Capítulo 11

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—Bueno eso fue divertido —Paul hablo.

—Y mucho —continúo Patryck.

Los cuatro pasaron otras tres horas nadando en esa cueva de cristales, Matt estuvo un tanto nervioso al hablar con la pareja después de haber visto ese baile que tenían en la cama, el noruego noto su comportamiento pero cada vez que le preguntaba si se encontraba bien este solo daba excusas, terminando de nadar fueron de regreso hasta la lancha para poder darse una ducha y poder cambiarse de ropa, en especial el peli naranja el cual se metió a nadar con su ropa.

Ahora mismo se encontraban pasando por el gran tronco gigante en forma de túnel, Tord había quedado tan exhausto que se quedó dormido al momento de subir al auto, Matt no durmio en todo el camino llegando a ver todo el paisaje de regreso y le gustó mucho los diferentes lugares por donde pasaron.

—¿Te divertiste Matt? —pregunto el polaco antes de tomar agua.

—E-eh sí, me divertí mucho —sonrió.

—Me alegro, eh... —pauso —, ¿Tord? —pregunto preocupado.

Cuando los otros dos voltearon para ver al noruego encontraron que se encontraba sudando y respirando con dificultad, preocupado Patryck empezó a moverlo por los hombros y repitiendo su nombre para despertarlo, al no tener éxito lo empezó hacerlo más fuerte preocupado, cuandologro despertarlo se le veía muy asustado en el rostro. 

—¿T-Tord? —pregunto Matt.

El castaño sin decir nada empezaron a salirle las lágrimas de los ojos y abrazando fuertemente al polaco empezó a sollozar.

—E-esa voz, esa voz de nuevo —sollozo abrazándolo más fuerte —, ¿quién es esa mujer en mis sueños? —

Los demás no dijeron nada, Patryck no dijo nada en su lugar simplemente lo abrazo más fuerte intentando consolarlo, Matt vio con sorpresa la reacción de su amigo, nunca había pensado que sus pesadillas fueran de tal grado como para hacerlo llorar y temblar del miedo.

—Ya casi llegamos... —suspiro Paul.

Patryck acaricio el cabello del castaño, el cual ya estaba más tranquilo por la atención que le dieron y soltando un suspiro cansado le dio las gracias a su padre mientras rompía el abrazo, Matt vio por la ventanilla la casa de su amigo que se encontraba a unos pocos metros.

—¿Qué hora es? —pregunto Tord bostezando.

—Son las 6:40, el sol ya casi se oculta —comento Paul.

Llegando hasta la cabaña apago el motor de la camioneta, algo lento abrieron todos las puertas en donde estaban, saliendo de él se estiraron para relajar los músculos entumecidos por el viaje, ya listo Tord ayudo a sus padres a bajar las hieleras con los peces mientras que Matt revisaba su mochila para checar que todo estaba en orden.

—¿Qué vamos hacer con tanto pescado? —pregunto Patryck al meter las dos hieleras.

—Podemos darle al guarda bosques —

—Me gusta la idea Tord —sonrió Paul.

—Bueno, solo sobrarían tres hieleras —hablo el polaco acomodándose su sudadera.

—Uno es para nosotros quedarían dos... —pauso —, ¡oye Matt! —le mencionado volteo a verlo.

—¿S-si? —pregunto quedando afuera de la puerta.

—¿No quieres llévate el pescado que pescaste? —pregunto buscando entre las hieleras el pez grande.

—¿Seguros? —

Para una vida mejor - EddsworldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora