Capítulo 2: El Secreto De Los Magos

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PoV Harry Potter:
Llegó el regreso a Hogwarts, y finalmente podría saber a que se refería esa carta que me envío el Ministerio.
En el andén me encontré con Ron y Hermione, subimos al tren y nos fuimos a un cubículo, les comente acerca de la carta que me había llegado.

¿Ustedes que saben de esto? - pregunte - Ustedes ya son mayores de quince.

Así es Harry - dijo Hermione mientras veía a Ron a los ojos - somos mayores de quince años, y nos llegaron las cartas pero esta prohibido hablar al respecto, cada mago lo vive diferente.

Entonces tengo que esperar a mañana - dije con curiosidad.

¿Que tal tus vacaciones Harry? - pregunto Ron.

Igual que las demás - dije - aunque sin Hedwig, me ha ido un poco mejor.
Mis amigos me vieron un poco atontados por mi respuesta, permanecimos en silencio, pude sentir como el sueño me vencía, así que minutos después me quedé dormido.

Pasaron horas y cuando desperté ya estábamos en hogsmeade, bajamos del tren, caminamos unos cuantos metros y subimos a las carretas y en unos minutos estuvimos en la entrada de Hogwarts, caminamos hasta la entrada, fuimos directo al gran comedor, nos sentamos y comenzó la ceremonia de selección, minutos después comenzó la cena, Dumbledore dio su discurso y de ahí nos fuimos a los dormitorios y al día siguiente tendría mi cita en el despacho de Dumbledore con el ministro de Magia.

Me levante, me duche, me vestí, y fui directamente al despacho de Dumbledore, toque la puerta la cual se abrió al instante, al ver adentro del despacho me di cuenta que Fudge ya estaba ahí.

Buenos días señor Potter - dijo el ministro extendiendo su largo brazo para saludarme - estoy aquí para tratar el asunto de sus quince años.

Buenos días señor ministro - dije respondiendo a su saludo - buenos días profesor Dumbledore.

Buenos días Harry - dijo Dumbledore sonriente - vamos tomen asiento.

Comenzaré Harry - dijo Fudge - cumpliste quince años el pasado 31 de julio, y hay un estatuto en las leyes mágicas donde cada mago y bruja al cumplir esta edad debe recibir esto - saco de una bolsita un diamante azul - este diamante se le da a cada joven bruja o mago, la cual le ayuda a su portador a conocer a su alma gemela.

Y ¿este diamante como me ayudará a eso? - pregunte incrédulo.

Pues puedes verlo y es color azul oscuro, pero al encontrar a la persona predilecta este se encenderá en un azul cielo brillante, escucharas la voz de esa persona - dijo Fudge - tomala, pero solo funciona si la otra persona ya tiene la piedra y si la trae consigo. ¿Alguna duda?

No señor - dije frunciendo el ceño - que pasará cuando encuentre a esa persona.

El Ministerio nos daremos cuenta al instante - dijo sonriente - pero solo será hasta que los dos diamantes concuerden.

¿Me puedo retirar?  - pregunté

Adelante Harry - dijo Dumbledore.

Salí del despacho de Dumbledore, directo al gran comedor pues en unos momentos las clases darían inicio,  pude ver que a lo lejos por los pasillos se acercaba sigilosamente el profesor Snape, nos emparejamos sin hablarnos tres pasos después Snape se volteo y dijo con su tono tan severo como de costumbre "decía algo señor Potter". Voltee a verlo directamente al rostro con curiosidad puesto que yo no había hablado y le dije "nada señor",  me vio apretando los labios y alzando una ceja, se acercó a mi, pero antes de tocarme se dio la media vuelta y se alejo sacando algo de su pecho.

Vi tal acto con algo de desaprobación y mejor decidí continuar con mi camino sin comprender el comportamiento del profesor Snape.

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Hasta aquí el capítulo dos, espero que les agrade.

La historia apenas comienza, no crean que habrá Lemon tan pronto, sería demasiado prematuro.

Agradecería que me dijeran su opinión acerca de este capítulo.

Si existe algún error solo recuerden que soy humana y hago lo mejor para mi ortografía.

Si les gusto haganmelo saber.

Saludos!!!

Diamante (Snarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora