Lovers || Raura (PRIMERA y SEGUNDA TEMPORADA)

Extra #2

Nacimiento de Nicole y Nora

Ross

— No se dan una idea de cuánto extrañaba dar un concierto como estos... — murmura Ellington mientras se cambia de ropa y yo asiento sonriendo.

— Definitivamente lo he disfrutado.

— Claro, le has propuesto matrimonio a tu chica y ha aceptado. Por supuesto que has disfrutado esto. — dice Ryland riendo.

— Soy el hombre más afortunado, lo sé. ¿Qué puedo decir? Mi chica es la mejor. — digo arrogantemente en broma.

— ¿Alguien tiene una idea de dónde está Laura? — pregunta Rydel entrando al camerin.

— ¿No estaba con ustedes?

— Si, pero dijo que iba a ir al baño y nunca regresó.

— Ya vuelvo... — murmuro y voy rápidamente al baño. Efectivamente, Laura estaba allí llorando. — Cariño, ¿estás bien?

— Si... — murmura sollozando y me siento al lado de ella para después abrazarla con fuerza.

— ¿Qué ha pasado?

— Nada... Es solo que tengo miedo... Antes no lo tenía, pero ahora...

— No estás sola. Estaré contigo en todo momento, te lo prometo.

— ¿Y si te aburro? ¿Y si no soy lo que esperas? ¿Y si el día de mañana te das cuenta de que estás desperdiciando tu vida y hay mejores mujeres que quieren tenerte?

La miro sorprendido ante esas preguntas. Ese es su miedo. Que la deje otra vez.

— Laura, mírame... — le pido suavemente y ella obedece. Seco sus lágrimas repartiendo besos por sus mejillas causando una linda sonrisa en ella. — Eres todo lo que quiero. Ninguna mujer podría darme tanta felicidad y amor como tú. El día de mañana me despertaré y pensaré "Vaya... Tengo todo lo que siempre he soñado con la chica que más amo. ¿Puedo ser más afortunado? Lo tengo todo." Y ese será mi pensamiento en cada despertar a tu lado por el resto de mi vida.

— ¿Y cuándo no esté a tu lado?

— "Extraño a mi mujer y a mis hijos. ¿Cuánto faltará para volver a casa? Me hacen mucha falta."

Laura ríe rodando los ojos. — Eres el hombre más dulce que conozco. Te amo.

— Y yo te amo a ti, cariño. No tengas miedo, ¡te acabo de proponer matrimonio! Quiero pasar toda mi vida amándote y cuidando de ti y nuestros hijos. Son absolutamente todo.

Ella se sienta en mi regazo sonriéndome de lado y me recompensa besándome como solo ella sabe hacerlo. Correspondo su beso presionándola contra mi cuerpo provocando un gemido suave en ella.

— Te amo, Laura... — susurro en el beso.

— Yo a ti... ¿Podríamos irnos a casa?

Sonrío ampliamente al saber por qué quiere ir a casa. — Por supuesto que si.

La ayudo a levantarse y luego nos dirigimos al camerin donde estaban los chicos. — ¡Pedazos de mierdas, nos vamos! Que tengan una buena noche. Adiós. — digo rápidamente agarrando mis cosas.

— ¡Ross! ¿Podemos llevar a los niños a comer? — me pregunta Rydel.

Casa sola.

— ¡Si, perfecto!

— Lynch, tu cara grita "follaré con mi chica". — dice Ryland.

Le guiño el ojo y finalmente guardo todas mis cosas.