Escapando de su tormentoso pasado en el amor, el ruso Yuri Plisetsky, decide estudiar en la U.T. (Universidad de Toronto), en Canadá. , solo queriendo un descanso de todo.
Pero el destino tiene otros planes. Y en ellos esta, que conozca al capitán...
_ Yuri-chan, tengamos una cita._ dijo el canadiense eufórico._ Yuri-chan, ¿me estás escuchando?.
_Si, Leroy, te estoy escuchando... _ dijo el ruso, sin despegar la vista de su celular._ ¡oye!. Está loca, no para de escribir en tu muro de Facebook, lo atractivo que le pareces y lo sexy que te ves en las fotos._ Jean se acercó para ver el celular del rubio. Y en efecto mostraba su perfil y varias publicaciones de una Casandra Leona._ y mira esto._ bajo a la siguiente publicación. Donde ella le etiqueto, una foto suya, con ropa muy provocativa._ esta zorra, no tiene ni una pisca de decencia..._ ahora volvió a mirar en su celular, entrando en la cuenta de la chica, buscando fotos similares, bajando con el dedo, en la pantalla.
_Yuri...
_ Es increíble, la poca vergüenza que tiene al mostrarse en cueros...
_ Yuri...
_ ¿No conoce la palabra dignidad?_ Jean rodó los ojos y le arrebato el celular de las manos._ ¡¿Qué crees que haces, idiota?!. ¡Devuelmelo!.
_ No._ lo hazlo en contra de su voluntad, llevándolo a uno de las sillones de colores. Acostandolo en el, sin despegarse de su cuerpo._ te invite a salir. Y a ti sólo te preocupa, esa cuenta de face, que no uso hace años. Me lastimas Yuri._ se fingió herido, sujetando su pecho, cerca del corazón.
_Y si eso es verdad, ¿porque te sigue publicando cosas?_ frunció el ceño. Acción, que enternecio al canadiense. Sonrió para luego besarlo de forma dulce, suave. La misma, que derrite al ruso. Calmando por completo su mal humor._ mi contraseña es "El rey JJ", has lo que quieras con ella. De todos modos no la uso. Pero mírame sólo a mí. ¿Sí?_ repartió besos por toda su cara, bajando al cuello, acompañado de caricias por debajo de la polera que llevaba puesta, acariciando su blanco abdomen._ sabes me gustó lo que esa chica llevaba puesto._ susurró a su oído, antes de morder su lóbulo._ ¿Por qué no lo usas tú?, te verías muy sexy en él, Yuri-chan. Sería muy exitante.
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_ ¿Qué que...cosas dices?_ tartamudeo, completamente rojo._ yo no usaría eso, ni por todo el oro del mundo.
_ ¿Ni siquiera por mí?_ alzó una ceja, enjugando una sonrisa seductora.
Yuri lo mira con ojos de cachorro, sumiso ante la belleza del canadiense. Rendido ante su tono de voz. Tragó saliva, poniéndose nervioso.
_ Yo...yo..._ el ruso agachó la mirada, pero Jean levantó su mentón, haciendo que el rubio lo mirará a los ojos.
Para JJ, ver esos ojos verdes esmeralda, mirandolo, como Yuri lo hacía, era su debilidad. Haría lo que sea para complacer a su reina y que esos hermosos ojos, solo lo miren a él.
_ Esta bien, saldré contigo. Pero quítate de encima._ Jean lo pensó por un momento. Si bien quería tener nuevamente al ruso entre sus brazos, deseaba que su relación avanzará. Qué fuera más que algo físico. Así que se apartó de él.
