Mi mundo perdió la luz aquel día, ese cruel momento en que fui vendió a cambio de un poco de dinero, poco podía imaginarme sobre lo que estaba por vivir; mi libertad, mis sueños e inclusive mi propia vida ya no me pertenecían; mi mente, cuerpo y alm...
Ninguno hemos sido capaz de intercambiar palabras, las cosas han sido tan repentinas que me siento completamente confundido, aun más por la actitud de Kendrick quien me mira fijamente, pasados unos instantes me aproxime a la camita donde estaba destinado a dormir, basto darle un pequeño toque para saber lo mullida que estaba-. Esta... ¿Esta cama es mía? -pregunte confundido, en el orfanato todos los niños dormíamos en el piso con unas cobijas las cuales debíamos pelear hasta con los dientes. Al momento en que Kendrick me brindo un signo de afirmación lentamente me recosté en la camita, me sentía tan agotado que no tarde mucho en caer dormido, apenas y pude sentir como me cubrían con una cálida cobija.
Al día siguiente al despertarme pensé que todo lo ocurrido la noche anterior sería un simple sueño, pero si fuera así, ¿Qué clase de imaginación tengo?, la cruel realidad me golpeo nada más ver a Sebastián ingresar por la puerta-. ¡Esto no puede ser! ¿Desde cuando un esclavo se levanta después que su señor? -ni bien pude terminar de despertarme cuando ya me encontraba en el cuarto de baño, he tardado bastante debido a que era mi primera vez tomando un baño decente, ni siquiera podía distinguir el shampoo del acondicionador y del jabón del cuerpo.
Una vez pude terminar me encontré a Sebastián esperándome con un cambio de ropa elegido por Kendrick quien me esperaba para tomar el desayuno, al llegar al comedor él ya había empezado a comer-. Buenos días -me dijo mirándome con una sonrisa en sus labios.
-Buenos... días.
-¿Dormiste bien en tu cama?
-Si...
Kendrick me ha hecho algunas preguntas más mientras comíamos, es realmente confuso el cambio tan brusco de personalidad que tiene sumamente confundido, la mañana transcurrió lentamente, lo único que hice fue seguir a Kendrick a cualquier lado de la mansión a donde fuera, no tengo realmente claro que es lo que tengo que hacer, ni siquiera me han dado instrucciones sobre las tareas que debo realizar-. ¡Adei! -cuando escuche mi nombre ser exclamado de un brinco mire a Kendrick quien me ha dirigido una mirada confusa-. Estas bastante distraído... ¿Estas aburrido?
-Un poco... quizás -me asusta abrir la boca, siento como si cualquier cosa pudiese volverse en mi contra, cuando se me ha hecho una señal para acercarme lo he hecho, Kendrick me pido sentarme en su regazo, confuso obedecí a la orden, no paso mucho cuando empecé a sentir como unas manos se paseaban por debajo de mi ropa tocándome con gran gentilidad, pero pese a lo gentil podía sentir como mi cuerpo se tensaba y mi boca volvía a hacer sonidos raros-. A... amo... ngh...
-Vamos, relaja el cuerpo.
Los toques de Kendrick, el tono de su voz, todo lo que hiciera estaba haciendo reaccionar raro a mi cuerpo, no paso mucho cuando ambos nos pusimos de pie y una de las manos de Kendrick descendió hasta mi parte inferior comenzando a masturbarme, mientras con la mano que tenia libre elevo mi rostro para darme un beso que levemente silencio mis raros sonidos, al finalizar el beso mis piernas cedieron ante el peso de mi cuerpo que tuve que sujetarme de Kendrick para seguir de pie, me siento sofocado y mis pensamientos van de aquí para allá totalmente alborotados. Pudiendo sentarme poco a poco logre estabilizar mi respiración, ha sido mi primera vez experimentando algo así.
Entrada la noche Kendrick y yo nuevamente tendrías que asistir a una fiesta, nuevamente me he visto en la obligación de usar una de esas cosas que vibran y vestir ropa provocativa además de tener que andar como un perro, espero que en esta ocasión nadie intente morderme. La fiesta ha sido más animada que la anterior, andar sobre mis manos y rodillas termina dejando esas partes de mi cuerpo completamente adoloridas.
-Joven Kendrick su mascota es realmente adorable, ¿Dónde la compro?
-Usted mejor que nadie saber que yo mismo consigo mis propias mascotas, pero si gusta le puedo vender algo similar.
-¿De verdad lo haría?
Escuchar esto me hizo pensar en los chicos de la choza a donde entre antes de ser traído aquí, me asusta un poco saber los métodos a los cuales habrían sido sometidos como para quedar en el estado en que lo habían hecho, ahora que lo pienso, cuando los vi no note alguna seña de brusquedad o que los hubieran golpeado, inclusive cuando los ayudantes de Kendrick se les acercaban no les temían, al contrario, si se imagina bien podría notarse como si los quisieran.
-¿Tanto dinero? -escuche exclamar a un hombre.
-Obviamente, le recuerdo que es negocio peligroso -es sorprendente la calma que tiene Kendrick, ni siquiera ha elevado el tono de voz, es diferente a como se ha comportado gran parte del día, cuando estuvimos solos se mostró muy tranquilo e incluso me sonrió luego de besarme. Como si de una mala broma se tratase el hombre se ha puesto tan furioso que al lanzar su copa violentamente contra el piso por error me ha terminado dando a mi en la cabeza-. ¡Adei! -al instante he podido sentir como algo me descendía por el rostro y al tocarme mi mano se ha manchado por un líquido carmesí. La fiesta lejos de seguir se vio bruscamente interrumpida, todos los invitados gentilmente fueron conducidos a las salidas quedando únicamente el sujeto que me lanzo la copa-. Sebastián, ocúpate de nuestro invitado como se merece, llevare a Adei a la habitación.
Kendrick me llevo hasta nuestra habitación donde se ocupo de tratar mi herida la cual por fortuna no era grave y únicamente me dejo con un enorme dolor de cabeza-. Me siento mareado -comente tocándome la cabeza que no paraba de dolerme.
-Duerme, ten, esto te ayudara.
-¿Está molesto conmigo?
La única respuesta que recibí fue una caricia en la cabeza, Kendrick estuvo mirándome hasta que me quede dormido, lo ultimo que pude escuchar antes de desconectarme fue un estruendoso sonido, pero no me fue impedimento caer dormido.
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Hasta aquí el cap, espero les haya gustado
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Nos escribimos y nos leemos en el próximo capítulo
¡SAYONARA!
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