capítulo 36

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Cuando despierto reconozco el aroma del puerto y a ¿naranja?, abro los ojos y el no esta. Me incorporo cubriendo mi desnudez con la fina cobija y miro a cada lado en busca de Jackson pero en vez de eso me encuentro con un zumo de naranja a mi lado sobre la mesita de noche.
Eso explica el olor de la fruta.
Tomo un sorbo y lo vuelvo a colocar en la mesa. Esta amaneciendo y el espacio que debe estar ocupado por un hombre glorioso junto a mi, esta totalmente vacío y tan frío lo cual me dice que ya a tiene mucho tiempo que salio de la cama hacia quien sabe donde. Espero y este en la sala de estar, la cocina o al menos en alguna parte del todo edificio.
– Que Dios me ayude– susurro apoyando la cabeza sobre las rodillas y abrazando a la misma con mis brazos.
Pasaron una gran cantidad de minutos, así lo sentí, la luz empezó a filtrarse por las cortinas. La mañana iluminando una cama revuelta y deshecha. Por algún motivo me sentí estúpida.
Decido salir de la cama envolvida entre las sabanas para encaminarme hacia el baño. Me enjabono rápidamente el cuerpo ya estando en la ducha. Quiero saberlo. Quiero saber si Jack esta en el edificio... no creo que se fuera después de la noche que tuvimos juntos. Algo quema mi pecho haciendo arden todo mi ser.
Salgo al dormitorio con una toalla alrededor de mi cuerpo. Sacó de la bolsa un conjunto de ropa que Liam compro la noche de ayer que consiste en una blusa holgada negra, jeans gris, una chaqueta negra, bufanda de lana gris y un par de tones negros de tacón.
Miro un poco insegura la combinación.
¡¡Okay!! ¿Quien eligió este atuendo? Esta lindo y todo pero es una paleta de gris y negro.
Me encojo de hombros dándole poca importancia.

Me dirijo primero hacia la cocina en busca de una persona en este lugar, se siente solo. ¿Me habrán dejado sola?... no, no; corrimos peligro ayer.
No me pueden dejar sola. Pero me siento mas tranquila cuando veo a Damian apoyado en la encimera mirando por la ventana con aire pensativo y un tanto tenso.

–Buen día, Damy– saludo alegremente. Alegre por verle– ¿Que haces tan solo?

Niega con la cabeza.

¿Andará algo mal?

–Volvemos a la mansión –¿y que hay de malo en ello? Su rostro dice por si solo que algo va mal y no me dicen... espera

–¿Jackson donde esta?– miro alrededor –Desperte y no se encontraba en la habitación. ¿Esta en la sala de estar?

Hago un giro rápido y voy a pasos apresurados hacia el lugar contiguo de la cocina sin esperar respuesta.

El no esta. Se marcho... no puedo creer que se a escabullido de mi.

–Lia–me llama Damian y yo miro sobre mi hombro como se acerca hasta situarse a mi lado –Le salio una emergencia y se tuvo que ir.

–Pues, vamos a la mansión ya. ¿Donde esta mi hermano?

–Esta en el coche con Arriana esperando por nosotros –susurra y pasan segundos que se vuelven una eternidad hasta que vuelve hablar –El Sro. Haynes fue a Europa esta madrugada por una emergencia que salio en el ultimo momento.

–Dios me ayude–repito al cabo de un tiempo la frase que dije al despertar en la habitación.

¿Emergencia? ¿Porque no se despidió? O ¿Porque no me pidió ir con el? Después de lo que sucedió anoche yo... soy toda suya, su mate y su mujer. ¿Porque?

Pregunto y busco una razón a una pregunta que no tiene un tema o un punto de porque me hago esa pregunta.

Damian pone su mano en mi hombro y doy un respingo.

–No– digo, negando con la cabeza– ¿Porque no me has despertado?

Trato de ahogar el nudo que se formo en mi garganta. Cubro mi rostro con las manos y lloro.

Me dejo aquí. Lo necesito conmigo, estamos más unido que antes y el se va así sin mas.

Damian me envuelve en sus brazos– No llores, por favor– murmura.

Solo quiero acurrucarme y abstraerme de todo. Parpadeo intentando controlar las lágrimas y le miro a los ojos angustiados, me enjuga las lágrimas tiernamente con el pulgar. Inspiro hondo, todavía sin creer que se fuera sin mi.

–Regresara pronto– me asegura– como consuelo te llevare en mi espalda hasta el coche.

Finjo estar pensando la propuesta. Sonrio pero soy consiente de que la sonrisa no llega hasta mis ojos.

Tal y como lo prometio desde que cerro la puerta me llevo en su espalda hasta el R8 pero esta vez tenia el techo cubriendo el móvil.

Muy lindo el descapotable.

Dentro se encontraban unos muy cubiertos Liam y Arriana que se hallaban con guantes, lentes de sol y ropa muy abrigadora.

Frunzo el ceño.

– Es por el sol–explica Arrían cuando la puerta del copiloto para poder tener acceso al los puesto de atrás del audi. Subo yo primero y luego mi protector.

–Debes regresar por las cosas que hemos dejado– murmuro dirigiendome a mi hermano.

Se suben los vidrios de las dos puertas que tiene el coche dejando totalmente oscuro dentro de este, salvo por los aparatos de GPS, reproductor de musica, indicador de velocidad, etc.

–Ya lo hice mientras estabas con Damian en la cocina.– frunzo el entrecejo.
–Eres muy distraída y ahora soy rápido– explica con aire tranquilos.

Arranca el motor del R8 con un rugido y sale del hotel. Nadie dice nada. Sera que sabran que me entregue a Jackson. Por Dios que incomodo es todo esto. Opto por observa por la ventana como dejamos atrás la ciudad.

En el transcurso del viaje Liam se quita los lentes y los cuelga en el cuello de su camisa en cambio de su pareja que los coloca sobre su cabeza, es el único movimiento que han echo durante el viaje. Parecen estatuas de marfil, total y absolutamente inmóvil y yo sigo mirando por la ventana.

Estoy en la habitación del hotel mirando por el gran ventanal y Jackson esta de pie a mi lado, sonriendome con amor y con ternura. Le doy un Asto beso en los labios y sigo observando el puerto y la bahía a lo lejos, pero cuando vuelvo la mirada hacia Jack... no esta. Estoy de pie sola frente a la gris habitación que ya perdió su alegre azul y ya no hay adorno, ni cuadro... ni nada. ¡No! Cierro los ojos con fuerza y los vuelvo abrir. Giro la cabeza para volver a ver esos grizulado que me alegran el día, pero ahora sus ojos se ven triste. Se sitúa frente a mi y besa mi frente. Despues se vuelve sin pronunciar palabra y se aleja. Sus pasos suenan en la habitación como ecos aturdidores y llenan de dolor mi corazón. ¡No, no debo dejarlo ir! Corro y corro tras de el pero sin importar el esfuerzo que hago para detenerlo parece que retrocedo hasta que el cruza la puerta y ya no esta esta.

–¡No!– grito a todo pulmon–Jackson, yo...

–¡Lia! ¡Lia!– el tono de el es urgente arrastrándome hasta la superficie– Estoy aquí, pequeña.

Despierto del todo y el esta sacudiendo mis hombros con el rostro lleno de angustia y los ojos como platos.

–Jackson– mi voz es solo un susurro entrecortado...

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Hola hola lectores. Esperó y les guste :)
Nuevamente me disculpo por la tardazan, no me maten :( por favor.
Saludos y besos a todos.
Que lo disfruten, vuelvo a subir el sábado

Mas halla del Bosque: oculto en las sombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora