Uzumaki Naruto: El Jinchuriki Perfecto

Cae la máscara: el renacido

Narrador yo

Momentos antes de que la cárcel de Konoha fuera asaltada por el grupo de rescate, en la villa, más concretamente en la sala del consejo, se estaba llevando a cabo una importante reunión.

La que pronto sería presentada como la Godaime Hokage, Senju Tsunade, tenía un horrible dolor de cabeza, con cada una de las peticiones que hacían los consejeros del lado civil. Todas y cada una de estas peticiones, eran que acabará con Uzumaki Naruto por ser un traidor al llevarse a Karin, la otra Uzumaki, de la aldea cuando la iban a poner para ser una de las mujeres de Uchiha Sasuke, así como lo sería Uchiha Akeno. Esta última se negó a eso sin dar motivo alguno, y fue encarcelada.

Tsunade conocía a los civiles, no a los consejeros, si no a los que trabajan para ganarse el pan. Estos, como casi todos, antes odiaban al chico, pero tras lo que hizo durante la invasión, fue sustituido por admiración y respeto. Por lo que los concejales estaban muy equivocados con respecto a lo que quería su gente.

Por otro lado, Shimura Danzou, uno de los tres consejeros, quería tener el control del Uzumaki para ser un ANBU de Raíz junto a Tsuchi Kin, la ex Genin de Oto.

Por otro lado, los consejeros shinobis intentaban contener a los civiles, los cuales contaban con la ayuda de los clanes menos poderosos en la cadena de poder de Konoha.

Sin duda esto era un dolor de cabeza para la rubia, que deseaba irse para tomar algo de su preciado sake y dejar a estas momias en un charco de sangre por decir tremendas estupideces.

Un ANBU leal al consejo civil, o lo que es lo mismo, un miembro de Raíz, hizo acto de presencia en la sala y le dijo algo a Shimura Danzou en el oído y este apretó el bastón y se levanto.

Danzou:sin duda, ese Jinchuriki es un traidor. Esta atacando la cárcel en este momento, con el objetivo de la liberación de la traidora Uchiha Akeno

En la cárcel, con Hana y Naruto

Naruto dejo de besar a la azabache, que abrió nuevamente los ojos y con un sonrojo notorio en su rostro. Las heridas habían sido curadas y no quedaba rastro de estas.

Naruto:siento llegar tarde...

Akeno se levanta con la ayuda de su esposo rubio, sintiendo que tiene las reservas de chakra al completo, y se encuentra como si nunca hubiera sufrido por una semana, los maltratos de los hombres de Danzou.

Hana:par de tórtolos. Siento interrumpir, pero estamos en una situación más que grave, y vosotros os las pasáis de beso en beso-lanza una muda de ropa a la Genin, que la coge agradecida-. Vamos, ya no hay tiempo que perder.

Con Long y Kurami

Senju Long estaba haciendo retroceder a un grupo de ANBUS de Raíz, usando sus jutsus Suiton, cosa que no era sorprendente para la Nara, que conocía la facilidad con la que su compañero podía hacer jutsus de elemento agua sin una pizca de este elemento por alguna parte.

Ella por su parte, estaba usando sus habilidades en kenjutsu para partir por la mitad a cada uno de esos enmascarados que intentaban matarlos. Había mucha sangre y órganos esparcidos por el lugar, cosa que podría hacer vomitar a cualquier pero no a este par de shinobis que no le tenían ni a la propia muerte.

Kurami, usando el elemento Fuuton, junto a sus técnicas de kenjutsu que aprendió junto a su sensei, creaba una lluvia de sangre en un abrir y cerrar de ojos, lo que tenis aterrorizados a todos los enemigos ahí presentes, que intentaban mantenerse alejados de ella, cosa que era casi imposible con lo reducido del espacio.

Long:sabéis, ya me harté-empieza una secuencia de sellos que los ANBUS no pueden seguir-. Suiton: Gran Ola.

Una enorme ola de agua surge en el estrecho lugar y que barre todo el pasillo, llevándose a todos los ANBUS en shock y que no pueden moverse, mientras que la Nara se mantiene en el techo usando el chakra en sus pies.