Adaptación

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Ha pasado un tiempo desde la última vez que vi a Mr. Darcy, mi gato, había pasado tanto tiempo con Casper que lo dejé a un lado, debió sentirse olvidado y lo comprendo. Apareció una mañana sin avisar, nosotros estábamos acostados en mi cama cuándo Mr. Darcy entró por la puerta y se acostó en medio de nosotros.

  — Parece que él también puede verte.

 — ¿No es eso extraño? Debe ser por el sexto sentido que tienen los gatos.

  — Es que él es un gato especial.

Nos reímos un poco, fue extraordinario ver cómo Mr. Darcy reaccionaba cuando Casper lo acariciaba, yo podía ver cómo su pelo se movía cuando él ponía su mano encima de su pelaje; si nadie podía ver esto, me imaginaba cómo se debería ver el pelo del gato moverse sin nada encima. Era extraño pensar en cosas así, pero nos entretenía a ambos. 

Los días fueron pasando y el tiempo juntos se volvía cada vez más valioso, éramos como dos cerezas en el tope de un pastel, complementábamos perfectamente. No me sentía sola cuando estaba junto a él, el cambio debía empezar conmigo sin ayuda de nadie, pero era un buen comienzo; su compañía me daba ganas de sonreír aunque sea un poco, de vez en cuando me atrevía a decirle algunos chistes malos, él prefería reírse de mí que de mis chistes.

Las noches con lluvia eran mis favoritas porque podía hablarle toda la noche sin temor a ser escuchada por mis tíos. Usualmente, nos acostábamos frente al otro y nos mirábamos por un largo tiempo.

  — Quisiera permanecer todo el tiempo de esta manera. — Expresó mientras acariciaba mi cabello.

  — Podremos estar de esta manera sin escondernos cuándo podamos saber quién eres.

  — Ya te dije que no soy humano.

 — Y ya te dije que yo no creo eso. He notado que no has regresado al bosque donde nos conocimos, siempre estás esperando en mi habitación.

  — Tengo miedo de volver...Y no regresar.

 No quiso hablar, pero creo que podía entender a qué le tenía miedo. Sin querer, los dos habíamos desarrollado una conexión tan grande que no podía imaginar un día sin hablar con él, al ser ese el lugar donde despertó por primera vez, temía que al estar de nuevo allí podría, de manera inexplicable, desaparecer.

  — ¿Y si vamos juntos?

Le planteé la idea de ir con él porque podría ser que en ese lugar pudiéramos encontrar alguna pista sobre su origen, pero él negó rotundamente; creía que si permanecía mucho tiempo en ese lugar podría convertirme en lo mismo que él o podría ser propensa a tener un accidente, como la vez que me caí por una colina y terminé en ese bosque junto a él. Después de ese accidente, él tiene la fuerte creencia que está muerto y si yo voy a ese lugar, puede ser que yo esté cerca de estarlo.

 La forma en que se preocupaba por mí era confortante, pero a la vez no podía sentirme agradecida porque ayudarlo a descubrir quién es era mi mayor motivación y me sentía dispuesta a hacer cualquier cosa con tal de saber la verdad, lo único que me asustaba era perderlo después de descubrirlo.

UNA SEMANA DESPUÉS...

El año está finalizando, en el pueblo se están llevando a cabo muchas festividades. Mientras todos mis compañeros están buscando pareja para el baile y hablando sobre lo que harán cuándo se gradúen, yo estudio día y noche para sacar una nota decente en mis exámenes finales. Casper ha intentado ayudarme, en algunos momentos termina siendo una distracción más que una ayuda; estar a mi lado mientras estudio le ha servido para leer cosas que suceden en el mundo, descubrí que debe ser de algún país cercano porque entiende mi idioma, pudo leer y entender sin ningún problema, a veces parecía no comprender algunas cosas. Creo que en su otra vida usaba lentes porque se acercaba a la página para poder ver bien las letras, me dio mucha curiosidad saber cómo luciría.

DEAD IN LOVEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora