U.T. (Pliroy)

C'est fini

_ Te irás a Rusia._ espetó el canadiense molesto.

_ Y tú herederas la empresa de tu padre._ utilicé su mismo tono.

_ Yuri, ¡Sabes que trabajé como burro todos estos años, esperando este momento!

_ ¡Yo también trabajé muy duro para tener esta oportunidad!. No eres el único Jean._ se puso de pie de forma abrupta caminando de un lado a otro como león enjaulado. Estaba furioso y yo no era la excepción.

_ No lo dejaré. ¡No después de siete largos años de sacrificio!.

_ ¿Sabes qué?, ¡Yo tampoco lo voy a dejar! ¡Me esforcé tanto como tú para llegar a ser el mejor! ¡¿Por qué debo ser yo el que deba renunciar a su sueño?!

_ ¡¿Entonces debo ser yo?!

_ ¡No he dicho nada parecido!. ¡Tú fuiste él que lo insinuó descaradamente!

_ ¡Yo no hice tal cosa!

_ ¡¡Sí lo hiciste imbécil!!_ nos miramos desafiantes uno al otro, hasta escuchar el sonido de la puerta. Jean me dirigió una mirada áspera antes de abrir la puerta.

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El canadiense fue abrir la puerta encontrándose con Emil, que venía con una tablet en la mano y con cintensiones de devolverla a su dueño. Pero al castaño se le había  borrado la sonrisa al ver lo malhumorado que estaba su amigo. Cuando se disponía a preguntar el por qué de su mal genio, éste lo ignoro y entró. Confundido como estaba, sin preguntar entró el también a la vivienda, encontradose con una escena poco amistosa entre él y el ruso.

_ ¡Eres un insensible Leroy!_ bocifero el ruso.

_ ¡¿Yo soy el incesible?!_ la discusión se había convertido en un concurso de gritos en el que Emil Nekola no parecía tener ni voz ni voto.

_ Veo que interrumpo, así que..._ los miró a ambos los cuales se miraban entre sí, sin prestar mucha atención a sus palabras, con fuego saliendo de sus ojos._ Iré a la cosina por un rato._ diciendo esto se refugio en la cosina. Dejando a la pareja a solas nuevamente.

_ ¡Claro que lo eres! ¡Baka!. Vive seis años en Canadá alejado de toda mi familia ¿y pretendes que yo sea el que renuncié a verlos?. Sin mencionar que me esforcé todos estos años para ser un patinador profesional. Al fin alguien me quiere dar una oportunidad. No renunciare.

_ ¡Yo no soy el insensible aquí Yuri!. ¡Yo trabajaba duro, mucho antes de que tú pisaras Canadá!. No tienes ni idea de lo que me sacrifique para sacar la empresa de mi padre de la bancarrota._ el ruso abrió grande los ojos por la impresión._Así es Yuri, yo fui quien trabajo sin descanso hasta muy altas horas de las noches, sin descanso, durante dos largos años. No sabes por lo que tuve que pasar para que la empresa volviera a donde esta hoy. Tuve que tragarme mi orgullo y humillarme frente a los inversores para que no desistieran de apostar por empresas Leroy. Pero aún así no obtuve nada con eso. Teníamos deudas enormes, con muchas empresas que antes dependían de nosotros, ahora nosotros, estábamos a sus pies. Tuve que tener hasta seis trabajos,_ hizo una pausa tragando saliva, como si aún tuviera ese mal sabor de boca y quisiera deshacerse de el._ chófer, mesero, asistente, niñera de niños ricos, limpiador de autos. Todos con gente de alta sociedad, con los que años antetiores había compartido la mesa en alguna extravagante fiesta. Varrieron el piso, no sólo conmigo, sino con el apellido Leroy.

¿Te lo imaginas?, un Leroy. Una familia ilustre, adinerada, de la mejor clase social, _ Conocida por ser la dueña de una de las empresas más exitosas de negocios que se conoce en el país._ En bancarrota. Qué gracioso y que irónico. ¿No lo crees?
Aquellos que decían respetarme, los que sé hacían llamar mis amigos, incluso la que decía amarme. Todos ellos, me abandonaron, me dieron la espalda dejándome solo.