Embarazado de mi Vampirito

Mi nueva sensación.

Narra Marshall:

Mis ojos abrieron lentamente,mi vista estaba nublada y mi cuerpo inmóvil,comencé a recuperar la vista poco a poco mi visión ya era más clara que la de antes,pero note que no estaba en casa me encontraba en una habitación con paredes blancas al parecer me encontraba en un hospital,mi cuerpo comenzo a tener un poco de movilidad,como pude me sente en la cama pero me detuvieron unos tubos de sangre conectado a mi y unas cuantas cosas más en mi cuerpo, ¿pero que me habrá ocurrido?

Mire aquella ventana que se encontraba en la habitación,y mi vista se enamoro la ver aquella noche tan bonita el cielo perfento,se encontraba despejado y las estrellas eran hermosas ya que venia acompañada de su amiga la luna.

-Que hermosa noche-dije con mis ojos llenos de brillo.

Pero derrepente escuche la puerta abrirse de golpe,voltie mi mirada y vi aquellas personas,uno de ellos estaba llorando y los otros se quedaron sorprendido,me asuste tanto aver aquellas personas mirándome,de escondida tome una de las almohadas para atacar pero ellos parecia estar sorprendido,uno de los se comenzó acercar a mi con esos ojos llorosos y queriendo tomar mi mano,¿quien se cree para tomar me la mano? Ademas no me dejaria tomar la mano de un chico gordo como él.

-¿quien eres?-dije confundido,a lo quellos quedaron impactados.

-¿acaso no nos reconoces Marshall?-dijo la gata.

-no,y ni se quienes son ustedes-dije furiosos,cada vez se hacían más irritante para mi,tienen suerte que tengo paciencia.

El gordito quedo confundido y asustado a mi reacción asi que salio de la habitación.

-Marshall debes de hacer el esfuerzo en recordarnos en esros momentos Gumball te nece...-dijo pero fui interrumpida por mí.

-¡¡YO NO CONOCO A NADIE!!...-mi paciencia se acabo queria estar solo-¡¡LARGO!!-las chicas se asustaron mas la gatita,la patetica humana saco su espada para después apuntarme con ella.

Salieron de la habitación sin quintarme la mirada,al quedarme solo en la habitación me acoste nuevamente en la cama ya que me dolia la cabeza cerre mis ojos y me relajé pero para mi mala suerte fue imposible,mi cabeza daba vuelta y en mi mente solo venia el nombre de Gumball,pero derrepente escuche la puerta abrirse.

-he dicho que...¡¡LARGO!!-dije lanzando una almohada aquella persona llamada...

-Marshall soy tu doctor-dijo algo serio.

-¿ah? Lo siento-dije algo avergonzado.

-no te preocupes,a lo que te venía a decir es que ya te dieron de alta,puedes regresar a casa-dijo simpático.

-gracias doctor-dije nervioso.

Después de una horas de vestirme me dirigia con las enfermeras para hacer los papeleos para salir de este lugar escalofriante.

Al salir del lugar todo me parecia extraño no sabia hacia donde dirigirme,pero para mi buena suerte emcontre a alguien en mi camino.

-¿ah Disculpa tu sabes quien soy y donde vivo que m...-dije nervioso pero fui interrumpido.

-¿Marshall?-dijo un chico de fuego que en sus brazos llevaba un bebé-¿que estas haciendo aquí?-dijo pero no respondí,me quede confundido.

-lo siento pero no te conozco,y lo único que necesito es llegar a casa-el me miro confundido.

-de acuerdo te llevaré a casa-dijo el chico de fuego.

Caminamos directo a mi hogar y en el camino me venia hablando sobre ese joven llamado Gumball,pero yo solo le respondí que no lo conocía,y el aun me veía más raro que la primera vez.Al llegar observé un enorme castillo,¿esta sera mi casa? ¿acaso soy un rey?Muchas preguntas venían a mi cabeza,segui caminando hasta llegar a la gran puerta,voltie a ver al chico confundido pero el me hacia seña de que tocará,toque tres veces donde una pequeña personas de caramelo me atendió.