Han transcurrido dos días desde que el amo Kendrick debió dejar la mansión por cuestiones de trabajo, sin embargo, a diferencia de la otra ocasión en que se fue, esta vez no consigo sentirme tranquilo, siento preocupación. Por otro lado, Sebastián se ha tomado muchas libertades en cuanto a aproximarse a mí, mientras nuestro está en casa Sebastián evita acercarse a mi tanto como le sea posible, pero una vez quedamos solos no pierde oportunidad para agredirme e insultarme en todos los niveles que le sean posibles.
—Disfruta tu comida.
Nuevamente lo esta haciendo, me ha traído poco menos que la mitad de la comida que las personas consumen durante el desayuno, así como en la comida y la cena, mi alimentación jamás me es suficiente, cuando Kendrick está en casa mi consumo de alimento incluso puede llamarse excesivo. Sin embargo, me niego a quejarme, a reclamarle algo a Sebastián, hacerlo seria como aceptar una victoria, jamás me rebajare a darle el gusto de haberme vencido, aun si Sebastián llego a se alguna vez la mascota del amo Kendrick, ahora soy yo quien atrae su atención y en quien vuelca todas sus emociones.
Para pasar mi tiempo en los días en que el amo Kendrick se aleja de la mansión he comenzado a aprender a leer y escribir, aun si esto no es algo que alguien como yo debería aprender, Kendrick no me ha negado dicho capricho, desconociendo muchas palabras y significados he comenzado con libros infantiles subiendo poco a poco la dificultad de los libros, sin embargo, he intentando leer algunos libros que el amo Kendrick acostumbra a leer, y en ocasiones me parece que están en otra lengua. Estando en la biblioteca puedo ocultarme fácilmente de Sebastián quien no suele buscarme bien debido al tamaño que tiene el lugar, con tantos anaqueles llenos de libros no suelo quedarme en un mismo sitio lo cual solo me ayuda a ocultarme mejor.
Transcurridos algunos días más el amo Kendrick finalmente regreso, para evitar ir a molestarlo lo he esperado en su habitación, pero en cuanto lo vi ingresar por la puerta algo me hizo perder los colores, sus ropas se encontraban rasgadas y cubiertas por sangre, cuando se aproximó a la cama ni pude levantarme cuando me encontré bajo el inconsciente cuerpo de Kendrick—. ¿A-amo? —al lograr ser libre apenas y pude mantener mi mente concentrada, tras sacar el botiquín de primeros auxilios que Kendrick guarda en su armario lo he desvestido y trate sus heridas, las dudas me invaden, quiero saber donde estuvo para terminar así de herido, incluso tiene una herida en uno de sus costados que comúnmente se hace con una daga.
Justo cuando he terminado de tratarle las heridas el amo Kendrick ha despertado tomándome de golpe por los hombros—. ¿De donde ha salido toda esa sangre? —me ha preguntado de forma exaltada, al mirarme me he percatado la cantidad de liquido rojo que cubre mis ropas.
—No... no es mía —dije mirando a Kendrick con toda la calma que pude—. La... la sangre es suya...
Ante mi respuesta Kendrick se ha mirado a si mismo, y como si una gran paz volviera a su cuerpo se dejó ir hacia atrás volviendo a recostarse—. Lo siento. Eh debido asustarte ¿verdad? —sin decir una palabra me he acurrucado junto a Kendrick colocando mi cabeza sobre su pecho, finalmente deje a mis emociones manifestarse, al ver mis lágrimas deslizarse por mi rostro Kendrick me he abrazado en un intento por tranquilizarme. Ver tanta sangre ha sido algo sumamente chocante para mí, por momentos sentía como si las heridas de Kendrick no fueran a dejar de sangrar, incluso no paso ni un momento en que no me asegurara que estuviera respirando. Pasado unos instantes mi llanto se debido ante mi propio agotamiento—. ¿Ya estas más tranquilo?
—Si —me siento cansado, mis ojos me duelen y mi garganta me punza un poco.
Kendrick acariciándome la cabeza con un gentil movimiento me obligo a mirarlo, en su mirada puedo ver un cierto grado de pena, como si estuviera apenado—. Adei, lamento haberte preocupado. Tanta sangre ha debido conmocionarte —permaneciendo en silencio le he dado oportunidad para continuar hablando—. Durante uno de mis negocios, un cliente no estuvo muy conforme con el precio de la mercancía que le vendí e hizo que sus matones me atacaran.
—¿Por qué no fue a un hospital?
—Los hospitales lo único que buscan en gente a la cual matar para poder vender sus órganos, jamás he ido a un hospital, siempre le pido a un médico privado atenderme.
Las heridas del amo Kendrick fueron revisadas por un medico hasta que ya era muy noche, pero pese a la gravedad su vida no corría peligro, Sebastián pese a insistir en permanecer en la habitación, Kendrick se negó diciendo que yo era asistencia más que suficiente. Bajo orden de Kendrick todos los sirvientes incluido Sebastián se mantendrían alejados de la habitación hasta no ser llamados.
Estando solos el amo Kendrick con cierta gentileza y algo de agresividad me ha dado un apasionado beso en los labios, hemos sostenido el beso ignorando ligeramente la necesidad por llenar nuestros pulmones con aire, al alejar nuestros labios hemos podido mirarnos mutuamente de forma atenta—. Amo Kendrick...
*********************
Hasta aquí llega el cap, espero les haya gustado.
No olviden votar o comentar.
Zukulencia en el próximo cap.
:v Me disculpo por la tardanza con el cap pero acabo de iniciar con mi canal de YouTube y pues ya es menos tiempo para escribir pero prometo no abandonar mis novelas, seguirán disfrutando mis loqueras por mucho tiempo XD
Nos leemos y nos escribimos en el próximo capítulo.
¡SAYONARA!
ESTÁS LEYENDO
Esclavo (YAOI R-18)
RandomMi mundo perdió la luz aquel día, ese cruel momento en que fui vendió a cambio de un poco de dinero, poco podía imaginarme sobre lo que estaba por vivir; mi libertad, mis sueños e inclusive mi propia vida ya no me pertenecían; mi mente, cuerpo y alm...