Capítulo 15

75 2 0
                                    

Tina siente mareos, se encuentran agazapadas detrás del montón de hierba, escondiéndose de aquella bestia. Arianna sigue sollozando de vez en cuando, siente presión em el estómago y de vez en cuando le entran ganas de vomitar. Tina siente algo en su espalda, algo que le sube poco a poco y le llega por el cuello; Arianna le mira el cuello, y de pronto comienza a chillar de terror. Una araña; negra, gorda, repugnante. La bestia pega un alarido, casi podían notar su aliento, sin embargo no se mueven del sitio. Tina, alza la mano hacia el cuello, y toca donde siente ese cosquilleo. No nota nada, ni un bultito, siente que algo se mueve pero no nota nada con sus dedos. Arianna, se aparta rápidamente de ella, asustada, y en ese instante la montañita de hierbas se cae y quedan al descubierto. La bestia las mira con ojos profundos quieta, preparada para atacar. Tina agarra la mano de su compañera y no se lo piensa dos veces, se levantan y empiezan a correr lo más rápido que sus piernas pueden. La bestia, corre trás ellas, pegando unas zancadas impresionantes. Arianna va chillando por todo el bosque, mientras mira con ojos llorosos todo el tiempo hacia atrás. Tina, avanza entre las hierbas, silenciosa, muerta de miedo pero no es capaz de dar palabra a lo que está sucediendo. De repente, la bestia alza sus patas traseras y lega un salto, un salto gigantesco; aterriza delante de ellas, a dos metros. Pueden sentir su caluroso aliento. Tina, rapidamente apunta con su pistola a la bestia, dispara en su cabeza. Pero algo pasa, al observar la trayectoria de la bala, esta no le dá al cuerpo, sino que lo traspasa sin hacerle ni un solo rasguño. En ese momento, Tina asustada pero más tranquila, se mantiene quieta delante de aquellos profundos ojos, manteniendo la respiración. La bestia no se mueve de su sitio, se mantiene en posición de ataque pero no actúa. Tina avanza un paso hacia ella, dudando y con algo de miedo. Al hacer esto, le pega un alarido, sin embargo Tina no se asusta esta vez. Se queda quieta delante de ella, y cuando cree que está preparada coge aire y observa sus ojos. Un, dos, tres. Tina pega un salto hacia la bestia, para chocarse con esta, pero se dá de bruces contra el suelo. No puede creer lo que acaba de ocurrir, ha traspasado su cuerpo. Tina se mantiene tirada en el suelo y entonces empieza a pensar.

   No nos hace nada realmente. Acabo de atravesar su cuerpo, parece magia. Es imposible que bestias así existan. Entonces, ¿que cojones está pasando?. ¿Que nos están haciendo?. ¡Esta cosa no existe en realidad!. Dudo que sea de verdad, pero lo parece. ¡Y la araña!. No había ninguna araña en mi cuello, era una sensación extraña, como si estuvieran haciéndome cosquillas con los dedos. Pero... pero Arianna si veía la araña, sin embargo yo no lograba palparla.

    Arianna, mira extrañada a la bestia. No ha hecho absolutamente nada. Más tranquila, mira a Tina con desconfianza y después se acerca al animal que tiene delante. Camina hacia él, y justo cuando lo tiene delante intenta palparlo, pero no siente nada, no nota el pelo de aquella cosa. Está tocando el aire.

   ¡Joder!. Estamos flipando seguro. Esto no es real. Tiene que ser nuestro cerebro, ¿no?.

      Tina y Arianna se juntan, y se miran con caras raras.

     Entonces, ¿es real o no?. Arianna, ¿existe?. La sensación es muy verdadera. Tengo que comprobarlo. Me estoy volviendo loca. ¡Claro que existe!. Antes le he agarrado la mano. ¡Joder, esto es una mierda!.

    Tina, dudosa, acerca una mano hacia la mejilla de Arianna. La siente, la está tocando. Tiene los pómulos calientes, de correr. Nota el pulso de hasta su corazón, está asustada, puede notarselo. Arianna la mira asustada, y esta hace lo mismo. Después, como por un lapsus, Tina mira en todas direcciones, con miedo. Se acerca al primer árbol que tiene delante, está lleno de musgo, frondosa vegetación e increiblemente alto. Alarga la mano para palparlo, cuando lo hace el árbol desaparece por un momento con un leve brillo y después vuelve a aparecer, igual que antes, ella persiste que lo ve hasta con más vegetación.

    ¡Que sucede! ¿Que es lo que está pasando?. ¡Dios mio, que me saquen de esta puta isla ya!.

     Arinna, que ha visto lo mismo que Tina, empieza a chillar de nuevo como una loca, agarrándose la cabeza y dándose guantazos a ella misma. Se tira al suelo y empieza a golpearlo con puños y patadas como si fuera una niña chica. Tina se pone nerviosa también y comienza a respirar con dificultad, casi llorando. Se acerca corriendo a otro árbol, y en ese instante, casi sabiéndo lo que va a ocurrir le propina un puñetazo.

    - Ahhhhhhhhh. Mi puño, ¡joder!.

   Le ha dado con bastante fuerza, y se ha resguñado un poco. La madera del árbol estaba dura cuando lo ha golpeado. Ella hace muecas de dolor, y segundos después comienza a comerse la cabeza.

    Nos engañan como quieren. ¿Donde cojones estamos?. Esto es obra de ellos. ¡No puede estar ocurriendo de verdad!. La comida.... la comida alomejor. O sino.... ¡nos han tenido que drogar!. ¡Esto no es real!. No puede ser, que un árbol desaparezca al tocarlo y el otro no. Quiero volver a casa. Quiero volver a tener mi vida de antes cuando era una chica feliz, cuando no tenía miedo. Cuando no eran tiempo de miedos.

     Tina, llorando, se pone a gritar al igual que lo hacía Arianna hace un rato. Las lágrimas recorren su cansada cara con fuerza. Brotan de sus ojos más y más. Bañada en un mar de lágrimas, se acerca a Arianna y le dá un abrazo, esta le responde casi asustada por su compañera.

     Van a volvernos locas. Lo primero, quiero salir de aquí.

                     ~~~~~~

    - Creo que ya podemos parar el juego, ¿no creeís?

    - No. Primero preparemosles para la matanza. ¡Agarradlos por los huevos hasta que no puedan ni llorar!. No pueden averiguar nada más, suficiente sabe esa chica.

   - ¡Creo que es suficiente ya!. Yo también opino lo mismo. Ya hemos jugado más de la cuenta.

   - ¡Noooo!.- Dicen la mayoría al mismo tiempo.

   - ¡Silencio todos!. Recordad por lo que estamos haciendo esto. No es ningún juego. ¡Sacadlos de ahí!.- Dice una voz clara que calla a todo el mundo en la sala, una voz femenina y sexy, capaz de entrar en las entrañas del corazón de un hombre. Por su aspecto, es poderosa. Rubia, ojos azules y el pelo corto. Su mirada hizo callar hasta al jefe de ese mando. Es la nueva, instalada hace dos días. Viene pisando fuerte.

Tiempo de miedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora