Tan Solo Tu Y... ¿Nosotros?

Capítulo 4: Sueños imposibles

Me dio un dulce beso en la mejilla, pero cada vez se comenzó a acercar más y más hasta que rozó mis labios ligeramente. Estaba a punto de cumplirse uno de mis sueños: Mi primer beso. Pero entonces una bocina de bicicleta pitó y nos sobresaltó.

-Bueno... Adiós Andy-Dijo con los ojos brillantes Jesús.

-Hasta mañana guapo-Le dije lanzándole un beso al aire.

Entré en casa, saludé, y después, me duché, para finalmente cenar y acostarme.

Estaba escuchando música, la canción: "Darte un Beso" de Prince Royce, y entonces cuando decía:

*Yo sólo quiero darte un beso, y regalarte mis mañanas....* Noté como si me sacarán los cascos y me cantará una voz celestial: *Cantar para calmar tus miedos, quiero que no te falte nada, yo solo quiero darte un beso* en esta frase noté mis labios húmedos y sentí una genial sensación. Cerré los ojos y correspondí ese beso de anónimo. Al abrir los ojos mi a Jesús Oviedo.

-¡Jesús!-Dije un poco alborotada-¿Cómo has entrado?

-Por la ventana, guapetona-Dijo pícaro. Se levantó y cerró la puerta, también la ventana, y se quitó la camiseta. Acto seguido me miró y se puso sobre mí. Comenzó a besarme, y a recorrer mi cuerpo entre besos.-Te amo-Me dijo dulce.

-Y yo más guapetón-Le dije entre gozo y gozo.

Nos quitamos la ropa, nos besamos mucho,y finalmente nos únimos como si fueramos un mismo ser, haciendo el amor, desvirgándonos por primera vez.

Después nos dijimos unas palabras al oído, las más bonitas. En aquel momento alguien abrió la puerta y...