🏵All I Want For Christmas Is You. 🏵[Otayuri]

3 de Diciembre: Por mientras exista una Navidad.

Ambos ya habían vuelto de la tienda comercial, al final Yuri dejo a Yuuri buscar aquellas tablillas de chocolate, mientras Yuri se defendía diciendo que se le había olvidado el pasillo donde se encontraban aquellas cajas.

-Ya se durmió-Dijo Viktor cerrando la puerta de la habitación del menor.

-¿Otabek ya llego a San Petersburgo?

-Ya, en unos minutos iré a recogerlo.

Yuuri solo se quedo analizando la cara de Viktor, quien tenía una expresión algo aburrida.

-¿Paso algo?-Viktor era transparente, con tan solo escuchar su voz, o ver su simple rostro podías deducir sus pensamientos.

-Aún no se que darle de regalo de Navidad-Dijo llevándose ambas manos detrás de la nuca.

-¿sabes? En la tienda vio unos peces payaso que le gustaron.

Yuuri trataba de animar a Viktor, y al parecer funcionó, la expresión de este había cambiado radicalmente-¿en serio?

A Viktor siempre se había esforzado por complacer a Yuri, y como no hacerlo, era un hijo para el y aparte era el menor de los tres. Así que no había problema en mimarlo ¿o si?, quizá unos peces serían un gran regalo de Navidad, aunque no durarán mucho tiempo, y mucho menos en manos de Yuri.

-Bien, iré por Otabek, no dejes que se despierte hasta mañana.

-Lo haré, ya limpie el cuarto de huéspedes, se puede quedar ahí.

-Está bien.

Viktor salió de la casa, mientras sacaba las llaves de su auto. Le quitó la alarma e inmediatamente abrió la puerta de ese carro azul, hacía bastante frío, pero su temperatura cambio ligeramente al entrar al auto, estaba un poco más caliente, por lo que decidió subir la temperatura dentro de este.

Antes de arrancar su auto le llamo a Otabek, quien al parecer ya estaba bajando del avión.

-¿Si?

-Ya voy en camino.

-Está bien.

Viktor estaba igual de emocionado que Yuri, aunque este no mostrara tanta emoción lo estaba, ya ansiaba comer el katsudon que Yuuri estaba preparando, y al parecer todo el espíritu navideño estaba iniciando con la llegada de Otabek, la primera visita de navidad.

Viktor llegó al aeropuerto donde ahora, su única labor era encontrar a Otabek entre ese mar de gente.

Lo busco varias veces con la mirada, pero no lo encontró, al parecer se había cansado de buscarlo, cuando en realidad había llegado ahí hace unos cinco minutos.