CAPITULO 20: LA ULTIMA APUESTA

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-Hola Lau-

Dios, se ve tan bien. Ya no parece la niña de la que me enamore, se ha alaciado el cabello y ya no es castaña, viste formalmente. Ahora parece toda una mujer.

-Hola- digo con algo de timidez.

Se acerca a mi... Oh por Dios, ese aroma, me esta volviendo loca!. Se sienta junto a mi y cruza sus piernas con elegancia.

-Que haces aquí?- le pregunto tirando el resto de mi helado en el cesto de basura junto a la banca. No quiero verla, quiero evitar cuanto pueda mirar sus ojos.

-Vine a caminar-

-Igual yo-

Me siento de nuevo junto a ella, siento su mirada, un escalofríos recorre mi cuello y mi espalda. No puedo creerlo, la tengo tan cerca, siento su presencia y pienso que en cualquier momento desaparecerá y yo despertaré.

-Es un bonito día-

-Si así es-

Años de no vernos y estamos hablando del... clima?. Que elocuente conversación! Le pregunto o no le pregunto? De verdad quiero saber?

-Oí que vas a casarte- sueltan mis labios

-Así es, en cinco días es mi boda-

Auch! eso dolió. Demonios, ahora menos quiero verla. Se hace un silenció en mi mente y en mis labios, estoy en blanco. Lauren di algo! Comienzo a sentir mis ojos humedeciéndose. No, no, no Lauren, no llores.

-Es el chico con el que te fuiste?-

-Si, Shawn es mi prometido-

Ya lo se, demonios, demonios!... Y ahora que digo?. Siento algo calido en mi mano, no puedo evitar voltear a ver; es ella, me esta tocando.

-Wow, que bien- digo con sarcasmo.

Que bien! Jauregui dile ya lo que sientes carajo!. No, no lo hagas, mejor espera. Separo mi mano de la de ella.

-Quieres ir a tomar un café?-

café? mejor un vodka! Mis músculos se tensan, y mis dedos quieren enterrarse en el metal de la banca. Ella aun me mira.

-Si seguro- respondo.

Nos levantamos y caminamos hacía una de las pequeñas cafeterías.

-Como has estado?-

-Bien y tu?-

-Bien, ya sabes todos los preparativos de la boda y la universidad... es cansado-

-Me imagino-

Nos sentamos frente a frente en una mesa sobre la acera. Por fin la miro de frente, sin agachar la cabeza, directo a los ojos; y todo desaparece, solo somos ella y yo, por un momento.

-Y como estuvo la graduación?- me pregunta fijando su mirada en el menú.

-Bien, casi perfecto-

-Hola, que les vamos a servir?- pregunta la mesera.

-Un capuchino con cajeta por favor- le pido yo.

-A mi me traes un americano-

-Enseguida se los traigo- dice marchándose.

-Casi?- Pregunta regresando su mirada a mi.

Si, casi, faltabas tu; ME faltabas tu.

-Pues si, casi. A Ally se le ocurrió llegar ese día-

La apuesta (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora