30 días

Día 17: El aventurero y la princesa

Cuando me levanté guardé silencio para que Blaze no se despertara. Fui a la mesa y tomé el árbol de Navidad y lo empecé a armar a un lado del cuarto de Blaze, me tardé como media hora en ponerlo, veintinueve minutos tratando de ver cómo se ponía y en un minuto lo logré armar.

Silver?.- era Blaze que me estaba observando no se desde que hora.- tuviste problemas al ponerlo?

N-no, esta todo controlado!.- me reí.

Seguro campeón...-se burló de mi.- que quieres desayunar?

No se, lo que tu quieras.

Odio cuando me contestas así.- me reclamó.- si te pregunto es por que cocinaré algo que te guste.

Gracias, pero ahora...no tengo hambre.- sonreí.- pero me dará hambre después que vayamos a comprar los adornos del árbol y unas cuantas decoraciones para el departamento.

Eh...es enserio?.

Lo prometiste ayer!.

Ahhh....esta bien, pero no pienso tardarme en el centro comercial.

Quién dice que iremos al centro comercial?.- le sonreí.

Eh?

Salimos del departamento y comenzamos a caminar por los negocios de Navidad, Blaze se paró en algunos puestos para observar con más detalle las mercancías.

Mira Silver.- me acercó.- aquí graban en las esferas nombres, que detalle más lindo.

Es cierto, son muy lindas.- observé a Blaze.- Quieres una?

No, sólo que me llamaron la atención.- se alejó del puesto.

Mmm...

Disculpe.- se acercó un señor.- le interesó a su chica algo de nuestro puesto?

Eh no, pero son muy lindas las esfe...espere, "mi chica"?

Oh lo siento lo ofendí?

No, es que todos me dicen lo mismo cuando estoy con ella...- susurré

Oh lo siento, lo siento.

No se preocupe.- me reí

Es que supuse que era su pareja debido a que ella me dijo que...

Silver!, hay que seguir!.- me llamó desde lejos.

Ah?, sí ya voy.- le grité.- lo siento tengo que irme, hasta luego muchas gracias.

Regresé con Blaze y después fuimos a comprar algo de comida y seguimos buscando más decoraciones.

Y por qué no quisite ir al centro comercial?.- preguntó Blaze

Meh, pensándolo bien, son más lindas las artesanías y además, apoyamos al mismo tiempo a las personas que las hacen, no crees?

Heh, tienes razón.- sonrió.

Seguimos caminando un rato, pero íbamos en silencio.

Oye Silver, quiero decirte algo...- se detuvo.

Eh?, sucede algo?.

Bueno, tu sabes que los dos siempre hemos estado juntos desde que éramos unos niños, me has ayudado y que incluso después de lo que sucedió con Solaris lograste recuperar aquello que perdiste gracias a tu gran esfuerzo, me salvaste, iré al grano, Silver...yo...te agradezco todo lo que has hecho por mi y que reconozco que te has vuelto una persona muy fuerte, por nada en el mundo, por ninguna situación, dejes que nada se interponga en tu camino.- sonrió y siguió caminando.