Decir que te amo, es poco

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_ Qué ruidoso..._ se quejó un rubio, aún adormecido. Hablándole al ruidoso despertador nuevo, de sus tíos. Esos de antes, con campanillas, que cuando sonaba, te causaba un infarto._ ¡Tío!, ¡calla de una vez, esa cosa del demonio!_ el rubio levantó la cabeza de la almuhada mirando hacia la puerta de su cuarto, que daba al pasillo. Asegurándose de estar escuchando bien. Así era, no escuchaba nada. Su tío había apagado el despertador._ al fin..._ quizo volver a dormir pero volvió a sonar. Lo que significaba que la alarma sólo se pospuso._ tsk._ chasquio la lengua y arregañadientes se levantó, para apagar eso que perturbaba su sueño.

_ Listo._ dijo luego de apagar el artefacto. Pero sus tíos no estaban en su cuarto. Bajó las escaleras y los vio desayunando._ Tío, ¿por qué no apagaste tu molesto despertador?

_ Buen día Yuri,_ dijo el hombre de ojos verde claros, con la taza de café en la mano, sentado en la punta de la mesa._ Margaret quería poner a prueba un experimento._ le dio un sorbo a su café._ veo que funcionó.

_ ¿Experimento?, romperme los tipanos, con esa cosa del diablo, no es algo muy lindo de comprobar._ se sentó a su lado, frente a su tía que venía con cartas en una mano y un plato de piroskis en la otra, y se sentó en su silla.

_ Buen día._ saludo la mujer de ojos color miel y cabello castaño.

_ Buen día cielo._ dijo su esposo.

_ Buen día tía._ dijo el rubio mirando con amor los piroskis._ ¿puedo empezar a comer?

_ Adelante._ se avalanzo sobre uno y le dio una gran mordida, mientras masticaba lento y saboreaba con placer, su comida favorita._ no te vayas a atragantar._ dijo en tono dulce, mientras ella tomaba su café.

_ ¿Y en que consistía el experimento?_ dijo con la boca llena pero aún entendible a su tío y luego tragó._ tío.

_ En que un adolescente flojo, se levantará por su cuenta en la mañana._ dijo con su atención en el periódico. Él ruso no veía su rostro, pero sabía que estaba sonriendo burlisto._ por eso dije que funcionó.

_ Algún día voy a arrojar tu amado despertador por la ventana de mi cuarto y no me arrepentiré de ello._ dijo serio el rubio. A la vez que terminaba de comer y beber su jugo exprimido.

_ ¿Así...?_ dijo bajando el periódico._ que lastima...¿que haré con estas entradas para el concierto de "Reyes en el paraíso" que gané por la radio?

_ ¡¿Qué?!_ expresó eufórico._ ¿tienes entradas?, es mi banda favorita.

_ Lo sé. Por eso las conseguí.

_ Gracias tío, te amo, te adoro._ se abalanzó sobre el hombre y lo abrazó con fuerza._ eres el mejor._ su tía carraspio la garganta, interrumpiendo el conmovedor momento.

_ ¿No decías que tirarías por la ventana nuestro "muy preciado" despertador?_ el rubio se acordó de pronto y se puso serio._ ¿deberíamos romper las entradas querido?_ le guiño el ojo a su esposo, cuando Yuri no miraba.

_ No lo sé querida, ¿lo hacemos?_ le siguió el juego a su mujer.

_ No por favor,_ suplico, para luego adoptar un repentino amor  a su enemigo mañanero._ ¡Amo ese despertador!, _ se escucharón las risas de los mayores._ ¡en serio!, lo juro..._ dijo sonriendo.

_ Está bien, esta bien. _ dijo su tío._ aquí tienes las entradas._ el ruso las tomó de una sola vez. Era su banda favorita y ahora podría ir a verlos en vivo._ son dos, por lo que puedes llevar un amigo o alguna novia._ Yuri se puso rojo al recordar a Jean, besandolo en la entrada de su casa. Asustadose al pensar, que quizá ellos los vieron y por eso mencionan una "novia" ahora. Pero fue una idea que desecho. Sus tíos no estaban a la vista cuando él llegó, era imposible que lo hallan visto._ tienes novia Yuri_ interrogó el hombre, que sonó más como una afirmación,  que como una pregunta.

U.T. (Pliroy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora