Don't believe in your heart#Wattys2017 (PAUSADA TEMPORALMENTE)

Capitulo 23:"Encuentros inesperados"

Emily P.O.V

Ellos se dan la vuelta, y se fijan en nosotros.

Veo como Renata le susurra algo a Evan pero no consigo descifrar que es.

El camarero nos lleva a nuestra mesa. Está situada casi al lado de la mesa de  Evan y Renata.

Desastre.

Evan no nos quita ojo en toda la cena, y eso hace que Alec empiece a  ponerse nervioso pero claro, este aún no sabe que Evan cree que lo deje por él.

Sera mejor que se lo diga en cuanto lleguemos a la casa.

Alec se queda mirando para Evan.

Madre mía, la que se va a armar.

-¡Oye se te perdió algo! –le grita Alec a Evan.

Yo le digo a Alec que lo deje pero no me hace caso.

-¡Si, fíjate que sí! –le grita en respuesta Evan.

Cállate Edward, Alec aún no sabe nada.

-¿El que, si se puede saber? –le exige Alec.

-A mi novia, el día de nuestra boda porque un imbécil se la llevo –le dice Evan muerto de coraje.

Me dan ganas de meterle por la boca una servilleta para que se calle.

Alec se me queda mirando, intentando adivinar porque Evan le ha dicho eso.

-¿Y tú Emily? ¡No me puedo creer que tengas la cara de presentarte con el aquí! ¡Solamente hace dos días de la boda! –me grita Evan.

Yo agacho la mirada porque sé que tiene razón.

Carmen me lo había advertido, esto era una mala pero que muy mala idea.

-¡Ten mucho cuidado con lo que dices! –le grita Alec

Aunque el pobre no sabe el lio en el que lo metí, sigue defendiéndome.

-No le hagas caso Alec, mejor vámonos –le digo agarrándolo del brazo pero esto hace que Evan se cabree aún más.

-¡Míralos que hermosa pareja! –dice con cinismo Evan.

Sé que está dolido y también muerto de los celos, pero eso no le da derecho a armarme tremendo escándalo.

Bien que yo podría echarle en cara que este aquí con esta bruja.

En ese momento, Evan le da un empujo a Alec y este le da un derechazo en la mandíbula.

Y se armó la pelea.

Evan le devuelve el golpe a Alec, pero antes de que lleguen a más, cuatro camareros se acercan y los separan.

Renata corre a ayudar a Evan, y yo me quedo quieta en mi lugar.

Alec me coge de la mano y nos vamos del restaurante.

Durante todo el camino Alec no ha pronunciado palabra. Así que soy yo la primera en abrir la boca.

-Lo siento mucho Alec, no esperaba que Evan se comportara así –le digo en un susurro

Alec aparta el coche a un lado de la carretera y se gira hacia mí.

-¿Qué es lo que está pasando Emily? ¿A que vinieron las palabras de Evan? –me pregunta con confusión en su voz.

Ha llegado la hora de darle explicaciones.

Tomo aire antes de hablar.

-Evan cree que lo deje plantado en el altar por ti –le digo mirándolo a los ojos.

Alec me mira extrañado.

-¿Y porque piensa eso? –me pregunta.

-Porque yo le dije que estoy enamorada de ti –le digo en un susurro.

-¿Qué? –me dice Ale con un brillo en los ojos.

Madre mía, otro corazón que voy a tener que romper.

Valeria P.O.V

Mi padre entra como si nada en mi casa pero cuando se da cuenta que no estoy sola, que hay un hombre conmigo se queda parado en la sala.

Su cara cambia, lo conozco y está a punto de explotar.

-¿Me quieres decir quién es este tipo? –exige saber.

Martin deja los platos encima de la mesa, y se gira hacia mi padre.

-Soy Martin –le dice extendiendo su mano.

Mi padre lo mira con repugnancia.

-¿Qué es esto Valeria? –Me dice mi padre enfadado –¿Quién es este tipo?

Cierro la puerta y me pongo al lado de Martin.

-Este tipo tiene nombre, se llama Martin, y para que lo sepas de una vez es mi novio –me enfrento a mi padre.

-¡¿Qué estupidez estas diciendo?! ¡Tú estás casada! –me grita en cólera mi padre.

-No es ninguna estupidez, y además no estoy casada. Estaba comprometida y rompí con el compromiso hace muchísimo tiempo, padre –le digo tranquila.

Por experiencia sé que si discuto con el esto puede ir a peor.

-¡No digas tonterías! –me grita mi padre

-No son tonterías, y ya es hora de que lo afrontes –le digo –¡Royce me maltrataba y se robaba todo tu dinero padre! –le grito

Mi padre levanta la mano para darme un golpe pero antes de que pueda hacerlo Martin se mete de por medio.

-¡Delante mía, nunca le levante la mano, señor! –le grita Martin

Mi padre jamás ha querido darse cuenta de la verdad.

-Es hora de que te vayas –le digo

Mi padre nos mira con asco, luego se dirige hacia la puerta y la abre, pero antes de salir me vuelve a mirar.

-Tu madre se está muriendo, y quiere verte. Ya sabes dónde localizarme –dice mi padre antes de largarse.

Estática es como me quedo.

Me suelta una bomba como esa y luego se larga.

El pasado vuelve, y de la peor manera.