Anya
Miro a rededor y en cada lugar en el pongo mi mirada; solo veo lo mismo.
Mujeres en lencería notablemente costosa.
Al parecer Josephine y yo somos las únicas mujeres presentes que están con algo que no sea de encaje, miro a Aleksei que está paseando su mirada por el local mientras caminamos hacia una escalera.
-Ya sabes como son las cosas; cielo, no me importa lo que consuman mis clientes pero mis chicas deben estar limpias; no me sirven putas drogadictas en este lugar; no toleraré la violencia, y si quieren algo más; consúltenlo conmigo primero; ya sabes cómo llamarme- dice mientras subimos y una vez estamos arriba va hacia la la izquierda y desliza la puerta corrediza para dejarnos entrar.-mis chicas los atenderán bien- asegura antes de irse.
Aleksei camina frente a mi y entra primero y yo lo sigo muy de cerca.
Antes de fijarme el la tercera persona presente, veo la elegante habitación; dos sofás negros; uno frente al otro, junto a un par de botones en la mesa que supongo son para llamar a las chicas en lencería que se supone son meseras.
Elevó mi mirada y me sorprendo al encontrar a una mujer frente a ambos, con el pelo corto hasta debajo de las orejas de un color negro, una cicatriz a lo largo de su mejilla de un tono rosado; dirijo mi mirada hacia sus ojos de colores diferentes antes de que esta caiga en su nariz; con el mismo bulto que tuve yo hasta que Dom la rompió y me opere para que quedara como nueva.
-Eres una mujer- digo confundida y miro a Aleksei.-es una mujer.
-En teoría- replica Aleksei con una media sonrisa antes de mirar a la mujer.
-Cuidado; amor- advierte la mujer.-si dices las cosas así podrías lastimar los sentimientos de los demás, y si lastimas los míos; podría incluso remover los hombres que cuidan de tu hermano.
Havel?
-Sabe cómo está mi hermano? Lo ha visto? Por favor, dígame cómo está!- casi ruego y mi desesperación es más que evidente.
Una sonrisa se abre pasó en el rostro de la mujer antes de que esta mire a Aleksei.
-Deberías tener cuidado con tu mujer; Alek. Quién sabe lo que pasaría si se descubre que el lobo tiene por mujer nada más que una oveja?
-Aun está aprendiendo- indica Aleksei en tono tenso antes de mirarme.-necesito un favor.
-Y yo necesito saber algo; supongo que nuestro trato de sinceridad sigue en pie, no?
Me siento lentamente y veo como una sonrisa socarrona se abre paso en los labios de Aleksei.
-Por supuesto; pero primero déjame presentarlas- indica antes de mirarme.-Anya, ella es Bertha; una amiga de La Hermandad; Bertha; mi mujer, Anya.
-Un placer, cielo- sonríe la mujer antes de extender su manos hacia mi; yo la estrecho antes de sentarme junto a Aleksei.
Bertha presiona el botón qué hay en la mesa y se inmediato una mujer en lencería aparece: toda sonrisas y con el maquillaje perfecto.
-Porque tuvimos que venir a este lugar?- le preguntó a Aleksei.
-Hay a quienes nos gusta- indica Bertha sonriendo.-tráeme una mimosa; quieres; linda?
Me doy cuenta de dos cosas;
La mano de Bertha recorre el muslo interno de la chica.
La cicatriz de su mejilla sobresale cuando sonríe.
ESTÁS LEYENDO
Con Un Mafioso?
Teen FictionSexo. Dinero. Drogas. Poder. Esas palabras definitivamente eran las más acertadas para definir su mundo. Un mundo del que él era dueño. Un mundo en él que entre por accidente. Uno al que no pertenezco. Pero del que ahora era inevitablemente par...