Cambio de lealtades

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Narrador yo

El grupo conformado por Senju Tsunade, Kato Shizune, Uzumaki Karin y Uzumaki Naruto, estaban en una ciudad del país del té, más específicamente en las aguas termales.

El Sannin de los sapos, Jiraiya, se había marcado hacia unos días atrás para seguir investigando los movimientos que hiciera Akatsuki o Orochimaru de ahora en adelante. Para el Gama-sannin​, era mejor tener controlado al enemigo antes de que esté hiciera un movimiento, a que lo haga y ver las consecuencias.

Naruto no le dio mucha importancia a que el Sannin se marchara. El joven dudaba que alguien los atacara, más si ya Orochimaru lo había hecho. Sí tenían a la Senju, era muy poco probable que alguien se les acercara con malas intenciones, dado al poder que poseía la Sannin. De todas formas, contaban con el Uzumaki, que ya estaba al cien por cien después de su pelea contra Ryū, su ex compañero que los traicionó.

Aunque si las chicas y el Sannin supieran que realmente todo era una farsa, les darían un premio por la actuación.

Realmente, Ryū nunca traicionó a la aldea. Estaba de infiltrado en la base de la serpiente, por iniciativa propia. Él nunca le dijo que lo hiciera, si no que el pelirrojo aprovecho la ocasión que el Sannin le ofreció hace cuatro años, cuando suspendió el examen Chuunin, y se unió a él.

Durante este tiempo, el Uzumaki había estado recopilando información sobre cada uno de los ninjas de la aldea oculta del Sonido. No le resultaba difícil, dado que se había ganado la confianza de su superior, demostrando a este su lealtad con cada pedido y con eso, el Sannin cavó su tumba.

Gracias a esa infiltración, el pelirrojo consiguió información de cuatro ninjas que podían ser de utilidad para los planes del ojiazul, pero debían moverse deprisa. Seguramente en estos momentos sus enemigos se estaban movilizando en las sombras, y Naruto no tenía ni un segundo que perder. Muchas cosas estaban en juego, sobre todo la seguridad real de Konoha y para ello, necesitaban crear un grupo paralelo a ANBU y alejado de NE Raíz, la organización y grupo para militar creado por Danzou y muy semejante a los ANBU, salvo que los integrantes de Raíz eran solo máquinas sin sentimiento.

Seguramente Shimura Danzou estaría aprovechando la ausencia de un Hokage para hacer de las suyas, y el ojiazul no quería ver sufrir a la gente, y mucho menos a los niños huérfanos que eran enviados junto al hombre de vendas.

Naruto sabía eso, dado que él estuvo en el orfanato de donde el hombre cogía a los niños. Alguna vez le ofreció unirse, pero lo rechazo y el hombre sabiendo que no podría hacer nada dado que su desaparición sería muy notoria, se contento con vigilarlo.

Ese era el motivo por el que el chico quería cerrar un nuevo grupo, solo bajo las órdenes directas del Hokage y ajenos al consejo, lo que haría mucho más fácil su misión. Y ya tenía al menos siete miembros, contándose a él mismo.

El rubio dejo esos pensamientos, y se centró en el baño que se estaba dando en el agua cálida. Ya necesitaba algo así para relajar sus músculos. No había tenido un buen descanso desde antes de los exámenes. Y además, esto le ayudaría a pensar una nueva rutina de entrenamiento para Karin, la cual ya dominaba caminar por los árboles y sobre el agua, además de que aprendió la técnica que le enseño, su primera de muchas.

Lugar desconocido

Un pelirrojo, vestido con el uniforme de Jounin de Oto, con su ojo derecho tapado por su banda que lo identifica como ninja de esta aldea y con una máscara de tela cubriendo su boca y nariz, avanzaba por los pasillos oscuros y húmedos, que eran a penas iluminados por unas antorchas. Unas gotas caían, chocando con el suelo y haciendo eco en el lugar.

El chico se detuvo frente a una puerta de metal negro, y la abrió su preocupación alguna. Sabía que tanto Orochimaru como Kabuto, estaban en otra guarida. Tenían que adelantar el cambio de cuerpo, a causa del sello de los brazos de este, y no podían contar con el Uchiha, que en estos momentos estaba en Konoha.

Ryū entro en la habitación llena de monitores y con una cama, en la que se encontraba tumbada la persona a la que buscaba.

Ryū:Kaguya Kimimaro, el último de este clan adicto a la batalla, con un Kekkei Genkai muy peculiar, y que está al borde de la muerte a causa de un efecto secundario del mismo.

Miro a la cama, centrándose en el chico que estaba en esta. Su cara estaba tapada por un cello, pero se podía ver su piel blanca cual nieve y su pelo del mismo color.

???:¿quién eres? ¿Te ha mandado Orochimaru-sama?

El joven Jounin no pudo evitar sonreír bajo la máscara, aunque daba igual. No había nadie que pudiera ver a través de su máscara.

Ahora el chico comprobaba la lealtad del joven Kimimaro, que hasta al borde de la muerte, le era leal al hombre que le salvo....a medias, ya que este no parecía interesado en buscar una cura para el chico albino.

Ryū:me he mandado yo solo, Kimimaro. Tengo una propuesta que hacerte.

Kimimaro:¿que desea Orochimaru-sama que haga? Daré lo que me queda de vida....

El pelirrojo suelta un bufido. No se puede creer, que el Sannin que se considera un genio, el más listo de los tres Dendetsu no Sannin, sea tan estúpido como para no ayudar a este chico, el cual seria mucho mejor subordinado que ese Yakushi Kabuto, el experto en ninjutsu médico.

Ryū:no tiene nada que ver con Orochimaru, chico. Quiero que te unas a mi, y dejes de serle leal a esa serpiente.

Kimimaro:¿por qué debería? No me queda mucho tiempo de vida. Solo gracias a la marca de Lord Orochimaru, puedo aguantar hasta pagarle lo que le debo por salvarme de la miseria y sufrimiento.

Ryū:ese es un buen punto, Kimimaro; ¿pero no crees que te estás pasando? Ya le has dado mucho a esa serpiente, Kimimaro. Sé que si no estuvieras enfermo, habrías sido un cuerpo aceptable para él. Pero el solo te ve como un arma, así como al resto. No le importas, Kaguya Kimimaro. Si no, ¿por que no ha buscado una cura para ti? Así podrías ser su cuerpo o servirle hasta la muerte–el pelirrojo retira el sello, para ver el rostro del joven. En la frente tiene dos puntos morados, marcas de ese clan casi extinto al que pertenece–. Yo puedo darte tiempo, hasta que lleguemos con unos amigos para que retiren ese virus. Te daré unos dos años, más que suficiente; pero debes de ser leal a mi príncipe, ya que el te cuesta y te dará una nueva meta....la del bien, y no hacer sufrir a la gente como sufrías tu antes y es lo que hace el Sannin.

Kimimaro fija sus ojos en el chico que está frente a él. Por el brillo del único ojo visible, el joven Kaguya sabe que no miente. Podría guardarse esto, y decírselo a Orochimaru para que acabará con el; pero algo le decía que era mejor aceptar esa segunda oportunidad que le daba la vida. Así, podría conocer más del mundo y ayudar a gente como él.

Kimimaro:acepto. Seré leal a tu príncipe, siempre y cuando cumplas lo que digiste.

Ryū coloca la mano sobre el pecho del chico, y una energía azulada pasa a este.

Ryū:al igual que mi príncipe, siempre cumplo lo que prometo. Te he dado dos años de mi vida, para que aguantes hasta que lleguemos con él.

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Hasta aquí este hermoso capítulo. Espero que os guste, y que os eres gustando también el nuevo fic de Uzumaki Naruto: El Alumno de Óbito escrito por mi 😄

Una pregunta: ¿creéis que debería hacer una historia con un dark Naruto?

Nos vemos en el próximo capítulo 😊 ttebayo 😄

Uzumaki Naruto: El Jinchuriki PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora