"CAPITULO 8"

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Llega una pareaja de patinaje. Entonces Ambar se despegó de Simón al igual que el de ella. Ambar al ver quien era se dió cuenta que era... Ximena. Ximena estaba enojada, seguro era porque Ámbar patinaría con Simón. Pero eso ya no le importaba a Ámbar. A lado de Ximena estaba con ¿Diego?. Diego era del salón de Ámbar y Simón... Un chico alto, piel blanca, ojos color verdes y el pelo castaño.Pero igual se sorprendió de verlos como pareja de patinaje ya que al parecer ellos dos se llevaban mal. A Ámbar no le caía mal pero tampoco se hablaban, a Diego le gustaba Ámbar desde que entraron a la preparatoria pero nunca fueron nada.

-Ámbar. ¡Que sorpresa verte aqui!.- dijo Ximena con un tono muy falso.

-Hola Ximena. Si que sorpresa ¿No?. Veo que ya tienes pareja... Hola Diego.- dijo Ámbar con una sonrisa no tan linda.

-Hola Ambar.- contestó él chico sonriendo.

-Si ya tengo... Siempre consigo todo lo que quiero.- dijo Ximena con una sonrisa amenazante.

-Ahh, si... Claro, consigues todo lo que quieras ¿No?. Yo que sepa Simón va a patinar conmigo a no ser que ya lo hayas convencido.- dijo Ámbar con una sonrisa falsa.

Ximena solo rodó los ojos y miro a Ámbar con unos ojos de pistola.

-¿Que?. Ximena no me dijo nada, yo no sabia.- dijo Simón siguiendo él juego de Ámbar.

-Ashh, olvidenlo, bueno, si nos permiten vamos a ensayar y no queremos que se sientan mal porque no pueden hacer lo mismo que nosotros así que si quieren se pueden ir.- dijo Ximena sonriendo triunfante.

-Jajaja, por favor, ya quisieras ser igual que nosotros pero pues lastima que en la vida no todo se puede. ¿Tienes miedo de que les copiemos los pasos?... O ¿No quieres hacer él ridículo enfrente de nosotros?.- dijo Ámbar riendo a carcajadas.

Diego y Simón solo se quedaron viendo a Ámbar sin nada que decir ante él comentario. Mientras que Ximena estaba furiosa, así que no tenia nada mas que decir... Se había quedado sin palabras.

-Ámbar, hay que dejarlos ensayar.- le dijo Simón en silencio.

-Bien, ok.- dijo Ámbar enojada.

-No, espera Ámbar, no te vayas, tengo una sorpresa para ti.- dijo Ximena sonriendo.

-Bien, que es lo que me tienes que enseñar Ximena.- dijo Ámbar sin importancia.

Ximena se dirigió a él centro de la pista junto con Diego y empezaron a hacer unos pasos, eran de los pasos mas dificiles y Ámbar tenia que admitir que les salían bien, estaba realmente sorprendida. La verdad era que si patinaba muy bien, casi como un profesional.

-Bueno, esto es solo un adelanto de la competencia. Solo no quería que te fueras sin ver como es que se hace.- dijo Ximena alzando una ceja.

-Si, jajaja... Gracias por enseñarme que es lo que no se tiene que hacer.- dijo Ámbar sonriendo amablemente.

Ximena solo rodo los ojos enojada.

-Bueno, ok, seré una buena persona y nos iremos. Así podras estar mas tranquila y no preocuparte de hacer una pavada frente a nosotros. No te preocupes.- dijo Ámbar a Ximena sonriendo fríamente.

- Jajaja, no seas patética.- fijo Ximena riendo con sarcasmo.

En eso llegó Nico a la pista y le dijo a Ámbar y Simón que ya era él tiempo de ensayar la siguiente pareja y en cuanto terminaran ellos ya podían regresar.

-Esta bien Nico, gracias.-dijo Simón y le dijo a Ámbar que salieran.

-Ok, ya voy.- dijo Ámbar apurada.

Los dos salieron de la pista y Ámbar se dirigió a cambiarse y ponerse sus zapatos.

-Bueno,adios Simón.-dijo Ámbar agarrando su mochila para salir.

-¿Qué, ya te vas?.- preguntó Simón extrañado.

-Si, pues la verdad Ximena y su pareja van a tardar mucho en ensayar y pues no los voy a esperar todo ese tiempo.- contestó Ámbar.

-Bueno, si, entonces yo también ya me voy porque ya no vamos a ensayar.-dijo Simón agarrando sus cosas.

-Bueno, entonces adiós.- dijo Ámbar despidiendose de Simón.

-¡Ámbar! ¡Espera!. ¿Alguien viene por ti?.- preguntó Simón sonriendo.

-Ehh, no. Hoy yo me voy sola.- dijo Ámbar sonriendo nerviosa.

-Ahh, pues te acompaño Ambar, vivimos súper cerca.-contestó Simón

-Mm, bueno, gracias Simón.- dijo Ámbar sonriendo y los dos se dirigieron a la salida.
Los dos se fueron caminando y mientras iban platicando sobre muchas cosas.

-Jajaja. ¿Simón, como es posible que nunca haz tenido novia?, enserio me sorprende mucho.-dijo Ámbar riendo.

-Jajaja, pues ¿Por qué te sorprende?.- preguntó Simón.

-Porque no te ves como un nerd y eres muy buena onda.- dijo Ámbar sinceramente.

-Bueno, gracias... Pero no he tenido novia porque no he encontrado a alguien especial, pero hay veces que las personas especiales son las que menos esperas.- dijo Simón sonriendole a Ámbar y viéndola fijamente a los ojos.

-Ahh, emm... Si, tienes razón.- dijo Ámbar nerviosa mirando a Simón.

Los dos estaban parados platicando pero había un silencio incomodo. Habia mucho viento y él cabello de Ámbar se alborotaba. Simón le acaricio su cabeza y le acomodo su cabello.Al hacer eso Ámbar se puso muy nerviosa y Simón lo notó.

-¿Te pasa algo Ámbar?.- preguntó Simón sonriendo.

-¿Qué?. ¿A mi?. No, nada.- contestó Ámbar nerviosa.

-Ok Ámbar, si tu lo dices.- dijo Simón confundido.

Ya habían llegado a la entrada de sus casas; estaban atrás de sus casas y Simón se paró en seco al igual que Ámbar.
Había un silencioso hasta que por fin Ámbar habló.

-¡Enserio no puedo creer que Ximena sepa patinar!.Solo espero que no gane la competencia. Tengo que admitir que patinan bien pero no tanto como nosotros.- dijo Ámbar enojada y a la vez sonriendo.
Cuando Ámbar terminó la frase Simón se quedó viendo fijamente los ojos de Ámbar y poco a poco se acercaba a Ámbar. Ámbar podía sentir su respiracion, Simón se sentia nervioso. Antes de que Ámbar pudiera decir algo Simón se acercó a sus labios y la besó.Ámbar estaba sorprendida pero terminó besándolo.
Fue un dulce beso, los labios de Simón eran suaves y encajaban perfectamente con los de Ámbar. Simón puso su mano en su mejilla y la otra arriba de su cintura mientras que Ámbar las puso en su cuello.

[Debo admitir que sentí muy lindo y hubo sentimientos encontrados].

Al terminar él beso, los dos terminaron con una sonrisa en sus rostros la cual  no podían esconder. Ámbar estaba sonrojada y estaba realmente feliz, tenia que admitir que empezaba a sentía algo por Simón pero no estaba segura hasta que Simón la besó y Ámbar ya sabía lo que realmente sentía.

-Bueno Ámbar, ahora ya te diste cuenta de quien es la persona especial.- contestó Simón nervioso.
Ámbar solo sonrió y rodó los ojos de una manera tierna.

-Ehh, bueno, ¿ya nos vamos?.- preguntó Ámbar nerviosa.

-Ehh, si... Vamos.- dijo Simón sonriendo.

Ámbar y Simón llegaron a sus casas y se despidieron para entrar a sus casas.

-Bueno, bye Simón... Nos vemos él Lunes.- dijo Ambar sonriendo.

-Si, adiós Ámbar.- le contestó Simón y se despidió de ella para luego entrar a su casa.

Ámbar también hizo lo mismo y al entrar se encontró con quien menos se esperaba.

MITADES PERFECTAS (SIMBAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora