Última parte chicas, espero que realmente les guste y gracias una vez más por todo su apoyo.
Las quiero!
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De vuelta en el auto, pienso en todo lo que ha ocurrido.
Mis extraños pensamientos, los nuevos sentimientos que he descubierto y el hecho de que logre disfrutar de la noche más de lo que esperaba, me hicieron sentir como una persona normal.
Como alguien que no tiene que preocuparse por llevar comida a casa para que su madre y hermana no mueran de hambre. Me hizo olvidar que he matado a personas inocentes y las pesadillas que me atacan todas las noches, me hizo olvidar que las cosas entre mi mejor amigo y yo, ya no son iguales.
Pero sobre todo ne hizo olvidar la culpa e incomodidad que sentía al estar cerca de Peeta, me hizo ver un lado de el que nunca imagine y darme cuenta de cuanto me gusta.
Observo.
Peeta esta recostado en el asiento, su brazo izquierdo esta sobre su rostro cubriendo sus ojos, su chaqueta negra está en sus piernas junto con la corbata.
- ¿Peeta estas bien?
El quita su brazo de su rostro y me mira.
Sonríe.
- Si, preciosa estoy bien.
Deja la chaqueta y la corbata a un lado y se acerca a mi, toma mi rostro con sus manos y acaricia mi mejilla.
- ¿Estás bien?
Asiento, saviendo que me será imposible hablar teniéndolo tan cerca.
- Me alegro -dice alejándose de mi.
Antes de que este más lejos, lo detengo sosteniendo su brazo y atrayendolo más hacia mí. El me mira con sorpresa y diversión en los ojos.
Esto es una locura, pero se que si no lo hago me arrepentire y realmente no tengo ánimos para ese tipo de sentimientos.
Llevo mis manos a su rostro y sin pensarlo dos veces lo beso. Sus labios se sienten calientes pero suaves y tienen el sabor a manzana de la bebida que nos dio Cinna.
Besos sus labios, pero no recibo ninguna respuesta de su parte.
Oh que estupida soy, como pude pensar que esto estaba bien, no eres este tipo de chica Katniss. Asi que olvidando mi estúpido impulso me alejo lentamente de el, pero cuando mis labios dejan los suyos lo siento suspirar.
El abre ligerente los labios, pone sus manos en mi espalda y vuelve a juntar nuestras bocas.
Esta vez es el quien me besas, lento y suave pero cargado de una sensualidad que no soy capaz de resistir. Nuestros labios se mueve en un ritmo perfecto, haciendo que cada parte de mi cuerpo arda. Peeta agarra mi cabello con fuerza tirando de el para profundizar más el beso, nuestros labios se tocan una y otra vez, permitiendo que lentamente nuestras lenguas se encuentren y bailen a un ritmo desconocido, jugando para saber quién podía ser mas rápido, más profundo o placentero.
Peeta rompe el beso, su respiración tan agitada como la mia. El me mira sus ojos están tan oscuros como la noche, el azul cálido ha sido reemplazado por un oscuro color que expresa cosas que no sabría decir.
- Peeta...
El pone su mano en mi barbilla y me acerca a el para volver a atacar mis labios. El beso es tan intenso que me obliga a retroceder y apoyar mi espalde en el asiento, su mano derecha juega con las pequeñas flores de mi vestido, mietras su otra mano acaricia suavemente mi mejilla.
Su lengua roza mis labios haciendo que un ligero suspiro salga de ellos, Peeta se apodera de mis labios una vez más, haciendo el beso mas lento y profundo y dejándome llevar agarró su cabello con mis manos tirandolo justo como el hizo con el mío.
El jadea y rompe el beso.
- Dios...Katniss -dice.
El junta nuestras frentes y cierra los ojos, quizás tratando de asimilar lo ocurrido o tratando de calmar su respiración.
Lo abrazo de vuelta, apoyando mi cabeza en su hombro, sintiendo como el sueño y el cansanción hablan por mi.
- Nunca quiero olvidar esta noche.
- Yo tampoco quiero olvidar. -Dice.
Y con esas palabras, cierro los ojos y me dejo llevar por el sueño, sintiendo el delicioso aroma a canela y menta del chico del pan.
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Ya saben, pueden dejar sus comentarios y recuerden también que pueden pedir sus historias yo con gustó las escribire.
Les dejo una de mis canciones favoritas de Ed Sheran para que la escuché leyendo esta parte. 😄😉😁
Gracias por leer, y comentar.
Las quiero, besos!
Heilyn. R. M.
