Sin ti

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"Lex era dos personas distintas.
Era uno casi todo el tiempo, cariñoso ,comprensivo y un buen hermano. Habia otras que me asustaba, en las que se aparecía en mi cuarto a media noche, en las que confundido juraba que nos amábamos, en las que se volvía un monstruo que me lastimaba bruscamente, que olvidaba que era pequeña, en las que olvidaba que yo no tenia nada mas que no fuese el y aun así me hacia desconfiar. 

Yo era dos personas contigo kara, era la dulce y cariñosa lena que era feliz contigo, con el hecho de que le tomaras la mano o le dijeras algo lindo.
Por otro lado no era mas que un monstruo celoso que te quería para si mismo sin importar que.
Que hubiera matado por reclamar lo suyo.
Que te comparaba con la belleza de un mar celoso.

¿te lastime alguna vez amor?

Lena".

barry estaba parado fumándose un cigarrillo, veía a charlie el guardia de turno por el rabillo del ojo. traía cinco grandes y esperaba no necesitar mas.

extrañaba a caitlin. quería que lena no sufriera mas y esperaba que su plan de encontrar al culpable del robo de los documentos por las cámaras de seguridad del edificio sirviera.

de pronto sonó su teléfono. un mensaje de kara.

"he barry, te mereces esta foto de caitlin. un pequeño regalo para que sigamos fuertes hacia delante. las recuperaremos. _(ese es su perro toby)

 _(ese es su perro toby)

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kara :D"

barry sonrió.

charlie conversaba con unas chicas que le preguntaban acerca del oficio. el viejo de unos cincuenta se hacia el listillo y las chicas las guapas solo para que al salir mas tarde este no dijera nada a clark.

al irse las muchachas barry tiro el cigarro a la mitad y se acerco.

-buenos días charlie-.

-señor barry...- decía el viejo tocándose las manos.

-no me digas señor, trátame como a cualquier otro-.

-su tío, el señor luthor, señor-.

-el no esta aquí ¿o si?- pregunto barry.

el viejo se hecho a reír nervioso.

-¿puedo ayudarlo en algo?- pregunto mas calmado.

-de hecho si que puedes- barry se acercaba mas ahora- necesito ver las cámaras de seguridad de un día y hora en especifico-.

el viejo se hecho hasta atrás asustado.

-¡no puedo hacer eso señor!- exclamo.

-¿ni siquiera por cinco grandes?-.

el viejo sonrió desvergonzadamente.

...

lena y caitlin se habían saltado las clases ya casi una semana media seguida, se habían vuelto las amigas en el dolor.

Snuff it: deseo perversoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora