Joerick's Life

Capítulo 17

Narrador omnisciente

Las semanas pasaban, Erick y Joel cada vez estaban más distanciados. De vez en cuando sus miradas se encontraban cuando uno de ellos dos miraba al otro. Erick por un lado, trataba de transparentar una relación que no existía ante las redes sociales y sus fans, algo que a las cncowners les molestaba mucho, y a las Joerick shippers aún más. Pero debía sostenerlo por decisión de Renato.

Y por otro lado se encontraba Joel, esquivando los momentos en que Nina estaba presente, trataba de ocultarlo pero sufría mucho viendo al hombre que amaba al lado de otra persona. Se arrepentía mucho de las palabras que había dicho en su ultima conversación con Erick, pero eso había dado lugar a un distanciamiento que necesitaban. Pasaba la mayor parte del tiempo con Zabdiel y Chris, lo que a Erick le molestaba mucho y Joel podía notar los celos del ojiverde.

Ya casi ni conversaban, y si lo hacían, era por cuestiones de ensayos, solo trabajo. Sin embargo, Joel había entablado una buena relación con Nina, ya que esta se acercaba a Joel cuando no se encontraba con su novio. 

Los chicos seguían en México, y lo harían por dos días más ya que se encontraban cubiertos de promo y conciertos por este país. Hoy era el único día libre que tendrían y solo Joel y Erick no tenían planes, los demás saldrían con sus familiares que estaban en el país. 

-Oye, quiere hacer algo hoy? Dijo Erick al ver a Joel en el lobby del hotel. 

-Si, dijo Joel con una sonrisa. Quiero descansar, estos días han sido agotadores. Dijo Joel para luego darle la espalda a Erick y yéndose al comedor. 

Erick no se dio por vencido ante la respuesta de Joel y lo siguió hasta el comedor. 

-Si quieres podríamos hacer algo juntos, nos quedaremos solos por la tarde. 

-Tu no verás a tu novia? Dijo Joel un poco molesto. 

-No, prefiero quedarme contigo. Dijo Erick acercándose un poco a Joel.

Al escuchar esa respuesta del ojiverde Joel no pudo resistirse a sonreír. Pero luego de unos segundos recordó que su relación con Erick no podía ser y que debía alejarse lo más posible de el.

Erick al ver a Joel pensativo supuso lo que estaba pasando por la mente del mayor y lo interrupió hablando nuevamente. 

-Podemos comprar helado y ver una película en el lobby si quieres. Dijo Erick simpaticamente. 

-Esta bien, solo porque no tengo nada para hacer. La veremos en mi cuarto, pero tu compras el helado. Dijo Joel para luego retirarse del comedor dejando a Erick solo. No sabia si había sido la mejor decisión de aceptar la propuesta de Erick, pero si sabia su necesidad de tenerlo cerca, de compartir algo juntos como lo hacían antes. 

Erick se sentía feliz, sintió que era una nueva oportunidad para acercarse a Joel y no la perdería. Corrió a la heladería más cercana para comprar los gustos favoritos de Joel. 

Al llegar al hotel, ya con el helado en mano, Erick se encontró con sus los demás chicos y Renato en la puerta, se despidieron y corrió dentro del edificio para encontrarse con Joel ya que todos estaban de salida. 

-Traje tus helados favoritos, dijo Erick mientras golpeaba la puerta del mayor. 

-Pasa,contestó Joel cediéndole el paso al menor para entrar en la habitación. 

-Ya he elegido una película, dijo Joel buscando el control remoto de la televisión. 

-Buenísimo, dijo Erick acostándose en la cama y abriendo el helado que había comprado.

Al encontrar el control remoto, Joel se sentó en la cama, al costado de Erick y puso play a la película. Ellos amaban ver comedias juntos y Joel pensó que seria una buena idea ver una para que la situación no fuera tan tensa. 

La película transcurría y ellos no paraban de reír, Erick de vez en cuando miraba de reojo la hermosa sonrisa de Joel, y este ultimo hacia lo mismo cuando el ojiverde estaba concentrado en el film. 

-Eres hermoso, dijo Erick mientras miraba como Joel reía con la película. 

-¿Qué? Dijo Joel haciéndose el desentendido.

-Que eres el hombre más hermoso de este mundo Joel. 

-Cállate y ve la película dijo Joel tensándose por lo que el cubano le había dicho.

-¿Como haces Joel? 

-¿Como hago qué? Preguntó el mexicano.

-Como haces para olvidarte de mi y de todo lo que habíamos formado. Dijo Erick un poco entristecido. 

-Solo no lo hago, contestó Joel. Pero comprendí que no es posible que estemos juntos Erick, Renato lo dijo. 

-Y lo que tu y yo sentimos no es importante? Contestó Erick acercándose cada vez más a Joel. 

-Claro que lo es. Dijo Joel mirando a los ojos a Erick, extrañaba tanto que esos ojos lo miraran. 

-Aún me amas Joel? Preguntó Erick con miedo a la respuesta. 

-No responderé eso, contestó Joel dibujando una sonrisa en su rostro. 

-¿Por qué tenias que sonreír justo ahora? Dijo Erick y lo tomo rápidamente del mentón uniendo los labios del mayor con los suyos. La sonrisa de Joel era la debilidad el menor, no podía resistirse a esos labios carnosos y rosados que el mexicano tenia. 

-Detente, dijo Joel alejándose un poco de los labios del menor. 

-No, por favor no Joel, no me pidas que me detenga. Contestó Erick con la voz decaída.

Joel no pudo resistirse a el pedido del menor y sonrío nuevamente para luego ser el quien lo besara. 

El beso fue largo e intenso. Ninguno de los dos podía resistirse a los labios del otro. Los besos fueron largos y tiernos, llenos de amor. Se extrañaban tanto, se podía notar en el nivel de excitación y pasión que sus besos dejaban ver. 

Fue una tarde llena de besos y abrazos. Pero la noche llego y se acercaba la hora en la que todos regresarían al hotel.

-Debes irte, dijo Joel levantándose de la cama en la que habían pasado horas acostados besándose. 

-Lo haré, solo si me das un ultimo beso. Dijo con una sonrisa en su rostro y levantándose de la cama. 

Joel se acerco al menor y deposito un corto beso en sus labios. 

-Adiós Joelin, dijo Erick volviendo a besar los labios de Joel.

-Adiós, dijo Joel abriéndole la puerta al cubano. 

-Tal vez pase más tarde a terminar de ver la película, que dices? Dijo Erick guiñándole el ojo a Joel quien no pudo evitar sonreír al escucharlo. 

-Adiós Colon, dijo Joel y cerró la puerta de la habitación. 

No estaba seguro si era lo mejor, pero se sentía nuevamente completo. Erick lo hacia feliz, lo hacia sentir vivo y eso era imposible de evitar.