—¿Samuel? ¿Eres tú?— preguntó Connor con los ojos aguados y la voz temblorosa.
—Soy yo— dijo este sonriendo.
—Pero tú habías… yo te vi morir.
—Realmente morí, pero alguien de allá aprecia a mamá— dijo él señalando la luna.
Cuando Samuel o Hércules como le conocía Lagertha, dijo “mamá” sentí como un familiar calor se expandía por mi cuerpo, mi impulso fue ir y abrazarlo con todas mis fuerzas, cuando lo abracé me dijo en el oído— dice que es temporal, que no te encariñes demasiado— yo solo asentí y volví a abrazarlo sintiendo como Connor se unía también a nosotros.
Cuando nos separamos Liz no le quitaba la mirada de encima.
—Realmente eres tú.
—El mismo de aquel entonces.— respondió él sonriendo como cuando Connor lo hacía, eran una copia exacta. Liz comenzó a llorar como una niña y se tiró a los brazos de Samuel, quien la recibió encantado
—Te extrañé mucho idiota— decía ella entre sollozos.
—También te extrañé— respondió él besando su coronilla.
—Me queda bastante claro que se conocen, pero ¿De qué?
—Cuando te conté la historia aquella vez creo haber mencionado a una pequeña bruja que salvó a Samuel aquella vez.— dijo Connor a mi lado.
—Si, me dijiste que seguía viva…. ¿Por qué no me dijiste que era ella?
—No lo creí adecuado.
—Ella fue mi protegida durante la guerra e incluso desde antes, a pesar de yo ser licántropo y que mi energía la molestara cuando entrenaba, me pedía que fuera con ella, que la acompañara, nunca le gusto estar sola.— me contaba él mientras los sollozos de Liz se apagaban poco a poco.
—Eran muy apegados entonces.— dije pasándole un brazo por la cadera a Connor.
—Era mi mejor amiga.
—Corrección, soy tu mejor amiga.
—Cierto.
Cuando se separaron Samuel dio una mirada general, se presentó con mi padre y con Kris, a Selena la saludo con un simple movimiento de la cabeza y ella hizo lo mismo.
—¿Se conocen? — preguntó Connor levantando una ceja.
—Tuvimos algo así como una relación ¿Verdad Sel?
—Si, algo tuvimos que ver, pero no se preocupen, fue antes de que conociera a su mate y que yo supiera que era hijo de Connor.
—¿Cómo que hijo de Connor?
—Pues, desde siempre se ha hablado de la clase de guerrero que es, era algo así como un héroe según decían mis padres. Cuando me enteré de quién era hijo y de que era Alfa había decidido dejar todo con Samuel, poco tiempo después encontró a su Luna y quedamos en buenos términos, fueron buenos tiempos.
Y así nos pasamos la tarde, hablando de hazañas pasadas que desconocía, Samuel quiso ver a Merlia y Dave, estuvieron fuera por poco tiempo pero el suficiente para ver a Simon hacer aparición, a Connor se le ponían los ojos rojos cuando salía Dave y a mí azules cuando salía Merlia, bueno, pues a Samuel se le ponían violeta cuando salía Simon, era una verdadera belleza.
Al día siguiente los heridos iban mejorando y los entrenamientos volviendo a la normalidad.
Samuel había tomado el puesto de Selena en los combates, todos se habían quedado de piedra cuando lo habían visto, incluso lo confundieron con Connor un par de veces, después de haber hecho los ejercicios matutinos cada quien fue a su especialidad, yo fui combate cuerpo a cuerpo donde extrañamente también estaban Connor y Samuel, Kris no se podía perder el gran evento y es que muchos dejaron sus ejercicios de lado solo para presenciarlo, se trataba de la pelea que tendría con mi mate, estaba casi segura de que perdería pero tenía que intentarlo de todas formas.
—No te contengas solo por que soy yo— dije entrando al Pentágono y apretando las vendas de mis manos.
—No pensaba hacerlo cielito.—dijo sonriendo.
Y así comenzó la pelea, fue más rápido que yo y me lanzó un derechazo que dio de lleno en mi mejilla, luego me dio una patada que hizo que me doblara de dolor, era muy fuerte y no estaba usando su potencial completo, un puño más impactó contra mi cara, los gritos a nuestro alrededor no cesaban, temía que se quedarán sordos de tanto ruido que hacían entre ellos.
—Kalesie Williams ¿Le estás dejando ganar?
+Claro que no, es fuerte.
—Si no te pones a pelear en serio, saldré de aquí y te dejare sin ver a Connor durante un mes, sabes que lo haré.
Esa fue la motivación que me faltaba, estaba en el suelo, doblada del dolor, él se acercó a mí un poco preocupado al ver que me había golpeado fuerte, yo no desaproveche oportunidad y le di una patada que lo tiró al suelo, me monte encima de él y comencé a darle puños, él giró y me inmovilizó con su peso, cuando logré mover mis piernas logré darle una patada que hizo que se alejara de mí, nos estabilizamos volvió a atacar, sus ojos estaban fijos en mí, sus labios estaban sangrando y en su rostro se estaba empezando a notar un golpe, una patada en la cara me devolvió a la realidad, logré mantenerme en pie y evadir su siguiente golpe.
+Merlia, sal ahora.
—Como digas.Se sorprendió mucho al ver uno de mis ojos azules, le di una patada que lo tiró al suelo de inmediato, cuando se levantó Dave estaba presente también.
—Envidioso— le dijimos por medio de la conexión.
El sonrió, se encogió de hombros y me lanzó una patada que pude esquivar sin embargo no el puño que le siguió, le di una patada en las costillas haciendo que se echará para un lado, luego le di otra en el rostro y otra en el pecho, cayó al suelo y me jalo uno de los pies, le lancé una patada siendo así, la victoriosa en la batalla con mi mate, la felicidad que sentí fue indescriptible.
El ruido y vitoreo de la multitud no cesaba, Connor se sentó en el suelo sangrando y con una sonrisa de orgullo que quien lo hubiera visto sin saber qué había pasado pensaría que él ganó, fui corriendo a ayudarle a ponerse de pie, estaba hecho polvo el pobre.
Me besó en la frente y me dijo— sabía que me ganarías.
—¿Me dejaste ganar acaso?
—Ni loco, me diste la paliza de mi vida.— dijo él soltando una carcajada, hizo una mueca de dolor y escupió algo de sangre en el suelo, con esa pelea dimos por terminado el día de entrenamiento, Selena, Kris, Samuel, Liz y los demás estaban en la casa manada ayudando a Connor a curarse.
Yo por mi parte había salido a dar un paseo, estaba pensando en como decirle a Connor que estaba embarazada, quería que fuera una sorpresa, quería ver la sonrisa que había visto el día en que le declaré la guerra a Emily, la misma que había visto cuando le gané a Selena, cuando vio a Samuel y por supuesto cuando le gané horas atrás, pero no se me ocurría nada, llegué al lago, mire al cielo sabiendo que ella estaría ahí echando de menos a mi hijo, a Samuel, internamente le agradecí por haberme permitido verlo, por darnos esperanza y por permitirme vivir.
Un ruido se escuchó por los arbustos, miré atrás de mí y ahí estaba, parado como si fuera el soberano de todo, mirándome con una sonrisa socarrona, cuando menos pensé estaba rodeada de vampiros, me tomaron de las manos inmovilizandome, él me golpeó, me dejó sin aire, me dio un puño en el pómulo que me dolió hasta el alma, finalmente cuando habían jugado lo suficiente conmigo, me pusieron un pañuelo con cloroformo en la nariz, antes de caer inconsciente vi a Emily apareciendo tras quien me había golpeado tanto, Ian.
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El Destino De Kalesie
Hombres Lobo¿Te imaginas vivir más de 2 vidas y morir por más de 500 años? ¿Imaginas haber perdido a tu único hijo, a manos de una guerra en la que ni tú, ni los tuyos tenían qué ver? ¿Puedes imaginar que tu único amor te vea morir una y otra vez sin saber cómo...