Era real, no era ningún tipo de pesadilla ni nada por el estilo. Mi madre me había echado de casa, por ser gay, no sabía que hacer en ese momento, ¿Donde podría quedarme? Aunque me costó hacerlo, decidí llamar a 'mi mejor amiga' Ana, y preguntarle si podía quedarme en su casa. Afortunadamente sus padres aceptaron tras explicarles todo lo que paso, y me dijeron que podía quedarme todo el tiempo que quisiese. Cuando ya estaba 'instalado' en casa de Ana, pensé que era el mejor momento para hablar con Ana.
-Ana, tenemos que hablar.
+ ¿Qué pasa Ale?-Dijo ella tranquilamente.
-¿Por qué le dijiste a Miguel que había preguntado si era gay o no? ¿Sabes el mal momento que he pasado? Aparte, Miguel le ha contado todo a Carlos, y hemos cortado.-Tras decir esto, una lagrima apareció por mi rostro e inmediatamente Ana se acercó a mi.
+ Ale, yo no le dije eso a Miguel, el nos escuchó, y luego vino a preguntarme si de verdad habías dicho eso, yo no lo dije nada. Miguel está enamorado de ti desde el primer día que llegó al instituto... Y respecto a lo de Carlos, lo siento muchísimo en serio.
Sabía que decía la verdad, la conozco lo suficientemente bien para saber que mi amiga no estaba mintiendo. No me podía creer que Miguel estuviera enamorado de mi, no se que tiene ese chico que tanto me atrae. De todos modos, el hizo que rompiera con Carlos, y eso no podia perdonarselo.
Al día siguiente, Ana y yo nos preparamos y fuimos a clase. Nada mas entrar a nuestra aula, el estaba ahí, sentado justo al lado de donde nos sentabamos nosotros, la verdad es que estaba bastante sexy. No lo podia negar. Me sente en mi sitio y me dijo:
- Tenemos que hablar, ayer dejamos un asunto pendiente.- Me dijo guiñandome un ojo.
+ ¿Cómo tienes el valor hablarme de esa manera, siendo tu el responsable de que haya terminado con mi novio?- Le dije casi gritando, en ese momento agradecí que no había casi nadie en clase todavía.
+ Yo solo le dije lo que paso, no tienes por que echarme la culpa de eso.
- No paso nada, gracias a que logre irme del baño.. Además... -El profesor entró por la puerta y tuvimos que callarnos.
Las horas pasaban lentamente, tenía que acabar de hablar con Miguel, llevaba pensando en eso todo el día, y la verdad es que dejé bastante aparte a Carlos de mis pensamientos. Sonó la campana, era hora de irme a mi casa, o mejor dicho, a casa de Ana. Fui rápidamente al baño, esta vez para hablar con Miguel. No lograba encontrarlo por ningún lado, hasta que una voz que provenía de uno de los baños dijo:
- Aquí estoy.-Era Miguel. Entra y cierra la puerta.- El hecho de que me quedara encerrado en un baño otra vez con Miguel me ponía bastante nervioso. Sabía que si me volvía a acorralar, no me iba a resistir.
+ ¿Me puedes acabar de explicar por que le contaste todo eso a Carlos?
- Escucha, yo no lo dije nada malo mas lo que paso.
+ ¿Entonces por qué ha terminado conmigo? Yde todas maneras ¿Para qué lo llamaste?
- Por que te quiero, y estoy enamorado de ti, quiero que seas mío Alejandro.
Tras decir estas palabras, Miguel se fue acercando poco a poco a mi, esta vez no me iba a alejar, ya no tenía novio y podía hacer lo que quiera. El me levanto un poco la barbilla, nuestros ojos se mantuvieron por unos largos segundos en contacto, hasta que yo me acerqué un poco mas y finalmente, nuestros labios estaban juntos.