Capítulo 13: No Te Voy a Juzgar

347 17 2
                                    

Cantamos varias canciones al azar hasta que me dijo que parase el coche, claro, el camino se había acabado. Estábamos en medio de la nada, era preocupante. No se oía ni se veía nada que diera signos de humanidad. El paisaje era hermoso. Se veían metros de campo amarillento por la hierba seca y al fondo árboles que formaban un pequeño bosque. Miré mi móvil, ni una línea de cobertura.

-Parece que me has secuestrado - bromeé.

-No lo parece - se acercó hasta ponerse frente a mí - esto es un secuestro - sonrió torciendo los labios a un lado. Era un gesto travieso que me estaba enloqueciendo.

-Mi hermano sabe que estoy contigo. Si desaparezco te culparán - le seguí el rollo.

-No muerdas tu labio - tiró de mi barbilla haciéndome soltar el labio inferior.

-¿Por qué? - le provoqué volviendo a morderlo, esta vez apropósito.

-Porque puedo hacer algo en contra de ir despacio en nuestra relación - relajé mi boca - eso está mejor - torció su sonrisa.

Le miré de forma acusadora como una niña enfadada. Echó su cabeza hacia atrás y soltó una carcajada que resonó por todo el prado. Se dio la vuelta y empezó a caminar hacia los árboles. Corrí tras él.

-No me dejes sola - me quejé.

-Lo siento - seguía teniendo el punto de humor en la disculpa.

-Y no te rías de mí - le miré mal.

-No es de ti, son las caras que pones.

-¿Hago caras raras? - me extrañé.

-Muchas - sonrió de manera natural - son divertidas, no te enfades - pasó su brazo por encima de mis hombros acercándome a él.

No me importó. No era un gesto excesivo de intimidad y se sentía agradable. No tenía idea de que tenía la capacidad de hacer reír a nadie con mis expresiones faciales. Nadie me lo había dicho antes. Posiblemente porque siempre había estado en relaciones que implicaban más seriedad ... solo Ally me había visto hacer el tonto realmente, y fue en contadas ocasiones. ¿De verdad no me había relajado nunca tanto con nadie?

Entramos en el bosque y caminamos esquivando ramas y piedras en el suelo.

-¿Qué pasa? - agachó su vista para encontrar la mía mientras caminábamos.

-Acabo de descubrir que tengo una faceta divertida.

-¿Conmigo? - sonrió. "Creído" pensé. Mi cara debió mostrar lo que pensaba - la noche en que te conocí pensé que eras una chica muy seria, la verdad.

-No veas, una amargada - ironicé.

-No, mas bien una chica inaccesible, muy sexy - agregó maliciosamente.

-¡Zayn! - le empujé del costado en protesta poniéndome roja.

-¿Qué? ¿Creía que lo sabías? - se rió. Negué con la cabeza, un gesto que quería decir, "¿por qué a mí? - ¿o no te gusta que te lo diga?

Eso era estúpido, yo me sentía estúpida. Miles de veces había ligado, era frecuente recibir piropos. Sabía que era atractiva, pero por algún extraño motivo empezaba a sentirme tímida e insegura. ¿Por qué con Zayn era distinto? ¿O fue por la pérdida de Justin? "____ concéntrate en Zayn" me recuerda mi subconsciente.

-Puedes ser sincera conmigo ____. Sea lo que sea, no te voy a juzgar.

Y otra vez las palabras perfectas y lo que necesitaba oír.

-Creo que necesito ... más tiempo.

-¿Para qué?

"Eso, nena. ¿Por qué retrasas lo inevitable?" Ruge la diablesa interna recién despertada de una larga siesta. Sentí que me sudaban las manos. "Esto es ridículo. No me tengo que poner nerviosa".

Behind My Steps (Justin Bieber y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora