sobre Dani y eso acabó mal. - respondió.

-- ¿Por qué siempre queréis fastidiarme las relaciones que tengo? - Empezaron a caer lagrimas de mis ojos al escuchar todo eso.

-- No las fastidiamos, solo te decimos que puede pasar y de lo que no eres consciente.

-- Pues que sepáis que una parte de mi estado habitual de ánimo decaído es por vuestros comentarios. - Dije molesta y me fui a mi cuarto.

Odiaba cuando mis padres se metían por medio, no me creían... Querían lo mejor para mí, y lo entendía, pero creo que nunca lo han dicho pesando en mi posición, me parece doloroso estar hablando con alguien que me hace sentir feliz, contárselo a mis padres y que con sus comentarios me hagan desconfiar de esa persona, eso hace que no pueda hablarle igual... y decae mi estado de ánimo... 

Luego se quejaban de que siempre tenia una cara triste, normal, con todas las malas noticias que me decían día a día... Me preguntan de que me rio, les digo de un mensaje, me preguntan ¿de quien? , de un amigo, ¿qué amigo?, un amigo que conocí hace tiempo, y me dicen: ah, pero no le pases fotos, no le digas datos pernales etc. estaba harta de pasar cada día por ese interrogatorio...

Mis padres son profesores, muchos dirán que es una ventaja pero no me dan libertad, en verano siempre tengo que hacer alguna extraescolar para no estar sola en casa sin hacer nada, hola? es verano, vacaciones, no me gusta pasarme los 365 días del año rodeada de libros de texto, asi es mi vida. Aburrida y sosa. 

-Chat-

-- Hola, Alan.

-- Hola, has tardado en conectarte, problemas?

-- No, solo la misma charla aburrida con mis padres de relaciones.

-- Joder, que rollo.

-- Lo sabré yo...

-- ¿Que te han dicho?

-- Que no me fie de la gente, y sobretodo, de la gente de Internet como recordatorio de lo que me pasó con Dani.  Que si podrían vivir a la vuelta de la esquina, tal vez me están engañando sobre su edad, que solo están jugando etc.

-- Joder, como se pasan.

-- Lo se.

-- Normal que estés cansada de ellos.

-- Ahora ya sabes por que siempre tengo cara desanimada cuando estoy con ellos y no cuando estoy con el teléfono.

-- Si...

-- Bueno, te dejo, tengo que estudiar.

-- Vale ¿luego hablamos?

-- Si, seguramente, si a mis padres les da la gana de dejarme.

-- Okay.

-- Adiós.

-- Adiós.

-Fin del chat-

Al cerrar el teléfono no pude evitar llorar, quería que mis padres cambiaran de parecer...

Quería que se dieran cuenta de que no toda la gente por la red es mala y que un poco de confianza se podría tener, siempre con cuidado de las acciones. Ellos no saben que la gente en la red muchas veces me ha apoyado más de lo que ellos han podido alguna vez... Muchas veces lo empeoraban... y era un sin fin de cortes en mi alma...





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