Sentimientos Encontrados

Final

Ya habían pasado semanas des de que estudiaba, y por fin llegaron las semanas de la verdad, las semanas de los exámenes finales habían llegado.
Todos estábamos nerviosos.
-- Eiko! Me explicas esto? No lo acabo de entender. - Preguntó Karen.
-- A ver... Es así. - Le enseñe la teoría y le explique el procedimiento.
-- Ah gracias.
-- De nada- - algo me corto.
-- Hora de examen de matemáticas! Todos a sus puestos, vamos vamos! - Grito la profesora.
-- Si, profesora!

Las dos últimas semanas estuvimos hasta el cuello de exámenes pero todo esfuerzo es recompensado. El verano llegó y las notas finales se publicaron, todos aprobamos, que bien.
-- A disfrutar de las vacaciones de verano!!! - Gritamos todos.
-- Si!
-- Hey! Vayamos a la playa! - Dijo Karen. 
-- Si! - Dijimos los demás.
-- A que hora quedamos? - Preguntó Jane.
-- A las 4? A esa hora no hará mucha calor.
-- Vale, quedamos en el ayuntamiento? - Sugirió Andrea.
-- Vale! - Dijimos.
-- Bueno ahora nos vemos. - Dije.
-- Hasta ahora!

Todos nos fuimos a casa a ponernos los trajes de baño y luego fuimos yendo hacia el ayuntamiento.
-- Hola Eiko, y tu novio? - Preguntó Andrea.
-- Le he llamado pero no me ha contestado, se habrá quedado sin batería, no se.
-- Bueno allí están los tíos. - Dijo Karen señalando a Eric, Alan y Andrew.
De chicas habíamos Karen, Jane y yo, Andrea no pudo asistir al final.
Nos fuimos a la playa y nos lo pasamos bastante bien:
-- Donde están las chicas? - Preguntó Andrew.
-- Estarán por ahí.
-- Si, están allí. - Nos señaló mientras hablábamos.
-- Que os parece que juguemos a voleibol? A lo mejor estas se animan.

Vimos a los chicos jugar a voleibol t nos quisimos unir.
-- Hey! Hay sitio para tres jugadoras? - Pregunté.
-- Claro! Un partido, vamos! - Dijo Alan.
-- Eso está hecho. - Dije ante el desafío.
-- No nos subestimeis. - Dijo Jane.
Jugando a voleibol nos lo pasamos muy bien, también compramos refrescos, comida y estuvimos hasta las 9 de la tarde, cenamos en la playa con unos petardos para celebrar la llegada de las vacaciones de verano.
Todos estábamos felices de haber acabado bien el curso.
Empezaba a ser tarde y a Karen se le ocurrió algo para Jane y para mí:
-- Eiko, Jane, que tal si os quedais a dormir a mi casa?! Sería genial! Podríamos ver películas y pasar la noche en vela. - Dijo Karen.
-- Si! - Dije.
-- Genial! Mis padres no están, así que no hay problema.
-- Yo no puedo, ir... - Dijo Jane. - Me tengo que ir por un cumpleaños de mis tíos, lo siento, yo me tengo que ir, adiós! - Se despidió.
-- Ya quedaremos durante las vacaciones! - Dije.
-- Eso está claro! Jajaja. - Dijo y se fue.
-- Bueno... Pues iré a mi casa y recojo las cosas para esta noche. - Dije.
-- Te acompaño. - Me dijo Andrew.
-- Vale, nos vamos? - Pregunté.
-- Si.
-- Ahora nos vemos, Karen.
-- Sii! Te veo en mi casa.
-- De acuerdo, hasta luego.

Nos fuimos y recibí una llamada de Karen.
-- Hola?
-- Hola, Eiko, creo que lo de esta noche se va a cancelar.
-- Oh... Que lastima.
-- Si, bueno, es que estoy con Eric y ya te imaginas lo demás, lo siento, otro día, vale?
-- Si, lo entiendo, ya quedaremos otro día. - Corte la llamada.

-- Que pasa? - Preguntó Andrew.
-- Karen y Eric, ya te lo imaginas, Jajaja.
-- Bueno, no vamos a desperdiciar la bolsa preparada, esta noche te vienes a mi casa, no perdamos esta oportunidad.
-- Esta bien.
-- Pues vamos, no perdamos nada.
-- Vale, vamos. - Cogí mis cosas y nos fuimos.

Llegamos, su casa estaba silenciosa.
-- Y tus padres?
-- No están, esta noche es para nosotros. - Me cogió en brazos y me subió hasta estirarme en la cama. - Quieres hacerlo? - Me preguntó - Tengo ganas de hacerme uno contigo... Recorrer mis manos por todo tu cuerpo y saborearlo...- Me dijo mientras se me acercaba poco a poco.
-- S-si...
Se sorprendió.
-- Estas segura? No quiero que lo hagas por obligación.
-- Si, estoy segura. - Y le besé apasionadamente.
-- No juegues con fuego, linda. - Me susurró al oído y me mordió el lóbulo de mi oreja.
Reía entre dientes.
-- De que te ríes, tonta?
-- No me rio de nada, tonto. - Y le besé.
-- No me provoques o sufrirás las consecuencias esta misma noche, ahora. - Dijo.

Estuvimos hasta la medianoche y nos quedamos en la cama abrazados mirando el techo y hablando.
-- Que te ha parecido la experiencia? - Me preguntó.
-- Ha estado bien.
-- Me ha gustado mucho haberlo hecho... Y más contigo.
-- Jejeje, me dejas tu camiseta? Tengo un poco de fresco.
-- Claro, cogela.

Nos dormimos y así mi año fue uno de los mejores y peores, peor por todas mis decepciones y tristezas pero algo bueno sería el haber conocido a Alan,  le estoy muy agradecida por todo lo que hemos vivido, y también estoy feliz por haber tenido una oportunidad con la persona que siempre he querido, Andrew.
Recuerda que todo pasado tiene un futuro, a lo mejor ese pasado tan emocionante para ti vuelve de una manera inexplicable.

Un pasado no se puede cambiar pero el futuro siempre lo hará, una sola cosa lo cambiará todo.
A pesar de las complicaciones que aparezcan, siempre hay que tener fe.
Hacemos tonterías con tal de poder estar al lado de alguien pero no siempre acaba bien, tantas decepciones acaban contigo y luego encuentras a otra persona pero... Éste también puede volver a hacerte daño.
Al final, desconfias y te disgustas al saber que nunca podrás confiar en nadie, que nunca encontrarás a alguien decente por haber tenido malas experiencias, una relación quizás no llegue a ser muy duradera pero llegó a llenarte y hacerte sentir vivo, eso es lo que cuenta.