4-Recuerdos

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Estaba oscuro, pero sentia que mis pies y manos se movían. Sabía que estaba buscando algo en esa oscuridad y de repente un sentimiento de triunfo me lleno al sentir que lo había encontrado. La luz volvió alumbrar mis ojos y me encontré con la cara de un niño que me mira divertido.

ꟷYa me atrapasteꟷdijo con una sonrisa

ꟷEs que soy la mejor en este juegoꟷrespondí orgullosa

Escuchamos la voz de alguien llamándolo. Noté como el temor recorría su cuerpo.

ꟷParece que algo pasoꟷdijo con temor en su vozꟷNos vemos despuésꟷSe despidió mientras corría hacia la persona que lo llamo, la cual se encontraba en el umbral del edificio que estaba enfrente del arenero.

Ahora me encontraba sola en el arenero. No me gustaba estar sola, porque la tristeza me inunda al recordar el motivo por el que estaba ahí. Miré hacia el gran edificio en donde hace instante había entrado mi amigo, en el entraba y salía gente vestida de blanco. Tenía miedo de que me llamen porque seguro me dirían algo que no quiero oír. Por ello me senté en la arena y apreté bien fuerte mi oso de peluche.

De la nada el escenario cambio. Volví a estar nuevamente en el arenero con el niño con quien jugaba antes, pero esta vez me encontraba abrazándolo.

ꟷYa no llores. Te aseguro que no se va a morirꟷle dije dándole fuerza a quien utilizaba mi hombro como pañuelo.

ꟷDicen que no va a despertarꟷrespondé con la voz entre cortada.

ꟷNo hay que perder la fe, siempre hay que tener esperanza. Mi mamá siempre dice esoꟷaseguré con una sonrisaꟷ. Ya vas a ver que se va a levantar.

El niño me miró con sus ojos rojos y en sus pequeños labios surcó una sonrisa. Eso me daba un poco de paz, no me gustaba verlo llorar.

Un nuevo escenario se presentó. Ya no estaba en el arenero ahora me encuentro en una habitación un poco oscura, donde había una cama en la cual una persona dormía. Aunque esta estaba conectado a muchos aparatos. No podía ver a la persona porque su cama estaba bastante alta y yo era muy pequeña. Lo único que podía ver era como el niño que siempre me acompañaba tomaba su mano con sus pequeñas manitos y la apretaba con fuerza mientras sus lágrimas surcaban su pequeña carita. Un grito desgarrador se escuchaba de su infantil voz

ꟷNo me dejes, no te vayas ꟷpidió el niño desconsoladoꟷme voy a portar bien, ya no voy a romper tus cosas. Pero no te vayasꟷ Siguió suplicando mientras sus lágrimas se impregnaban en el dorso de la mano de esa persona que estaba en la cama.

Sentía una gran presión en el pecho, yo también quería llorar. Sabía que no conocia a la persona que se encontraba en la cama, pero siento un gran afecto por ese niño que lloraba sosteniendo su mano. Puse mi oso de peluche en mi cara para que se borren mis lágrimas.

El escenario nuevamente había cambiado. Sabía que el motivo por el que me encontraba en ese lugar se había terminado. Un dolor grande me embarga. La persona por la cual estaba ahí ya no estaba.

ꟷMi abuelito se fueꟷle comuniqué con tristeza a mi amigoꟷ.Ya no vendré más.

El pequeño niño me miraba desilusionado. Empezó a mirar al piso haciendo que su flequillo tape sus ojos.

ꟷYa no voy a tener a nadie con quien jugarꟷdijo en tono triste

Sabía que la persona por la que él estaba, aun no se había ido. Por ello él se tiene que seguir quedando. Aun había esperanza

ꟷMi mamá les dio nuestro número a tus papas. Así que seguramente vamos a encontrarnos para jugarꟷle aseguré con una sonrisaꟷ. Pero por ahora para que no te sientas solo. Toma a Toby. Abrázalo cuando estés triste y cuando nos volvamos a ver me lo devuelvesꟷ extendí mis manos con mi peluche en ellas hacia él.

Perdóname por ser mujerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora