En el Corazón de la Serpiente -Draco Malfoy y Tú-

Capítulo 26 "Primer Día"

Durante el camino Fred y yo hablamos de cosas sin sentido hasta que nos tuvimos que despedir para ir cada uno a su clase.
Hoy tenía clase de Rncantamientos y la compartíamos con Hufflepuf.

-Hoy vamos a practicar el encantamiento de desarme, ya que muchos lo olvidan y prefieren atacar lo antes posible, olvidando que, un previo desarme, nos da una ventaja muy superior sobre nuestro oponente-explicó el profesor-Poneros en parejas

Todos se fueron poniendo por parejas y yo me puse con Kristal.

El profesor nos dijo que repitieramos el nombre del encantamiento unas dos veces, pues, la verdad, se suponía que ya lo conociamos. Seguidamente, nos pidió que nos levantasemos para comenzar a practicar.

-Traten de separarse lo máximo posible para que no se den con las varitas en los ojos-dijo mirándonos.

-Las mayores primero-reí mientras miraba a Kristal.

-¡Expeliarmus!-dijo haciendo que mi varita volase por los aires.

-Muy bien-dije sorprendida-ahora ayudame a buscarla-reímos.

La buscamos por el suelo y cuando la encontré, la cogí y se lo dije a Kristal, esta aún seguía riendose. Cosa que me causaba gracia. Su risa era contagiosa. Me hacía sentir bien. En general, ella me hacía sentir bien.

Despues yo desarmé a Kristal y tras cojer su varita seguimos.

Tras algunas clases más llegó la hora del almuerzo. Estaba con Kristal paseando por el patio cuando vi a Draco. Hubo un choque de miradas, que más que ser una bonita sensacion, fue horrible al notar el odio que me tenía.

Después fuimos al Gran Comedor y me senté con mis amigos, comimos y hablamos de cotilleos del verano, etc.

Fred y George planeaban bromas, como siempre.

De vez en cuando Draco y sus amigos nos miraban mal pero les ignorabamos.

Al terminar el día paseé sola por el castillo y después me fui a dormir.

Al día siguiente,

Me desperté sobresaltada al haber tenido una pesadilla y miré a todos los lados de la habitación. Las chicas no estaban.
Me levanté y me di una ducha rápida, me vestí, me peiné y cuando estaba lista me dirigí al Gran Comedor para desayunar.
Llegué un poco tarde, ya que la mayoría de alumnos se estaban yendo a clases.

Me senté al lado de las chicas y comencé a comer rápidamente.

-Estuvimos media hora intentando despertarte-dijo Hermione mientras me miraba.

-No me enteré - dije encogiéndome de brazos.

-No importa, eres una marmota-diko Krista aguantando la risa-a todos nos pasa

-Vamos, date prisa o llegaremos tarde-dijo terminando de desayunar.

Cuando terminamos de desayunar nos dirigimos a clase y al terminar horas más tarde me fui a la biblioteca.
Me senté al final del todo y saquee un pergamino, donde empecé a escribir una carta para mi madre, en la que le contaba la pesadilla que había tenido.
Guardé la carta y empecé a hacer los deberes hasta que después de un largo rato terminé y cogí un libro de la estantería. Me puse a leer hasta que un chico se sentó a mi lado, cerré el libro y vi que era Cedric.

-¿Qué haces aquí?-pregunté en un susurro.

-Nada, pasaba por aquí y te vi... Iba a ir a Hogsmeade-dijo pensativo-¿Quieres venir?

-Claro-dije con una pequeña sonrisa.