Guía para cuidar a tu Osito Polar ↪ ChanBaek

11. Pueden enamorarse

Se mantuvo apoyado en su auto mientras esperaba a que Baekhyun saliera de sus clases. Había tenido tiempo de dirigirse hacia allí luego de terminar con el papeleo que se encontraba sobre su mesa aquella mañana y le hacia demasiada ilusión ir por el más pequeño, aun mas, después de lo de la otra noche. El osito se había acurrucado contra él mientras tenían una maratón de películas y este se llenaba la boquita de chocolate blanco y la ropa de migajas de galletas. No podría verse más adorable.

Sin embargo, un toque en su brazo lo sacó de su nube de pensamiento y una sonrisa lo recibió al poder enfocarse en la persona junto a él.

—¿No pensabas saludarme, Park?

—Lo siento, Jennie, estaba algo distraído. ¿Qué haces por aquí?

—Ya sabes, vine a buscar a mi sobrino, mi hermana está ocupada por lo cual decidí venir yo. — la chica acomodó su cabello detrás de su oreja antes de continuar hablando con la vista fija en Chanyeol. — Y de paso quería preguntarte si te gustaría venir al cine conmigo esta noche o solo tener una cena, no lo sé, salir en una cita para conocernos mejor.

La propuesta quizás no llamaba mucho su atención, tan solo tenía ganas de lanzarse a su cama y dormir el resto del día, pero aquella era una chica bastante bonita para lo que normalmente solía tener cerca y se veía bastante interesada en mantener contacto con él.

—Está bien, me agrada la idea del cine, pásame tu dirección e iré por ti, ¿te parece?

La chica sonrió con satisfacción, depositando un rápido beso en la mejilla del chico antes de alejarse para ir en busca de Jongin.

Las puertas del colegio se abrieron y un pequeño Baekhyun se acercó corriendo a él, saltando a los brazos del más alto antes de casi gritar junto a su oído.

—¡Saqué un 10 en arte, Channie! La profesora adoró el dibujo que hice de ti y me dijo que lo pondría para exponer en el próximo acto del colegio, está encantada.

El mayor no tardó en felicitarlo, revolviendo el cabello de este y subiendo al auto mientras se dirigían a una heladería para premiarlo por su logro.

—¿Hiciste un dibujo mío y nunca me dijiste?

Las mejillas del hibrido automáticamente se colorearon de un leve rosado antes de asentir, jugando con sus dedos sin atreverse a mirarlo.

—Si, nos pidieron que dibujáramos algo a lo que quisiéramos mucho y estaba entre el chocolate o tú, pero a ti te quiero más.

El corazón de Chanyeol se infló de alegría, disfrutando de aquella salida con su oso más que a nada antes de tener que volver a casa. Al observar su reloj se percató de lo tarde que era y llamó inmediatamente a su amigo para viniera a cuidar de su hibrido mientras estaba fuera.

—Soy un hombre ocupado, Chanyeol, deberías pagarme por ser tan buen amigo. —Dijo Jongdae mientras entraba con su hibrido de hámster en el lugar. — Oh, mira qué cosa adorable, si lo pongo junto a Minseok podía ser un perfecto Boku no pico.

Chanyeol golpeó el brazo de este antes de acercarse a Baekhyun, agachándose a la altura de su niño y acomodó el cabello de este.

—Vendré lo más pronto que pueda para arroparte, solo serán un par de horas. ¿sí?

—Tienes una cita, ya lo sé. —mencionó con algo de amargura en su voz. — ¿Es con la Jennie esa, ¿verdad?

Chanyeol se mordió el labio inferior, asintiendo antes de despedirse de todos los allí presentes, subiendo a su auto de camino a su cita.

—¿Estas celoso de Chanyeol, ¿verdad? —preguntó Jongdae mientras preparaba la cena y guardaba el helado que había comprado en el freezer. — Y no intentes mentirme, tienes la misma mirada que Minseok cuando aún no se me confesaba. Si fuera tu no estaría tan perdido por ese idiota, Chanyeol es demasiado estúpido a mi parecer. Sigue sin estar de acuerdo en que Minseok y yo mantengamos una relación, no lo aprueba, dice que no es natural.

—Para mí si es algo natural, no creo que deba importar que seamos sino el amor que hay entre dos personas.

—Tu dueño no piensa lo mismo, Baek, deberías dejarlo ir, quizás algún día se dé cuenta de lo imbécil que fue por no haberte visto, aunque quizá sea muy tarde. Piensas con mucho cariño de él, no lo merece.

*

Chanyeol tomó la cintura de la chica mientras se dirigían al interior de la sala de cine, dispuestos a ver una película de acción que, aunque no era de su gusto era lo más cercano para ver en aquella hora. Su mente se mantenía algo dispersa, enviando mensajes a Jongdae para asegurarse de que todo iba bien con Baekhyun.

—Ya está por empezar, deberías apagar el teléfono, Channie.

Aquel apodo sonó tan diferente en la boca de la chica a lo que era en la de su osito que inmediatamente recordó a su hibrido de orejitas peludas al llamarlo así.

La película transcurrió en paz y sus manos ya se encontraban entrelazadas a mitad de esta. A pesar de ser bastante aburrida, una pequeña charla con voz baja los mantuvo distraídos y un repentino beso comenzado por la chica cerró la cita de ambos antes de llevarla a su casa.

Una parte de él estaba encantada con el hecho de haber besado a alguien como Jennie, pero la otra solo quería llegar a casa y cumplir la promesa que le hizo a su osito. Al abrir la puerta Jongdae lo recibió con una mueca apenada.

—No pude lograr que se fuera a su cama y se quedó dormido en sofá.

—Descuida, yo lo llevo, gracias por cuidar de él, Dae.

Un pequeño bulto acurrucado en el sillón lo recibió. Baekhyun dormía tranquilamente con el ceño levemente fruncido entre sueños. Lo tomó en sus brazos, llevándolo a su cama no sin antes dejar un beso en su frente.

—Buenas noches, mi dulce osito.