- 16 -

159 15 5
                                    

Charles sonrió mientras observaba, afirmado en el marco de la puerta, como su ayuda de cámara corría por la habitación ordenando sus pertenecías y criticando todo a su alrededor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Charles sonrió mientras observaba, afirmado en el marco de la puerta, como su ayuda de cámara corría por la habitación ordenando sus pertenecías y criticando todo a su alrededor. Al parecer nada en Cornualles estaba a la altura de un duque y sus refinados sirvientes.

Ni siquiera la gran mansión de la que era dueño, Lanhydrock House (*). Una hermosa construcción que ocupaba un amplio terreno, cubriendo cientos de hectáreas sobre el icónico río Fowey. Parte muy importante de su ducado.

—Eh, Luigi deja eso y ve a buscarme un whiskey — pidió, acercándose a una de las sillas junto a uno de los ventanales con que la habitación principal de su casona de campo constaba. — Por favor — soltó un bufido, siempre era lo mismo, Luigi no se movía hasta oír las "palabras mágicas".

—Pero excelencia, no cree que es....—

—No, no es demasiado — rodó los ojos con exasperación. — Yo decidiré cuando sea demasiado — gruñó. Y aun no era demasiado.

Su viaje había sido de aproximadamente tres días, entre los cuales había parado en una posada para descansar, supuestamente, y donde había bebido más de la cuenta y como resultado tuvo que continuar su viaje en el carruaje que se suponía debía transportar su equipaje y los sirvientes que lo acompañaban. Viaje que fue mucho más largo y tedioso desde allí con el constante parloteo de su ayuda de cámara, reprendiendolo por sus excesos con la bebida.

Había estado a segundos de lanzarlo por la ventanillas y dejarlo abandonado allí, aún no entendía como no lo hizo, se hubiera ahorrado todo el sermón que seguro estaba por comenzar.

—Milord — Luigi volvió a tratar de hablar, cuando lo que él quería era beber y poder olvidar. — entiendo por lo que está...—

—No, tú no entiendes nada — Lo corto, adoptando una expresión de hastío. Como cada vez que alguien tocaba el tema de su boda fallida. — ¡ahora ve y trae de una vez mi maldito whiskey! — termino gritando.

Estaba harto de que hasta sus sirvientes lo observaran con aparente lastima por haber sido abandonado por su futura esposa.

Luigi se limitó a asentir y seguir sus órdenes, al fin pareciendo entender que las palabras allí no servían. El duque necesitaba más que simples palabras para lograr sanar su corazón herido, necesitaba desahogarse de alguna manera.

Su trago llegó a su mano con más rapidez de la que esperaba, trayendo consigo también la botella y aun amigo más, el brandy. Si iba a emborracharse, lo mejor era hacerlo correctamente.

—Gracias — musitó cuando su ayuda de cámara le sirvió. Se quedó de pie junto a él, esperando por alguna instrucción.

—Excelencia — este asintió. — ¿necesita algo más? — A Charles le extrañó verlo siendo tan servicial.

—Sí, cierra las cortinas — bebió un sorbo de su copa. — no quiero que haya luz aquí — quería estar solo y en la oscuridad, al menos por aquel día, ya mañana se levantaría y trataría de continuar con su vida. Tenía claro que debía que reponerse, mucha gente aún dependía de él. — ahora vete, y asegúrate de que nadie me moleste...por favor — en cuanto se encontró completamente solo y en la oscuridad, se concentró en combatir la maldita presión en su pecho.

Again [Royalty#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora