¿Un amor de película? [Shadonic | Scourganic]

•°•CAPÍTULO 33°•°

Un par de días más tarde...

~Narradora~

Dos días transcurridos... Nada más interesante que Manic acosado por su nuevo grupo de "fans#1", Sonia espantando a sus fanboys con gas pimienta, Sonic siendo casi violado por otro grupo de fan girls y Shadow escapando en su querida rubie de las chicas que le habían dado un aventón el día de su espectacular borrachera.

Lo más normal que pudiera pasar en un sitio como Möbiuswood en el transcurso de dos pacíficos días...

— Sonic, anda, ayudame —rogaba la eriza fucsia, estrujando al menor con ambos brazos.

— No Sonia, mucho hago con guardarte el secretito como para que también te haga semejante favor.

— Sólo serán un par de horas, necesito que me ayudes. ¡Anda! Después te dejaré en paz todo el día.

Resumen de lo ocurrido desde hace varias horas:

Sonia tenía una reunión importante y aburrida, por lo tanto ir sola no era su opción.

— ¿Qué gano? Sólo iré para aburrirme —gruñó bajito el ezul, mirando a un punto contrario de donde el rostro de la chica se encontraba —, además  para ti un favor es como nada, no creo que lo aprecies después.

— Ay peque ¿por quién me tomas? —sonrió confiada, apretujando con fuerza al chiquillo contra su cuerpo.

— Sonia, no —chilló molesto, colocando su mano contra la cara de la erizo, en un intento de alejarse de ella, lográndolo después de unos minutos.

— Anda, esto es muy importante. Le dije a Manic y no quiso —sobó un poco sus mejillas y su frente, mirando al azul que negaba.

— Y ¿por qué creés que yo sí? —se cruzó de brazos, formando un pequeño puchero con sus labios.

— Porque tú, Sonic, eres un amor y no puedes decir que no —canturreó segura, tomando al menor por los hombros —. ¿Me acompañas? Por favor.

El cobalto aceptó a regañadientes, gruñiendo suavemente al mirar a su hermab sonreír.

— ¡Lo sabía! —exclamó feliz la erizo, tomando por sorpresa a Sonic para abrazarle con fuerza —. Sólo serán un par de horas y ya.

— Más te vale —murmuró entre los brazos de la chica, mirando un punto muerto frente a él.

Estaba molesto con ella, pero como esta misma había dicho... Él nunca diría no.

— ¡Vámonos! Comienza en una hora —se separó rápido, tomándole de la mano y saliendo de aquella sala.

Ambos estaban de nueva cuenta en aquel hospital, haciendo la visita de ya costumbre junto a el mediano de los hermanos, claro, este último parecía ya vivir en el hospital.

Salieron rápido de aquel lugar, la mayor llevando casi a rastras al azul, provocando que el pobre se diera más de un caraso contra las puertas de cristal por las cuales pasaban.

Salieron al estacionamiento, esquivando a cualquier reportero que se les colocarán enfrente.

Ya sobrevivían de ninjas.

La chica subió a su auto, bajando un poco los vidrios de éste, esperando a que su hermanito imitara su acción.

— Sonic, vamos, se me hará tarde —refunfuñó la de ojos azules, sonando el claxon un par de veces.

El chico le ignoraba, tenía en su mente cosas más importantes en que pensar, sentía que algo se le pasaba... Algo se le había olvidado.

— ¡Sonic! —gritó de nuevo, ganándose por fin la atención del de orbes esmeraldas.