capítulo 35

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CONNOR.

Estaba entrenando como los últimos días, había cazado y había dormido la noche anterior, cuando llegó Kris interrumpiendo como los últimos días.

—Connor, tienes que venir a casa ya mismo.

—¿Qué quieres Kris? Estoy ocupado.— respondí recuperando el aliento.

—Es sobre ella.

Esas fueron las palabras mágicas que tuvo que emplear para tenerme bajo su control.

—¿Está aquí?

—No, pero mandó a alguien, ven rápido.— salí corriendo tras ella.

Al llegar a la casa, había una cantidad considerable de personas dentro, rodeando a una chica con varias lesiones, algo delgada y muy maltratada.

Por su aroma pude deducir que se trataba de una vampiresa, su cabello rubio tenía algunas manchas de sangre, tenía los ojos negros y varios hematomas en el rostro, estaba sentada en el sofá, con una ropa harapienta y una posición  desconfiada, como esperando a que la atacaran. Alguno de la manada la miraban intentando deducir quien era, otros más le apuntaban con armas básicas y Alexander, bueno, Alexander y sus brujos estaban hablando sobre que clase de hechizos podrían usar para fortalecer sus aquelarres, al ver que nadie decía nada pero todos la juzgaban con la mirada intervine yo.

—¿Quien eres?— pregunté sin rodeo alguno, en vez de responder ella se quedó viéndome como hipnotizada

Le gustaste— me dijo Dave.

—Mi nombre es Lisa, Lisa Johnson en aquel entonces.— respondió cuando salió del trance.

—Dicen que tienes información sobre Kalesie.

—Así es, pero no creo que ella fuera tan importante como para tener a más de dos mil personas buscándola.— su comentario me desencajó la mandíbula.

—Tu comentario esta de sobra.— dije mordaz.

—Solo digo lo que pienso, no es para se ofendan.

—Como sea, al grano, ¿como sabes de Kalesie?— preguntó Kris viendo que lo que ella decía nos sacaría de las casillas a todos.

—Ella estaba en una celda contigua a la mía.

—¿Por qué no viniste entonces con ella?— preguntó Selena levantando la voz.

—Se lo pedí, básicamente le rogué que viniera conmigo, pero dijo que estaba muy herida y que sólo sería un peso muerto.

—Típico de ella— dijo Dave— ojalá dejara de preocuparse por los demás y se preocupara por ella una vez en la vida.  
+Lo sé.

—¿La viste? ¿Está bien? ¿Qué le han hecho?— pregunté.

—No la vi, pero se escuchaba débil y desde que había despertado Ian la había estado golpeando, escuché algunos latigazos y golpes secos.— dijo ella mirando sus manos.

—¿Sabes dónde está?

—Si, ella está en el castillo Forks.— un escalofrío recorrió mi cuerpo y vi como Liz se tensaba a mi lado, Samuel pasó un brazo por encima de ella para darle apoyo.

—¿Podrías llevarnos?—inquirió Kris tratando de disimular mi desesperación.

—Por supuesto, sería un placer— dijo ella mirándome como lo había hecho cuando le hablé momentos atrás.

—¿Cuándo podríamos salir?— le pregunté a Selena.

—No podemos partir ya mismo.— me respondió ella.

—¿Por qué no?—pregunté irritado.

—Connor, solo mírala, esta chica no ha comido ni dormido bien en mucho tiempo, dale un par de horas para que se reponga, tal vez un día o dos, después de eso, si ella está dispuesta a llevarnos, entonces iremos.

—Bien— dije no muy convencido.

Les di una última mirada a todos en la sala y salí, la ira me consumía, la desesperación me estaba acabando, no sabía qué hacer, pero tendría que aguantar un poco más, fui a correr y a entrenar para tratar de no pensar más en que mi mate podría estar muriendo en ese mismo instante, se que la chica estaba débil pero es que mi chica podría estar muriendo.

Decidí transformarme, no lo hacía hace mucho tiempo, extrañaba sentir la tierra contra mis patas, tener un tacto más sensible a la naturaleza, había extrañado ser aquel animal salvaje que era cuando conocí la primera reencarnación de Kalesie, Cassandra.
Cuando la vi, sus ojos grises y su cabello oscuro me cautivó, sentí mil cosas y las acepté en el instante, ella por otro lado estaba muy feliz con su vida de rebelde, ella peleo contra mi pensando que lo que sentía era un maleficio, en aquella pelea obviamente perdió, era tan solo una cachorra no tan inocente pero sí muy traviesa, cuando finalmente me dio una oportunidad, se dió cuenta que estaba más enamorada de lo que pensaba, cuando quiso presentarme como su mate su manada me rechazó al instante, sus padres me odiaron en cuanto me vieron por no hablar de sus amigas, esas brujas me detestaron desde que supieron de mi existencia, ser híbrido fue uno de los motivos por los que me odiaron, ¿el principal?  arruiné sus planes de casarse con el Alfa de la manada Blood Moon, eso fue lo que hizo que todo ser que la rodeaba me odiara, cuando tuvo la gran pelea con sus padres a causa de la boda cancelada vino a mi, un día llego a mi casa, con la cara empapada por las lágrimas y la respiración acelerada, se quedó en mi casa y finalmente me aceptó como su mate, nos casamos e invitamos a su familia, nadie fue, ella se sintió mal, pero luego lo olvido al ver a nuestros amigos de aventuras ahí, juntos, luego las cosas avanzaron rápidamente ella quedó embarazada así que para darle futuro a ese cachorro creamos Dark Moon, fuimos muy felices. Todas y cada una de las veces que la encontré fui feliz a su lado. Como amo a esa mujer, obstinada y terca, sarcástica e irónica, amo todo de ella y se que estará bien, confiaba en Kalesie Williams, la mujer más valiente que había existido alguna vez en el planeta.

Unas pisadas me sacaron de mis pensamientos, me percaté de que ya era tarde, el sol se estaba poniendo y yo seguía en mi forma lobuna, vi a Lisa parada frente a mi, rápidamente fui tras un árbol para volver a mi forma humana y vestirme, al salir ella estaba sentada en una roca, la roca en la que mi chica solía sentarse a pensar.

—¿Qué haces aquí?

—Salí a dar un paseo— respondió simplemente mirando el lago.

—¿Cómo te encuentras?— pregunté recostando mi espalda en un árbol.

—Estoy mejor, el baño y la comida me han sentado genial, gracias— dijo ella sonriendo.

—No hay de que, de todas formas no hice nada.— ella se levantó y se acercó a mí.

—Claro que sí— dijo con una sonrisa felina— si no hubieras llegado no se que me habría pasado ahí con todas esas bestias.

—No son bestias, abstente de hacer comentarios tan desagradables como ese.

—Tranquilo, no lo dije con mala intención.— dijo ella acercándose más a mi.

—No te acerques demasiado.

—¿Por qué? ¿Acaso ya estás pedido?— dijo descaradamente mientras se abalanzaba contra mí.

—¡He dicho que no te acerques! — dije tomando sus manos y alejándola de mí— y respondiendo a tu pregunta si, ya estoy pedido.— ella comenzó a disculparse y a llorar, no le creí nada.

Me aleje de ese lugar y fui directamente al despacho, busque un mapa y vi el castillo no estaba muy lejos, tomé un par de armas, me alimenté y entrada la medianoche salí camino al castillo.

Dejé una nota diciendo que iría por ella, no soportaba la idea de esperar un minuto más, no después de cómo se comportó Lisa.

Te rescataré mi amor— pensé.

Y con ese pensamiento me encamine a ese maldito lugar.

¿Creen que Lisa sea buena o mala? D:
#PorUnConnorEnNuestraVida.🖤

El Destino De Kalesie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora