Cuerdas mal sonantes 💔

Capítulo 20:Vidas Separadas.

Esta vez, Noah fue la primera en levantarse, eran las 7 y media. Noah bajó al salón para ver si Giovanna seguía durmiendo allí. Pero para su sorpresa no estaba. Subió a la habitación de Giovanna y tampoco estaba.
*¿Dónde se ha metido esta? Cómo no sea que Toni haya venido y se la haya llevado.... No sé donde estará.–Pensaba Noah con una sonrisa pícara.
Bajó a la planta baja y miró en la cocina, tampoco estaba. Revisó los baños y tampoco. Volvió a subir y revisó en el mini salón de arriba y tampoco estaba. Pero en ese momento, miró por la ventana. Y vió a Giovanna. Estaba tumbada en el césped con una manta encima.
–Que mona, vería anoche las estrellas. Jeje–decía Noah riendo.
Noah decidió ir a la cocina, llenar un vaso con agua.
Noah miraba el vaso mientras pensaba "Me voy a vengar de todo lo que me ha hecho..." Noah se dirigió hacia dónde se encontraba esta. Estaba durmiendo plácidamente.
–Lo siento Giovanna–decía Noah mientras le tiraba el agua que estaba dentro del vaso, en la cabeza.
–Fffffff...... NOAHHHHHH QUÉ HAS HECHO...
Noah salió corriendo hacia el interior de la casa.
–¡¡¡COMO TE PILLE TE ENTERAS!!!–Chillaba Giovanna mientras se metía en el baño de abajo. Giovanna se dió una ducha mientras Noah, hacía la maleta y metía toda su ropa, zapatos en las bolsas etc.
Giovanna hizo lo mismo que Noah, mientras esta se duchaba. A diferencia de Giovanna, Noah cantaba muy bien. Cuando Giovanna pasaba al lado de la puerta del baño, se paró a escuchar lo que cantaba su amiga.
Estaba cantando "Impossible"-de James Arthur. La canción la cantaba muy bien y cuando esta acabó de cantarla, Giovanna aplaudía y chiflaba.
–BRAVOOO–chillaba Giovanna para que Noah se enterara.

De repente tocaron a la puerta y Giovanna bajó a abrir. Cuando abrió, era Marcus.
–Hola Giovanna –decía sonriente.
Giovanna miró el reloj de la entrada y eran las 8 y media.
–¿Qué haces aquí?
–Pues, he estado trabajando temprano en la playa y cómo me venía de camino, digo, pues ya me quedo allí.
–Ah y ¿en qué trabajas? Si se puede saber claro.
–Pues yo soy... –decía Marcus hasta que bajó las escaleras Noah chillando.
–GIOVANNA, SE PUEDE SABER EL PORQUÉ ESTABAS... –cuando vió a Marcus, dejó de chillar.
–Hola Marcus–sonreía
–Hola–decía este saludando con la mano.
–Que tal si entras y cierro la puerta... –decía Giovanna mosqueada.
Marcus entró en la casa y Giovanna se fue la cocina a hacer los desayunos de ambas.
–MARCUS
–¿¡QUÉ!?
–¿QUIERES DESAYUNAR?
–NO, GRACIAS

Giovanna hizo los desayunos de Noah y ella. Desayunaron un vaso de agua y los dulces que compraron en el supermercado.

Al rato llegó Toni, justo a las 9.
–Cuanta puntualidad madre mía–decía Giovanna asombrada.
–A qué sí –decía este guiñándole un ojo.
Giovanna no entendía nada, le devolvería el guiño pero no entendía lo que hacía Toni con su vida.
*¿De que va? ¿Quiere conquistarme o qué? No entiendo nada. Pero si es así no lo va a conseguir. Todos los tíos son igual de imbéciles. –Pensaba Giovanna distante. (nota de la autora rápida: es lo que piensa Giovanna, no yo)

–Hola hermano, buenos días.
–Hey, al final he sido el último jeje.
–La puntualidad no es tu fuerte.–Decía Noah riéndose.

Giovanna mientras, subió y bajó las cosas suyas y de su amiga como pudo.
–Ya estamos listas ¿nos vamos?
–Vale, Marcus, ¿trajiste tu coche?
–Qué no, que he estado trabajando.
–Ah vale,entonces os llevo a vuestra casa ¿no?
–A ser posible, compadre.

Giovanna y Noah no entendían nada. Cada una cogió sus cosas y las metieron en el maletero del coche.
Cuando Marcus vió el violín no tardó en lanzarse a preguntar.
–¿Lo tocas?
–Sí, mi madre lo tocaba y yo también.
–Me tienes que dar un concierto ehh.
–Ya veremos, Marcus.

Se subieron todos en el coche y fueron a la casa de Marcus, pero antes había que decidir quién iba a irse con quién.
–¿Quién se viene conmigo? –Decía Marcus.
–Noah, yo me quedo con Giovanna.
Giovanna se extrañó por la interrupción de Toni.
*Supongo que Noah estará más feliz con Marcus así que voy a decir que vale, porque conozco a mi amiga demasiado bien. –Pensaba Giovanna.
–Por mi bien –decía Giovanna.
–De acuerdo, ya os dejo allí –decía Toni– Recordar, hoy en la casa de Maddison a las 3 y media o 4 de la tarde, para sacar todos los muebles.
–Okay–decía Noah bajando del coche.
–Vale, adiós hermano.
–Bye