LOVE ME EVEN WHEN IT'S HARD.

CAPITULO 24

—De verdad me has estado esperando toda la mañana sentada en el sofá? —dice Stiles con voz suave— me he encontrado a tu madre en la entrada y me ha dicho

Lydia continúa de espaldas, aun sin mirarlo, difícilmente pasa saliva da un suspiro y se gira por fin, su mirada se muestra triste mientras lo mira a él. Permanecen en silencio solo viéndose el uno al otro con suavidad. Stiles comenzó a dar pasos lentos hacia ella, Lydia lo miraba con nerviosismo, cuando por fin Stiles detuvo sus pasos, se encontraban frente a frente, Lydia pasaba saliva con dificultad, miraba a sus ojos con la cabeza levantada, se sentía intimidada, por eso de la diferencia de altura, su mente estaba en blanco, no sabía lo que él iba a hacer o que pasaba por su mente, entonces, sin previo aviso Stiles la envolvió en sus brazos, el cuerpo tenso que Lydia había mantenido se suavizo al tacto de él, su cabeza recargada en su pecho y sus brazos envolviendo su cintura. Silencio, solo sus respiraciones podían escucharse y los latidos acelerados de ambos.

—Lo siento —rompe el silencio Lydia— no pasó nada con Jordan

—Lo sé —contesta el con tranquilidad— yo también lo siento

Ambos sueltan un suspiro, y el silencio vuelve reinar entre ellos, permanecen abrazados, Lydia sonreía al escuchar el corazón de Stiles latir, las mejillas de Lydia se encontraban un tanto húmedas por las pocas lágrimas que había soltado sin razón. Stiles aparto su cuerpo del de ella, la tomo por las mejillas limpiando el resto de lágrimas con sus pulgares y la miro directamente a los ojos.

—Hay que hablar —dijo serio y Lydia asintió.

Lydia permanecía sentada en el sofá con la vista sobre su regazo, Stiles se encontraba sentado en la mesa de café frente a ella.

—Hey...—dijo el tomando las manos nerviosas de ella— yo vine aquí con la intención de pedirte perdón, porque la cague, porque no te preste la atención que debía, porque te he dejado sola con la boda y peor con nuestro bebe, perdón por gritarte aquella noche, no debí, así como no debí irme ayer de esa manera y tal vez, solo tal vez no debí golpear a Parrish, pero, no pude evitarlo, soy un idiota, y estaba celoso...

—Estabas celoso? —dijo con una pequeña sonrisa.

—Claro, mi chica prefiere quedarse lejos de mí y anda por ahí con un sujeto que está interesado en ella, como no lo estaría

—Perdón —dijo Lydia— yo no debí portarme así, ni irme sin decirte, solo... no sé, me sentí mal, y explote y fue más fácil huir que quedarme y lo de Jordan, no es nada como piensas, el solo no dejaba de insistir en que me distrajera un poco, porque he estado muy muy involucrada en las cosas de la boda, y tal vez solo accedí porque trataba de no pensar en ti, pero es imposible no hacerlo, te extraño a cada segundo, y esa es la verdad, perdón si mi orgullo me impedía volver a casa y decirte que te extraño y que te amo, porque te amo y mucho

Stiles sonreía al ver a Lydia, las mejillas de Lydia se tornaban rojas ante eso.

—Me siento como aquella vez en la que te dije que te amaba, estaba tan nerviosa, mis mejillas ardían, tal como ahora, y tú me mirabas, tal como ahora lo haces

—Es que te mirabas adorable, tan tierna y tenía unas inmensas ganas de besarte, tal como ahora

—Recuerdo que lo hiciste —rio Lydia.

Stiles sonrió más grande, se acercó a ella, sus labios se encontraban a escasos centímetros y sus respiraciones se mezclaban.

—Tal como ahora —susurro Stiles juntando sus labios con los de Lydia, un beso lleno de amor, con ternura.