Capítulo 14 "Ella...me gustaba"

539 52 5
                                    

Dedicación: DhamarBelenAlcantara

Llevo cuatro días evitando a cualquier persona, en especial al pelirrojo, no lo quería cerca de mi, me asusta, me asusta pensar en él, en lo que me dijo. Sam esta equivocado, no es tiempo de una relación y tampoco de una amistad, no le daré una oportunidad, es decir ¿A que se refirió con "Tengo la necesidad de estar cerca de ti"?, me aterraba sus intenciones, Joe...el maldito se veía tan inocente y tierno, protector, tal vez soy alguien paranoica pero deben comprenderme, fui traicionada por alguien que creí incapaz de lastimarme, ya no confió ni en mi sombra, menos en un pelirrojo tan sospechosamente tierno como ese.

—Bebé, ¿Estás ahí?—preguntó Casey pasando su mano por enfrenté de mis obscuros ojos, no solo por el maquillaje, sino también porque son marrones obscuros.

—¿Qué?—pregunté mirándolo.

—La clase término, cielo—me informó, el aula ya estaba vacía, los bancos estaban sin acomodar y unas cuantas bolitas de papel yacían en el suelo.

—¿Cuándo?—cuestioné incrédula, no podía creer que me enterrará en mis pensamientos y no me diera cuenta de que la clase haya terminado.

—Unos diez o doce minutos—respondió tomando su mochila.

Me levanté y tome la mía, pero no pude dar más de un paso antes de sentir como los fuertes brazos de Nicholas Casey me ponían contra la pared del aula.

—¿Qué tiene el idiota de Riggs contigo?—cuestionó acorralando mi cuerpo contra la pared, poniendo ambos brazos a mis lados, tragué saliva, asustada—¿Por qué te hizo esto?—movió a un lado mi cabello descubriendo la cortada y la nueva herida que tenía que se encontraba en mi frente, la cual casi terminaba de cicatrizar.

—Eso no te importa—hablé sería, pero estaba muy asustada.

Me agaché para salir de su atrapé por debajo de su brazo, pero me tomó de la muñeca.

—¡Suéltame!—grité "molesta" pero solo trataba de ocultar lo asustada que estaba.

Traté de soltarle un golpe pero no sirvió, como siempre mi mano fue interceptada por la suya sin si quiera estar cerca de su rostro. Maldita sea su fuerza y los reflejos que tiene.

Me jalé intentando soltar el agarre de mi muñeca pero al jalarme mis suelas resbalaban, incluso me tomé de el escritorio para intentar irme, Casey no hacía gesto de que estuviera haciendo esfuerzo por sostenerme, tomaba mi pequeño brazo y ni siquiera se inmutaba al saber que me jalaba.

—Cuéntame.

—¡Suéltame!—grité de nuevo.

En un jale, en un solo movimiento ya estaba pegada contra su abdomen, me miraba para abajo y sostenía ambos brazos ahora.

—No hablemos de fuerza, mi vida—se burló.

—Mejor hablemos de inteligencia, imbécil—golpeé su entrepierna con mi rodilla.

Él me soltó y se dobló soltando un quejido mientras tomaba sus genitales.

Yo aproveché para salir corriendo, volteé hacía atrás asegurándome de que no viniera detrás de mi, afortunadamente no.

Comencé a alentarme, luego choque con alguien.

—Lo siento—me disculpé.

—Ten más cuidado, estúpida—respondió la persona.

Levanté la mirada para encontrarme con él idiota de Collin enfrente de mi, su ojo aún estaba lastimado, a pesar de que Casey lo había golpeado hace unos días, tal vez lo golpeó de nuevo, no quería problemas así que solo rodeé los ojos y seguí caminando hasta mi mesa en la cafetería.

Tu Me Cambiaste La Vida (Chandler Riggs) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora