My Inspiration [A-17×Black] |TERMINADO|

6

''Camiseta''

Es extraño. La camiseta se holgaba a partir del torso hasta sus caderas, se supone que tiene la misma estatura que el ojiceleste pero no fue el caso. Acomoda la camiseta quitandole las arrugas que se formaban.

—No quedó como pensaba.

Suspira, mas dirige su vista al sentir que lo toman de los hombros y tumban en uno de los sofás. Diecisiete fue el causante, al igual que le cruzaba las piernas y le recostaba la cabeza en el respaldo de la cama, quedando así en la posición que quería.

— ¿Qué haces? —le preguntó confundido mientras se dejaba.

— Quedate así.

El ojiceleste se levantó y dirigió a su habitación. Black se queda en el sofá esperando a Lapis que regresa a los pocos minuto con una libreta de dibujo y un lápiz de carbón.

—¿Qué harás?

—No te muevas, ¿vale?

Black deja de extrañarse por la actitud de Lapis cuando el contrario le observa  por unos segundos y vuelve la vista a la libreta. Entendió que le retrataba en aquella hoja de papel.

Por su parte, para Diecisiete, era una oportunidad de pasear la mirada por las piernas que estaban expuestas gracias a la pose en la que se encontraba. Cada pequeño instante borraba las líneas que suavemente trazaba.

Después de unos quince minutos subió la mirada para toparse con el rostro adormilado del azabache, practicamente cabeceaba. No era tan tarde pero despertarse temprano tenía sus consecuencias.

Suspira y deja la libreta encima de la mesa con el lápiz. Se levanta y acerca al menor que ya se acomodaba mejor sin abandonar la pose en la que lo había colocado.

Cuando iba a tomarlo de los muslos y posteriormente de la espalda, Black abrió los ojos lentamente sintiendo como su cuerpo era elevado y llevado.

Quitó la importancia a ello pues el sueño era mayor a que descubrir quien le cargaba hasta el cómodo colchón.

— Oye...

Gira su cuerpo encima de las sábanas hasta que busca la forma correcta en la que la corriente chocara con su cuerpo.

— Sigues llevando mi camiseta...

Ignoró. Se abrazó a si mismo sin notar que Diecisiete tomó aquello como que no le devolvería la prenda.

—Uh, bien. Quédatela.

Rodó los ojos y se retiró del cuarto, volvió al mismo lugar donde dejó la 'fotografía' a medias que solo contenía la silueta del hermoso chico en la habitación. La volvió a tomar y continuó retratando la vaga imagen que quedaba grabada en su mente, claro, sin mas mínimos detalles, una imagen sencilla.

Delineaba los labios lentamente, casi como proponiendose que a la primera le saliera la compostura de aquella parte tan resaltante de él.

Por su mente pasaba la escena de hace una hora en frente de la tienda electrónica, el movimiento de sus labios al compás de 'Even Fallen In Love', la voz con la que lo entonaba.

Gracias al azabache, su libreta tenía la mitad de sus hojas impresas el rostro, complexión y formas abstractas de Black. Por las noches tenía insomnio, cosa que aprovechaba a levantarse y quitar de su mente al menor plasmándola en una de las tantas hojas.

— Uh, ya no sales de mi cabeza.